El rey Lear abre del ciclo sobre el dramaturgo en el Centro Cultural del Bosque
''Sintetizar y rencauzar, en eso radica la inagotable riqueza de Shakespeare''
Alfredo Michel Modenessi llama a celebrar al autor inglés como gran productor de controversias
El especialista impartirá charlas previas al estreno de las obras
A lo largo de los años se ha intentado, dentro de la vida académica y de la crítica, agotar, fijar o encajonar los signos que conlleva la obra de William Shakespeare, pero es ''su multiplicidad de significados que actúan históricamente de manera dinámica, lo que mantiene vigente su obra'', explica a La Jornada el especialista Alfredo Michel Modenessi, único integrante mexicano de la Shakespeare Association of America y de la Internacional Shakespeare Association.
Para el investigador, quien ofrecerá una serie de charlas previas a los estrenos de El rey Lear, El mercader de Venecia y Sueño de una noche de verano, que se escenificarán en el Centro Cultural del Bosque, toda la obra del dramaturgo inglés ''es una gran productora de controversias, y eso es lo que hay que celebrar.
''Cada época, cada creador escénico hace su propio Shakespeare. Por ejemplo, en el siglo XVIII, El rey Lear resultó muy exitosa, porque le cambiaron el final trágico, por uno de alguna manera feliz.
''Ahora a nadie se le ocurriría hacer esos cambios. Otro ejemplo, es que en la Alemania nazi, El mercader de Venecia fue utilizada como una prueba contundente de la superioridad de la raza aria.
''Siempre, a lo largo de los años, ha habido estrategias y políticas de apropiación de Shakespeare, ya sea por el Estado, como por compañías independientes.
''Esa multiplicidad de significados -abunda el investigador- van cambiando conforme cambia la historia, Shakespeare se va volviendo otro, y eso es lo que lo hace vigente.''
Gozne para articular la historia
Shakespeare ''es reconocido como uno de los más importantes, llamémosle, goznes, sobre los cuales se articula la Historia -así con mayúscula-, puesto que su obra sintetiza y a la vez rencauza. En eso radica su inagotable riqueza''.
Sin embargo, en él siempre hay una vuelta de tuerca. Por ejemplo, en Sueño de una noche de verano, ''mediante una serie de personajes fantásticos, aborda el tema del poder, al tiempo que plantea, sobre todo, el qué es lo que amas en quien amas. Esta es una cuestión netamente shakespereana.
''Aquí se reflexiona igual sobre la pasión y el amor, cómo es que se aparejan: uno es el otro o uno va con el otro o uno excluye al otro.''
En el caso de El mercader de Venecia, ''sí se le puede cargar la mano a Shakespeare respecto de su contenido racista, que se codifica con su época. Error sería no aprender de eso'', manifiesta Michel Modenessi.
Esta obra ''puede llevar de la mano al espectador a cómo se articulan amor, deseo, sociedad y economía''.
El rey Lear ''es uno de los monstruos shakespereanos'', evidentemente está el tema del poder, ''de su construcción con base en el miedo.
''Reflexiona igual sobre una familia disfuncional, tema que por cierto se encuentra en muchas de sus obras, aunque aquí es más evidente la relación y sus consecuencias entre familia y poder.
''Si se pudiera sintetizar esta obra, podríamos decir que es la historia del despojo, de un rey que lo perdió realmente todo. Desde su reino, su casa y sus hijas, hasta la dignidad, el orgullo, el honor y la razón. Pero aquí otra vez se nos ofrece una cuestión netamente shakespereana, pues nos presenta a un rey que paradójicamente toma conciencia de los pobres, de los desgraciados de este mundo, al tiempo que está perdiendo la razón.
''Aquí se habla de una de las cuestiones fundamentales relacionadas con el poder y la manera de gobernar, es decir, la inseparable relación de los intereses privados con los públicos, del ser privado con el deber público.''
Si se hace un paralelismo con la realidad política y social de la actualidad mexicana, es claro, comenta el investigador, ''que una enorme cantidad de decisiones que pueden afectar profundamente la vida de una sociedad se toman con base en: 'A mí se me ocurre que..., Yo siento que tal otra cosa... o fíjate que ando con tal ocurrencia en la cabeza'. Son decisiones tomadas con las tripas, lo que sienten lo hacen, y les vale''.
Es un texto en el que ''se muestra a esas personas del poder tan fallidas, insensibles e ineficaces''.
Con la Compañía Nacional de Teatro (CNT), integrada por los actores Claudio Obregón, Ana Ofelia Murguía, Julieta Egurrola, Lisa Owen, Enrique Singer y Juan Manuel Bernal, entre otros, El rey Lear, bajo la dirección de José Caballero, se estrenará hoy, a las 20 horas, en el Teatro Julio Castillo (Reforma y Campo Marte, Chapultepec), como parte del Proyecto Shakespeare, que integra también los estrenos de El mercader de Venecia, dirigida por Raúl Zermeño (20 de mayo) y Sueño de una noche de verano, puesta en escena por José Solé, el 3 de junio.