México D.F. Miércoles 29 de septiembre de 2004
Descarta el gobierno de Fidel Castro un sabotaje
Error operacional, causa de la crisis eléctrica en Cuba
GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL
La Habana, 28 de septiembre. Cuba descartó esta noche que su crisis eléctrica sea producto de un sabotaje y anunció un inminente plan de choque, con paralización de fábricas incluida, para sortear el déficit de energía.
El teniente coronel Néstor Borrero Calvo, del Ministerio del Interior (Minint), informó al presidente Fidel Castro que la avería que detonó la crisis surgió por "un error operacional".
"No estamos en presencia de un acto contrarrevolucionario ni nada que se le parezca", dijo el oficial, que rindió su parte de pie ante el mandatario y pudo ser seguido en la cadena nacional de radio y televisión.
La avería en la termoeléctrica Antonio Guiteras, en la noroccidental provincia de Matanzas, puso en jaque al sistema eléctrico nacional, que así mostró su debilidad, señaló Castro.
"Yo no estaba consciente", agregó el mandatario. "Todos debemos autocriticarnos".
Borrero dijo que el Minint investigó detalladamente el desperfecto del pasado 5 de mayo y encontró que la causa fue la falta de vigilancia a la caída de la temperatura, cuando se apagaba la planta para entrar en mantenimiento.
Castro participó por segundo día consecutivo en un programa de televisión, que examinó el conflicto. Aunque no entró en detalles, el líder cubano anticipó la paralización de algunas empresas.
Citó como ejemplo dos acerías, una en la ciudad de La Habana y otra en la oriental provincia de Las Tunas. "Hay producciones importantes que van a parar", añadió, en un escueto esbozo del plan para enfrentar la crisis, que desde hace meses se manifiesta en constantes cortes de energía.
"Seguimos estudiando qué puede ser detenido y el mundo no se va a acabar", añadió Castro, en una descripción inicial del plan, que incluirá el racionamiento de electricidad como se practicó durante los años 90.
Técnicos del sector informaron al mandatario que el empleo de petróleo cubano, de alto contenido de azufre, causa trastornos adicionales a las termoeléctricas, porque genera desechos que entorpecen el funcionamiento de las máquinas.
"Todos éramos felices cuando decíamos que estábamos consumiendo nuestro petróleo pesado", recordó Castro, apuntando al flanco vulnerable del sector.
Tras la caída de la Unión Soviética y la pérdida de crudo de esa procedencia, Cuba desarrolló su sector petrolero y reconvirtió el sistema eléctrico para adaptarlo al uso del combustible local, con ahorro de recursos pero con los saldos ahora conocidos.
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