CRONISTA DE LA EXPERIENCIA FEMENINA

Escritores mexicanos manifiestan su júbilo por el premio otorgado a la narradora

Ponen de relieve “el esclarecedor” quehacer literario de la ganadora del Nobel

Alentador, que la Academia Sueca cambie de criterio y elija a una mujer: Poniatowska

Propone una fascinante mirada sobre la evolución de la feminidad, dice Verónica Volkow

Fabiola Palapa, Carlos Paul y Fernando Camacho

La concesión del Premio Nobel de Literatura 2007 a la narradora británica Doris Lessing fue recibida de muy buen grado en el medio literario mexicano, sobre todo por las mujeres, quienes destacaron la importancia que tiene el hecho de que la Academia Sueca parezca haber ampliado sus criterios de trabajo, lo que ha permitido que más escritoras figuren como aspirantes a recibir el máximo galardón de las letras.

Varios autores consultados por La Jornada pusieron de relieve su carácter libre y su participación en el movimiento contra el colonialismo europeo en África y, en general, su solidaridad con todas las causas en favor de la justicia y la igualdad.

Dueña de un estilo “nervioso e intenso”, Doris Lessing no dejó que sus convicciones políticas la encasillaran. Militó en el Partido Comunista de Gran Bretaña, pero se alejó de éste sin dejar de ser una artista libertaria; habló sobre los sentimientos y la vida de las mujeres, aunque nunca se ha definido a sí misma con la etiqueta de “feminista”.

A continuación, las reflexiones de algunos escritores y escritoras mexicanos, quienes celebran por diversos motivos la entrega del máximo premio literario a Lessing.

Estilo nervioso, intenso y rápido

Elena Poniatowska, escritora y periodista: La entrega del premio a Doris Lessing es una maravilla. Estoy encantada porque es una gran escritora; yo he leído varios de sus libros. Además de El cuaderno dorado, que todo mundo reconoce, es una espléndida autora de muchos otros, por ejemplo El verano antes de la oscuridad, Yendo a casa, Las memorias de un sobreviviente, Persiguiendo a los ingleses, El hábito de amar y La búsqueda de Martha.

“Lessing perteneció al Partido Comunista y es feminista, siempre ha apoyado a las mujeres. Ha escrito obras maestras con un estilo nervioso, intenso, rápido. También se puede decir que es una escritora impresionista, como muchos ingleses, entre ellos D.H. Lawrence.

“Para las mujeres es muy alentador que le den al premio a ella, como a la polaca Wislawa Szymborska (en 1996). En los recientes premios se ve que está cambiando el criterio de la Academia Sueca, y esto beneficia muchísimo a las mujeres. Ojalá le pudieran dar el Nobel de manera póstuma a Emily Dickinson, quien escribió en su casa, para sus sobrinos.”

Margo Glantz, escritora: “Me parece un premio merecidísimo. Primero porque es mujer, y aunque esto no es suficiente para dar un reconocimiento, regocija; es una de las mejores escritoras y una mujer que ha participado de una manera muy importante en cosas políticas en su país; además, tuvo la fuerza de voluntad para publicar un libro con seudónimo para ver cómo funcionaban las editoriales y le costó mucho trabajo que aceptaran su obra al usar un nombre desconocido, porque nadie le quería publicar, hasta que un editor se dio cuenta de que era Doris y la publicó.

“Con eso demostró la poca seriedad de las editoriales y la incapacidad que tienen para detectar autores importantes nuevos, porque no se atreven a cometer errores y tienen miedo de que no vendan porque son fundamentalmente comerciales. Ella logró exponerlos.

“Es una gran escritora y me parece magnífica. Es una mujer grande, está en la cuarta edad, y ha mostrado aspectos de la vida de las mujeres, aunque se piensa que la literatura es neutra y puede ser escrita lo mismo por un hombre o por una mujer. “Pienso que no es así; ella demuestra que hay cosas muy particulares en la mirada femenina que se transparenta en la escritura de una mujer.”

Bárbara Jacobs, escritora: “Al reconocer a Doris Lessing con el Premio Nobel de Literatura se valoriza el significado intrínseco de su obra, que es el de la búsqueda de la adecuación de la mujer en un mundo de hombres.

“El apellido de su protagonista principal, Quest, ejemplifica la intención de búsqueda de la autora. Situar su obra en un país africano expande la naturaleza de la búsqueda, al dar a la existencia un carácter también social.”

Verónica Volkow, poeta: “Doris Lessing trabaja el tema de la feminidad. Para mí fue una autora muy esclarecedora, sobre todo en mi juventud. Leía con pasión sus cuentos.

“Es una mujer inteligente y comprometida con la vida, muy genuina, una extraordinaria escritora. Es una de las pioneras del movimiento feminista por la honestidad con la que retrata la condición femenina en su obra, es realmente fascinante esta mirada que tiene sobre la mujer en sus diferentes épocas. Sus retratos son maravillosos.

“La obra de Doris es tan inmensa que muestra este poder femenino que surge en el siglo XX, con todos los altibajos que ello implicó y finalmente lo trasciende a través de la escritura.

“Me apasionó su obra cuando la leí a los veintitantos años, era como una de mis gurús en el camino hacia mi propio ser.”

Mujer sorprendentemente libre

Luis Hernández Navarro, periodista: La distinción a Doris Lessing me parece un premio merecidísimo, sin embargo creo que llega tarde en relación con su edad y su obra, pero llega, a diferencia de otros escritores a los que nunca se les otorgó.

“Es un caso en el que la vida de la escritora resulta tan fascinante como su obra misma. Gracias a su autobiografía, integrada por dos tomos, es muy fácil ubicar los puntos en los que la ficción y la realidad se imbrican; la realidad alimenta a la ficción.

“Es una escritora que encuentra en la literatura un terreno muy fuerte de reflexión y construcción de sí misma. Es una mujer sorprendentemente libre, que dejó a su primer marido para hacer su vida, y que está estrechamente ligada a las luchas anticolonialistas y al Partido Comunista.

“Describe de manera brillante las luchas antiapartheid; sin ninguna concesión igual habla sobre su desencanto del comunismo, el cual está atravesado por el agotamiento de su relación con su entonces pareja, quien emigra a Alemania Oriental y acaba convirtiéndose en un alto funcionario del Partido Comunista Alemán, especialista en cuestiones del continente africano.

“Se encuentran también las narraciones de Lessing de su llegada a Londres. Y su vida allí, otra vez, la vive de manera notable, como una mujer libre, en el contexto de la posguerra, ganándole tiempo al tiempo, para escribir, criar y educar a su hijo, simultáneamente.

“Con su libro El cuaderno dorado se le asocia con el movimiento feminista, sin embargo, ella nunca se ha identificado con ese movimiento.

“Sí hace su vida como una mujer libre, pero no reivindica ninguna doctrina y toma distancia con respecto a ese movimiento que la reclama como un icono.

“Lessing ha tenido diversas etapas como escritora. En fechas recientes ha incursionado en cuestiones de ciencia-ficción, pero considero que lo más apasionante de su obra son esas descripciones de la tierra donde crece.

“Luego vienen, por ejemplo, La buena terrorista obra en la que con una fina ironía, hace un retrato de una generación, que se podría denominar como del pos 68; historia que de alguna manera ya no tiene que ver con su pasado.

“Sus libros en México, de su primera etapa, son muy difíciles de encontrar, hay que buscarlos en las librerías de viejo; en las de prestigio se encuentra sólo lo más reciente. Ojalá ahora se rediten y su obra sea más accesible.”