Rechazan versión de la FSTSE sobre falta de transparencia
El ISSSTE, la entidad pública más auditada, aseguran funcionarios
Hace más de 20 años que al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) no le alcanzan sus ingresos para pagar las pensiones de sus trabajadores. Para 2005 dispone apenas de la tercera parte de sus requerimientos en este rubro, por lo que el subsidio federal ascenderá a 32 mil millones de pesos.
Esta información es conocida por la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) desde siempre. De hecho, cinco de sus miembros integran la mitad de la junta directiva del instituto, y esa agrupación también forma parte de los órganos de gobierno del Fondo para la Vivienda del ISSSTE (Fovissste) y del Sistema Integral de Tiendas y Farmacias (Sityf), así como de la comisión de vigilancia institucional.
Por ello, opinaron algunos funcionarios consultados sobre el tema, están fuera de lugar los señalamientos del dirigente de los burócratas, Joel Ayala Almeida, respecto a la falta de transparencia en el ISSSTE y de que se deben auditar sus finanzas. En días pasados el senador priísta también dijo que la FSTSE carecía de información sobre el destino de los recursos económicos porque en las clínicas y hospitales se registran grandes carencias.
Información del instituto detalla que éste es la entidad pública "más auditada de todas". Cuenta con tres órganos de gobierno que en forma mensual y bimestral revisan todos los asuntos de la institución. Además existen tres contralorías, una en el Fovissste, otra en el Sityf y la tercera para el ISSSTE asegurador. En conjunto laboran para esos órganos de control alrededor de 350 personas, y se aplica un programa anual de auditorías en todas las áreas.
Las finanzas del ISSSTE también son evaluadas por la Auditoría Superior de la Federación, la Secretaría de la Función Pública y un auditor externo designado por aquella dependencia federal.
Los funcionarios consultados por La Jornada rechazaron las afirmaciones del senador Ayala Almeida, pues además de los integrantes de la FSTSE que participan en los organismos mencionados, él mismo asiste a las reuniones de la junta directiva del instituto. El gremio que representa a los burócratas del país tiene facultades de ley para plantear cualquier tipo de cuestionamiento sobre el manejo del presupuesto institucional, dijeron.
Sobre el déficit financiero que aqueja al instituto que dirige Benjamín González Roaro, los datos oficiales indican que desde 1983 "no alcanzan los recursos para pagar las pensiones y jubilaciones de más de 400 mil trabajadores retirados", resultado, entre otros factores, de las transiciones epidemiológicas y demográficas que ha experimentado el país en años recientes.
Desde entonces, el ISSSTE recibe un subsidio fiscal que año con año se incrementa. En 2005 estarán disponibles como recursos propios para el pago de las pensiones 11 mil millones de pesos, a los que se sumarán los 32 mil millones que aporta el gobierno federal. Para el ISSSTE la forma de subsanar el faltante es aumentar las cuotas de los trabajadores al fondo de pensiones.
Sobre las carencias que se reportan en la prestación de los servicios de salud en clínicas y hospitales, la información oficial destaca que durante 10 años se registró una constante baja en la inversión para la compra de medicamentos, equipo y mantenimiento de la infraestructura.
Hasta 2003 había un deterioro creciente de la capacidad instalada, porque la demanda crecía y los ingresos permanecían estancados. No se contrataban nuevos empleados mientras el número de los jubilados aumentaba, situación que prevalece actualmente.
Para empezar a resolver esta problemática, las autoridades del ISSSTE se enfocaron en la cobranza de los adeudos pendientes que tenían gobernadores, directores de instituciones y universidades públicas. La cartera ascendía en el año 2000 a 3 mil millones de pesos.
A la fecha se ha cobrado 70 por ciento de esa deuda. Dicho porcentaje se ha aplicado al fondo médico, de tal suerte que en este año el presupuesto de inversión, de mil 500 millones de pesos, es el más alto de los pasados 10 años y cinco veces superior al ejercido en 2002.