México D.F. Miércoles 29 de septiembre de 2004
Plantean que las políticas fomenten la economía campesina
Error de Estado, apostar todo a la agricultura industrial: especialistas
MATILDE PEREZ U.
La política de Estado para el campo debe orientarse a fomentar la economía campesina y dejar de apostar todo a la agricultura industrial, la cual no es más rentable, señaló Alicia Puyana, integrante de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), al participar en el seminario Reflexiones sobre la integración en América del Norte: TLCAN, ALCA y Doha.
Propuso que ante la falta de los beneficios esperados por el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), particularmente en el capítulo agropecuario, es necesario volver a negociar y cambiar la política asistencialista por una de fomento, y para ello es necesario un mayor presupuesto para el agro. Es necesario que el peso de las inversiones en este sector sean iguales a la participación del sector en el producto interno bruto (PIB) total, y aumentar seis veces el gasto.
"No es estimulante que se gasten 400 pesos anuales en cada agricultor, eso es lamentable", abundó. Sin embargo, consideró que "sí hay futuro para el campo, siempre y cuando haya un cambio en la política de Estado y se reconozca el esfuerzo que están realizando los campesinos para elevar los rendimientos y su productividad; los poseedores de superficies promedio máximo de 12 hectáreas son más rentables que las grandes unidades de producción", insistió.
Agregó que programas como Alianza para el Campo y Procampo son sólo asistencialistas, apoyos que se concentran en el combate a la pobreza, pero no benefician el desarrollo de los productores.
Como parte del cambio de política federal, Raúl Hinojosa Ojeda, de la Universidad de California, propuso que el gobierno sea más congruente y coherente en el tema de la migración, pues dejó de defender los derechos de los migrantes para buscar la integración a Estados Unidos, y por ese afán se ha dado por vencido en desarrollar una economía de crecimiento, socialmente atractiva para sus ciudadanos.
Al abordar el tema de la migración, Hinojosa Ojeda asentó que en la discusión del TLCAN se han olvidado los proyectos de cohesión, la migración y las remesas. Apuntó que el valor de la economía de los mexicanos que trabajan en Estados Unidos es de 635 mil millones de dólares y sus remesas son de 40 mil millones de dólares.
Con la migración se están creando nuevos espacios de trasnacionalismo, y como ejemplo citó a "OaxaCalifornia", como denominó el hecho de que de los 1.2 millones de oaxaqueños que viven en Estados Unidos, 75 por ciento radica en California y generan una economía de 75 millones de dólares, cinco veces más que la economía de su estado natal. Pero no dejó de señalar que ello es a costa de una esclavitud moderna, de desigualdades muy fuertes y de constantes presiones para empujarlos a las sombras, sin ningún derecho.
Aseveró que en caso de la legalización de los mexicanos, la economía generada por los migrantes sería de 12 mil millones de dólares anuales, mientras que la de Estados Unidos tendría una reducción de 157 mil millones de dólares; si en ese proceso se incluyeran las remesas y éstas se colocaran en un sistema bancario, los datos serían: para México, 190 mil millones de dólares, y para Estados Unidos, 285 mil millones.
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