Concamin: altos costos de energía elevarán precios
Los industriales del país manifestaron su hartazgo por lo que consideran una “inaguantable” política de precios en tarifas de energía y advirtieron que de continuar los aumentos, tendrán que repercutirse al consumidor final.
Con esto, afirmó el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamín), Ismael Plascencia Núñez, la meta de una inflación inferior a 4 por ciento en 2008 difícilmente podrá cumplirse. “Nadie puede aguantar las alzas en tarifas eléctricas que sólo en los dos primeros meses del año acumulan 16.5 por ciento”, dijo.
El industrial citó a una conferencia de prensa para insistir en las acciones urgentes que los tres niveles de gobierno en el país deben adoptar para enfrentar los “efectos asociados al enfriamiento de la economía estadunidense”.
Uno de los puntos que los industriales consideran indispensable en el aumento de la competitividad. Sin embargo, Plascencia Núñez dijo que “la Concamín expresa su inconformidad ante la magnitud de los incrementos a las tarifas eléctricas en los meses de enero y febrero”, que son respuesta a una nueva fórmula impulsada por el gobierno federal pero estrechamente ligada a las decisiones de un mercado altamente especulativo.
Falta de planeación
Sin embargo, dijo, los aumentos en las tarifas hacen inevitable que los sectores productivos, particularmente aquellos que son altamente consumidores de energía, impacten los precios de sus productos al consumidor final.
“Ocurren cosas tan inverosímiles como el hecho de que siendo un país productor de petróleo, tengamos que fijar las tarifas de la energía en los mercados externos o, como en el caso de la Comisión Federal de Electricidad, que teniendo conocimiento de que el carbón aumentaría en diciembre, no se hubiera abastecido con anterioridad y suficiencia”, se quejó el líder de los industriales.
Todo esto, afirmó, representa falta de planeación y de una política industrial definida. Consideró que los recursos contemplados en el Fondo Nacional de Infraestructura permitirán enfrentar la crisis económica, pero siempre y cuando se adelanten las licitaciones de los grandes proyectos. “Todavía estamos en tiempo, después va a ser más difícil rescatar la economía nacional”, alertó.
También, dijo, es necesario “acelerar los trabajos que nos permitan mejorar el ambiente para los negocios, a partir del impulso a los cambios estructurales aún pendientes y adoptando las decisiones que contribuyan a elevar la eficiencia de las empresas, a reducir sus costos, mantener el empleo y restablecer las cadenas productivas”.