México ocupa el cuarto lugar mundial en consumo per cápita con 1.46 kilogramos
Aumentó 7.1% la producción de pavo en el país en 2005: unión de avicultores
Ampliar la imagen Tradicional cena navide�on el rey del festejo: el pavo FOTO Mar�Mel�rez Parada Foto: Mar�Mel�rez Parada
Josealfrediana: el pavo sigue siendo el rey... en la mesa decembrina. Ni las horneadas piernas de puerco, ni el suculento bacalao; tampoco los picantes romeritos o las húmedas tostadas de pata le hacen sombra. Cientos de miles de personas precavidas ya compraron un guajolote crudo o ahumado del millón 735 mil puestos a la venta para esta temporada. Todos son pavos mexicanos.
Tal cantidad de aves representa 48.5 millones de dólares, informó el presidente de la Sección Nacional de Productores de Guajolote de la Unión Nacional de Avicultores (UNA), Francisco Javier Gutiérrez Luken, quien agregó que la industria ha tenido un crecimiento de 7.1 por ciento respecto de 2004.
"Esto es muy positivo para el sector, en virtud de que la producción de pavo para 2005 se ubicó en 13 mil 880 toneladas; el año pasado fue de 12 mil 967", precisó.
El ave, en su oferta de "entero", representa 70 por ciento del consumo nacional. El 30 restante se consume en subproductos, que por su bajo contenido graso está ganando segmentos del mercado y preferencia del consumidor.
Este animal es originario de México. La producción de carne para 2006, se estima en 5 millones de toneladas. En Estados Unidos la producción en 2004 fue de 2.4 toneladas; Unión Europea, 2 millones; Brasil, 240 mil; Canadá, 145 mil; Rusia, 15 mil.
En el país, Sonora es el primer productor (41 por ciento), Chihuahua le sigue con 38 por ciento y Yucatán con 16. Estados Unidos tiene el primer lugar en consumo per cápita (en 2004), con 7.6 kilogramos; México ocupa el cuarto sitio con 1.46 kilos.
En la actualidad hay 865 mil pavos. La industria generó 21 mil 600 empleos en 2004: 3 mil 600 directos y 18 mil indirectos. En México, se ha diversificado la producción e incrementado el consumo de productos preparados a base de pavo, como carne molida, hamburguesas, filetes,bistec, jamones y pierna horneada.
Los Parson
El director de Ventas de Pavos Parson, Benjamín Nevares Polanco, dijo que en Europa al pavo se le llama "el duque". "Nuestra empresa se ha sostenido en el mercado durante 30 años, y de nosotros es 40 por ciento de la producción nacional. La raza que manejamos es la doble pechuga, que es de un pavo blanco.
"Sólo trabajamos en México; hemos querido entrar a otros mercados, pero hay muchas restricciones sanitarias, como en el caso de Estados Unidos y Chile. Se están haciendo gestiones. La gripe aviar ocurre en otros continentes.
"Para esta temporada producimos 700 mil canales. El kilo se halla en los mercados de 33 a 39 pesos. Yo recomiendo el pavo mexicano porque es más sabroso. Los productores nacionales lanzaron una campaña con el lema 'Celebremos con pavo mexicano'. Nuestros animales tienen muy buena crianza."
-El pavo tiene fama de tener una carne muy seca.
-Somos los creadores del pavo jugoso. Las amas de casa saben prepararlo y les gusta cómo huele. Algunas usan vino o jugo de naranja. Aún es la mejor opción para la cena navideña.
"El señor Parson se nacionalizó mexicano. Nació en Estados Unidos y la empresa es ciento por ciento mexicana. Tiene su sede en Nuevas Casas Grandes, Chihuahua, más bien del lado de Sonora", agregó.
Esta carne se caracteriza por tener poca grasa y bajo nivel de colesterol. Hasta hace algunos años, el pavo sólo era considerado el platillo principal de festejos como Navidad o Día de Acción de Gracias, pero hoy, cuando los hábitos de consumo se orientan a tener un cuerpo sin exceso de grasa, el pavo es un alimento perfecto.
Además de ser sabrosa, la carne de pavo se puede preparar de la misma forma que el pollo. Tiene muchas proteínas, elemento base de toda célula. La pechuga es la parte más magra: 110 kilocalorías por cada 100 gramos. El muslo y las otras partes del pavo contienen 200 por cada 100 gramos.
Algunos consejos de descongelación, recomendados por la UNA, son: no hacerlo a la intemperie, ni con agua caliente, ya que pierde su jugo natural y su carne se endurece. Debe descongelarse en la envoltura original. Si no hay prisa, debe colocarse en una charola grande y dejarlo en el refrigerador. Dependiendo del peso, tardará en descongelarse de dos a tres días.
Si hay prisa, debe mantenerse envuelto, colocarse en el fregadero y cubrirse de agua. Debe cambiarse el agua las veces que sea necesario. Se descongelará un kilo por hora, aproximadamente. Hay que cocinarlo una vez descongelado.
En el caso de su presentación ahumada, el descongelamiento se efectúa metiéndolo en el horno caliente.