El alcalde se negó a entregar por escrito el compromiso adquirido con activistas

Seguirán anclando cruceros en el puerto municipal de Zihuatanejo

Ecologistas denuncian daños a los ecosistemas al construir una nueva terminal marítima

ROSA ROJAS ENVIADA

Zihuatanejo, 29 de septiembre. La serie de protestas que la ciudadanía de este puerto tenía programada se convirtió en celebración al lograr que los primeros cruceros de la temporada arriben al muelle público, en lugar de que los turistas fueran trasladados a la terminal privada de Puerto Mío.

En una reunión realizada esta tarde en el municipio José Azueta (Zihuatanejo), el alcalde Amador Campos Aburto informó que el crucero que arribará mañana llegará al muelle municipal, lo mismo que el que llegará el próximo 3 de octubre, pero ante la solicitud de comerciantes, restauranteros, ambientalistas y prestadores de servicios turísticos de que se entregara por escrito dicho compromiso, el munícipe manifestó: "tienen que creer en mi palabra".

Adriana Sánchez, comerciante e integrante de la organización SOS Bahía; Jesús Alvarez y Alfredo Vargas, secretario y tesorero, respectivamente, de la Asociación de Pesca Deportiva; Isai Hernández, presidente de la Sociedad Cooperativa de Recreo y Pesca Deportiva de Zihuatanejo; Miguel Farías, de la misma organización; Benjamín Armenta, comerciante; Eligio Fernando Peñaloza, asesor; Obdulia Balderas Sánchez; Erika Serrano, de la Red de Organizaciones Ambientalistas de Zihuatanejo, y Rubén López Barroso, presidente del Consejo de Vigilancia de la asociación Protección para la Pesca Deportiva, informaron a La Jornada que el presidente municipal se comprometió a formar un consejo de administración para el muelle fiscal.

Consideraron que la decisión se debió a la amenaza de integrantes del movimiento de oposición al cambio de la terminal marítima de que bloquearían la salida de los cruceristas si arribaban al muelle privado Puerto Mío. La Red de Asociaciones Ambientalistas aclaró que ellos nunca se pronunciaron en favor del bloqueo.

"Vemos esto como un gran logro, pero también como un gran maquillaje a las irregularidades que el gobierno federal permitió en la construcción de Puerto Mío", afirmaron los activistas, y advirtieron que podría ser también una forma de calmar un poco la inconformidad social que se generó en Zihuatanejo ante el anuncio de cambios en la terminal marítima.

Denunciaron que para construir Puerto Mío las autoridades permitieron la ganancia de terrenos al mar; que los concesionarios de la terminal marítima desaparecieran las playas del Almacén y Contramarcito, y la destrucción de la playa Contramar, además de que en lugar de levantar la construcción sobre pilotes desviaran las corrientes de la bahía, causando un serio daño ecológico.

Subrayaron que a pesar de que los primeros cruceros llegarán al puerto municipal, se teme que posteriormente pasen a Puerto Mío, con el pretexto de que es una decisión de los navieros.

Agregaron que uno de los argumentos fundamentales para lograr que los cruceros lleguen al puerto municipal fue que Puerto Mío no cubría las medidas de seguridad que el Código Internacional de Seguridad de Puertos exige, y que estaba en la misma situación que el puerto municipal. Sin embargo, las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes ya le habían dado la certificación a Puerto Mío y en cambio se la negaban al muelle municipal.