México D.F. Sábado 2 de octubre de 2004
Considera que la capacidad de interlocución
del organismo se ha deteriorado
Urge recuperar la autoridad moral de la CNDH, advierte
Elena Pérez Duarte
Diversas ONG y líderes de opinión apoyan
su candidatura a la presidencia de la comisión
ANGELES CRUZ MARTINEZ
Recuperar la capacidad de interlocución de la Comisión
Nacional de Derechos Humanos (CNDH), así como su autoridad moral
para que sus recomendaciones sean atendidas, son los principales objetivos
para plantear la renovación del ombudsman, afirmó
Alicia Elena Pérez Duarte, delegada para América Latina de
la Organización Mundial contra la Tortura, y quien ayer presentó
al Senado de la República su candidatura a la presidencia de la
comisión.
Con
el respaldo de organizaciones civiles, académicos, intelectuales
y comunidades indígenas de Puebla e Hidalgo, la especialista en
derecho de familia y garantías básicas propuso diseminar
en todas las áreas de la comisión las perspectivas de género,
étnica y todas las que ayuden a cubrir la pluralidad de condiciones
de las personas, sobre todo las que son especialmente vulnerables.
Resaltó la necesidad de que la CNDH también
recupere su tarea de protectora del pueblo, y en esa medida, tal como ocurre
en otros países, tenga la posibilidad de aplicar medidas inmediatas
de apoyo a quienes les hayan violado sus derechos humanos, independientemente
de si su queja será o no atendida.
En un segundo momento se procedería al análisis
de la queja y en su caso a la investigación, dictamen y envío
de la recomendación a la autoridad que corresponda.
Actualmente, Pérez Duarte se desempeña como
secretaria técnica de la comisión especial del Senado de
la República para dar seguimiento al avance de las investigaciones
que las autoridades federales realizan en torno a los asesinatos contra
mujeres en Ciudad Juárez, Chihuahua. Antes ocupó la dirección
del Ministerio Público Familiar y Civil en la Procuraduría
General de Justicia y magistrada en el Tribunal Superior de Justicia, ambos
del Distrito Federal.
La semblanza curricular entregada ayer destaca que Elena
Pérez Duarte es pionera en la aplicación de la perspectiva
de género en la interpretación de las normas jurídicas
y en la formación de una cultura de respeto a los derechos humanos
en las tareas de procuración y administración de justicia.
A partir de ayer y hasta el 15 de octubre próximo,
la Comisión de Derechos Humanos del Senado recibirá las propuestas
de candidatos a ocupar la presidencia de la CNDH, con lo que por primera
vez desde la creación del organismo en 1990 se efectúa un
proceso abierto a la sociedad para elegir al ombudsman.
No obstante que en una primera instancia los legisladores
analizarán la viabilidad de relegir a José Luis Soberanes
Fernández como presidente de la CNDH, Pérez Duarte comentó
que en este momento conviene renovar al ombudsman, con el propósito
de recuperar su capacidad de interlocución y de restablecer los
puentes de comunicación con la autoridad, mismos que en la actualidad
se encuentran desgastados por los roces constantes.
Otra de las propuestas que ayer expuso Pérez Duarte
tiene que ver con integrar las actividades de las actuales direcciones
de mujeres, grupos vulnerables, entre otros, a las cuatro visitadurías
existentes, para que todas tengan la capacidad de atender cualquier tipo
de queja y al trabajar por turnos, tendrán una mayor capacidad de
respuesta.
Entre las organizaciones y personalidades que respaldan
la candidatura de Pérez Duarte a la presidencia de la CNDH están
el Colegio de Académicas Universitarias de la UNAM, académicos
de la Universidad Autónoma de Chiapas, docentes de bachilleratos
agropecuarios de Chiapas, Querétaro, Veracruz, estado de México;
Elena Urrutia, Daniel Cazés, Teresita de Barbieri, Pablo Latapí,
Olga Pellicer, Clara Jusidman y Elena Beristáin, así como
algunos miembros de la Academia Mexicana de Derechos Humanos y agrupaciones
feministas.
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