México D.F. Martes 28 de septiembre de 2004
Rectifica Gobernación
Absuelven a La Luz del Mundo
JOSE ANTONIO ROMAN
La Dirección General de Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación absolvió a la iglesia La Luz del Mundo, que fue requerida e investigada por autoridades del gobierno federal por una supuesta alianza con el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en referencia a un eventual apoyo al jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, para las elecciones presidenciales de 2006.
El requerimiento de la secretaría se basó única y exclusivamente en una nota informativa publicada por un diario de circulación nacional, y la investigación fue iniciada a mediados del pasado mes de agosto, tan sólo un día después de su publicación.
Luego de un par de semanas en las que el obispo Orestes Sánchez, apoderado legal de dicha asociación religiosa, presentara una serie de documentos, y la directiva regional del PRD en Jalisco enviara una carta aclaratoria respecto de los hechos imputados, la Secretaría de Gobernación, mediante el oficio DGAR/11284/2004, suscrito por el director Asuntos Religiosos, Alvaro Castro, reconoce que "no existen elementos" para instaurar el procedimiento legal correspondiente.
Actividades políticas o partidistas, vedadas para las iglesias
De acuerdo con la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, las iglesias y sus ministros tienen prohibido realizar actividades de política partidista, entre las cuales se incluye hacer proselitismo en favor de un determinado candidato o partido político. Las sanciones que en estos y otros casos establece la ley van desde el apercibimiento y amonestación, hasta la cancelación del registro como asociación religiosa.
Esta decisión de la Secretaría de Gobernación causó extrañeza a varios ministros de culto de diversas denominaciones religiosas, pues bastó la publicación de una nota informativa para iniciar un requerimiento formal a la Iglesia e iniciar una investigación. Incluso señalaron que si éste fuera el procedimiento que se seguirá a partir de ahora, seguramente la Dirección General de Asuntos Religiosos no tendrá el personal suficiente para dar seguimiento a todo lo publicado por los medios de información en relación con las iglesias y sus ministros de culto.
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