Desconcentración y exceso de confianza, la causa, admite el capitán universitario

Pese a las derrotas, aún no encienden los focos rojos en Pumas, asegura Beltrán

Leandro Augusto considera que esta situación no durará mucho tiempo y que calificarán

JORGE SEPULVEDA MARIN

Pese a las cinco derrotas sufridas en siete fechas, aún no se han encendido los focos rojos en el campamento de Pumas, sobre todo porque saben los jugadores que están a tiempo de corregir el rumbo y meterse a la liguilla.

Ayer, mientras hicieron trabajo de gimnasio los elementos que tuvieron acción el domingo, cuando sucumbieron ante Cruz Azul 3-1, el resto del plantel estuvo en la cancha, donde se esmeró en afinar jugadas preparadas y remates a la portería.

Al término del entrenamiento, el capitán Joaquín Beltrán estimó difícil encontrar una sola causa del mal paso del equipo, pero apuntó que probablemente el haber jugado demasiados encuentros, todos con un nivel emocional muy fuerte, en sólo mes y medio, minó su físico.

"Sigo pensando que ha sido desconcentración y exceso de confianza, sobre todo en partidos donde empezábamos bien y nos daban la vuelta muy fácil; creo que nos ha faltado equilibrio entre la ofensiva y la defensiva", puntualizó, y señaló que no se deja de pensar en la calificación.

En su oportunidad, Gerardo Galindo aceptó que la única explicación que se puede dar es que "el equipo no está en su mejor momento", por lo que, para salir de lo que llamó un bache, se requiere "esforzarnos más, dedicarle más tiempo al trabajo".

Negó que haya crisis en Pumas, porque se podría hablar de eso sólo si en las temporadas anteriores hubiera pasado por la misma situación, por lo que prefirió aceptar que se trata sólo "de un mal inicio, una mala racha, pero por fortuna nuestro grupo (quinto en el sector A, cinco puntos del líder Tecos) es noble y aún estamos en la pelea por la calificación".

Por eso, el mediocampista espera que sea este jueves, cuando visiten al Atlas, que sigan obteniendo unidades para que no se les complique aún más la temporada, porque se sienten en deuda con la afición que apoya al plantel en las buenas y en las malas.

Al zaguero Jaime Lozano lo que más le preocupa es que el equipo caiga en la desconfianza, sobre todo porque no está tan alejado del primer sitio del sector.

Insistió en que hay compromiso de cada uno de los jugadores por sacar adelante los encuentros, pero "lamentablemente también los rivales cuentan", aunque está consciente de que en la tabla general los punteros se alejan cada vez más y deben buscar reducir esa desventaja.

El brasileño Leandro Augusto tiene plena confianza en que esta situación, por lo que hacía mucho tiempo no atravesaban los del Pedregal, no durará mucho más, ya que su objetivo es llegar a la liguilla.

Luego de señalar que en el plantel tienen conciencia de que no están actuando como en el torneo pasado, cuando ganaron el título, apuntó que debe resolverse con trabajo arduo y entrega total.