ASTILLERO

Julio Hernández López

Guerra (no sólo) en Veracruz

El generalísimo Buganza
El almirante Barrio
El sargento Yunes

VIENDO TIEMPOS DE guerra, Norberto Rivera se habilitó ayer como vicario castrense y en plena misa oró, citando sus nombres y apellidos, por los dos gladiadores principales de la batalla de "unidad nacional" que el gobierno federal ha organizado para mañana. Luego del ritual, ya ante periodistas que le preguntaban si tan mal ve la política mexicana que ha creído necesario solicitar favores divinos para Vicente y Andrés Manuel, el capellán de Catedral acabaría siendo llevado por el flujo interrogatorio reporteril a precisar que "el Presidente de la República sí tiene fuerza". Domingo marcial previo a los festejos patrios de Independencia que también permitió el canto del Himno Nacional en la iglesia capital del oficialismo católico mexicano (porque la capital popular es la Basílica de Guadalupe), que antes había visto desfilar por el pasillo central de la nave catedralicia la bandera nacional con su correspondiente escolta. Cuatro años atrás la polémica fue por la pionera entonación en territorio religioso de la obra musical distintiva del país; ahora, en previsión de las críticas que provoque el desfile de la máxima tela nacional por los dominios de santos y vírgenes, el propio vicario castrense Rivera adelantó una exégesis de la separación Iglesia-Estado que es digna de estudio en escuelas de ciencia política: cantar el himno y hacer honores a la bandera no son actos "de Estado, sino de nación, y ahí está la confusión. La bandera y el Himno Nacional son de todos los mexicanos". šAh, con razón!

EL GENERAL GERARDO Buganza anunciaba por su parte el inicio de una "guerra pacífica", que contará con el "levantamiento" de todos los mexicanos (pues el candidato postulado por el erario federal para gobernar Veracruz planea realizar una gira de amotinamientos cívicos que le lleve por todos los estados del país para demandar que sea desconocido el triunfo mediante fraude del travieso Fidelillo Mapachón). Los hervores militares de Jerry Buggy (jerry tiene dos que tres acepciones, pero una de ellas es soldado alemán; buggy, carrito de niño) le hicieron ayer anunciar que su "ejército de ciudadanos (...) va a la guerra, va a la batalla pacífica, no violenta, pero sí en lo jurídico". ƑDesea el lector saber cómo consiguió el jefe Buganza sus Fuerzas Armadas Personales? El lo reveló así, según El Universal: "Fui a enlistar a grupos de ciudadanos; tenemos ya un batallón unido en divisiones; hay ya un ejército de millones, con comandos que quieren que los dirija".

LA SESION MILICIANA de Jalapa contó con un invitado especial, el almirante Francisco Barrio Terrazas, fallido pescador de peces gordos que sin embargo sigue tirando redes a ver qué saca de las aguas revueltas: no sabes, advirtió al obviamente ausente Miguelito Alemán, "el tamaño del boleto que acabas de comprar"; pero las amenazas del chihuahuense no fueron por la corrupción, la represión y la frivolidad que el mencionado Alemán instauró como política de gobierno en Veracruz durante más de cinco años, sino porque se niega a reconocer el presunto triunfo del generalísimo Buganza. Y, para demostrar la congruencia entre palabras y hechos, el triunfo de los ideales sobre el pragmatismo, la inevitable victoria de la moral, allí mismo fue presentado en sociedad (panista) el gran patriota Miguel Angel Yunes (šen un mitin en el que Gerardo Priego, miembro del Comité Nacional panista, acusó a los priístas de "sinvergüenzas, robaurnas y sabandijas"!), quien desde meses atrás trabajaba para los tiburones blanquiazules como estratega de ética y de alquimias electorales, pero que hasta ahora fue sacado del clóset (la contratación del habilidoso jugador ex tricolor tuvo como enganche que el PAN colocara al hijo de Yunes como candidato a diputado de representación proporcional en lugar preferente, de ingreso asegurado al Congreso local). A partir de ahora, el sargento Yunes acompañará al general Buganza en su gira nacional y en todo lo relacionado con la defensa electoral.

EL CORONEL EN VIAS de retiro, Miguelito Alemán (que en el mitin panista veracruzano fue llamado "viejito corrupto), mantenía mientras tanto su talante guerrero. "Por mí se pueden ir a bailar a Chalma", había declarado un día antes, cuando recibió la visita de otro capellán castrense, el indescriptible Onésimo Cepeda, que le colocó buena eme entre la e y la pe a su apellido en el palco de honor del estadio del Veracruz adonde fue a presenciar el juego contra las Chivas. Autodeclarado Santo Tribunal Electoral, el obispo Ce(m)peda sentenció a favor de las alquimias fideluchas que un voto hace la diferencia, y si el PRI ganó esta vez, pues que sus adversarios "šNo echen brava, perdieron por 22 mil!" Luego, el coronel en retiro y el obispo que se embriaga pasaron a degustar sabrosos güisquis "etiqueta azul", e incluso, "en el caso del gobernador, levantó su bebida en señal de salud con quienes permanecían pegados al vidrio junto a su palco", según nota de Sandra Segura en Notiver. Miguelito gordillista y antimadracista que quiere jugar carambola de tres bandas haciendo regalos escultóricos y políticos a López Obrador, según eso convencido de que éste no debe ser desaforado.

GUERRAS Y GUERREROS un domingo en que fue anunciada la muerte de un hermano del supuestamente también difunto Señor de los cielos, y de siete personas más, en un centro comercial de la capital de Sinaloa, donde va entrando en calor la pugna entre carteles por la continuidad o el relevo en el control del poder político local. Domingo zacatecano de hachas guerreras momentáneamente depuestas, en un extraño escenario político que ni pareciera perredista, con una transmisión pacífica del poder y con dos cartas nacionales preservadas y no deshechas por el canibalismo negro y amarillo, Ricardo Monreal que buscará más delante presidir el PRD, y Amalia García que, en un momento dado y a pesar de que apenas comienza su trayecto estatal, podría también, igual que su antecesor, aparecer en las listas desesperadas de relevo en caso de que la candidatura lopezobradorista sucumbiera.

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