La derrota ante Atlas sí nos complicaría la existencia, admitió

En Pumas cerramos filas, pero no hay regaños, aseguró el Kikín Fonseca

MIGUEL A. RAMIREZ

Cinco derrotas en siete encuentros no han sido suficientes para que la directiva de Pumas les llame la atención a los jugadores, simple y sencillamente porque eso "aquí no existe" en la institución, aseguró ayer Francisco Kikín Fonseca.

"Aquí cerramos filas, platicamos, exponemos lo que sentimos y todos apoyamos", precisó.

Ante la mala racha en este torneo Apertura 2004, "la directiva nos ha manifestado su voto de confianza" y, al igual que los jugadores, se encuentra "muy optimista" en que pronto saldrán adelante.

Confió en que todos se encuentran tranquilos. No sólo porque han detectado que su problema es la falta de concentración, sino porque se encuentran a dos puntos del segundo lugar de su grupo. "Entonces, no hay por qué alarmarse".

En efecto, la cosecha de los clubes integrantes del primer sector ha dejado mucho que desear. Tecos, hasta la fecha siete, es puntero con siete puntos y los escolta Dorados de Culiacán, con ocho unidades. Pumas aparece en el penúltimo lugar, con seis puntos.

"Ahora que empezamos mal nos tocó en un sector donde nadie se nos ha despegado", indicó el auriazul.

-ƑCómo toman que no haya mucha exigencia en el grupo?

-No, no. Nosotros tenemos que hacer nuestro papel y ganar los partidos en el sector que estemos. Se nos ha dado que en el que nos ubicamos es generoso y no se nos han ido.

Sin embargo, reconoció que una nueva derrota, hoy en su visita al Atlas, les complicaría la existencia. Algunos de los auriazules piensan que es impensable, pero Fonseca recordó que "puede suceder, porque en el futbol pierdes, ganas o empatas".

Puntualizó que a la mayoría de los equipos campeones les ha costado mucho mantenerse en los primeros sitios "y nosotros esperamos romper esa jetatura".

-ƑEstán muy cansados de festejar?

-No, no, no. De eso nunca nos vamos a cansar. Te acostumbras a ganar, a festejar, que es lo más bonito del futbol, pero también Dios te manda cosas difíciles para aprender y sacar el carácter".