Prepararon para el encuentro selección de Carmen y Deseo

Primeros bailarines de la CND actúan en el festival de Miami

FERNANDO CAMACHO SERVIN

Los primeros bailarines de la Compañía Nacional de Danza (CND), Irma Morales y Raúl Fernández comenzaron anoche su participación en el noveno Festival Internacional de Ballet de Miami, espacio que se ha convertido en un auténtico escaparate para ver el nivel técnico y artístico de la danza practicada en diversas partes del mundo.

En entrevista telefónica previa, Fernández dijo sentirse preparado para las funciones, aunque admitió estar un poco presionado por tratarse de un festival importante, donde se invita a grandes figuras de las compañías más importantes del mundo. "El público va en espera de un buen espectáculo, por eso tienes que prepararte con todas las ganas, con toda la conciencia bien puesta", afirmó.

El bailarín, quien participará por tercera ocasión en este certamen, dijo que llevarán al escenario del teatro Jackie Gleason de Miami una selección del ballet clásico Carmen, de Georges Bizet: La Habanera y una variación del fragmento de Don José, con coreografía de Alberto Alonso.

La segunda parte del programa se compone de dos piezas de Deseo, ballet recién presentado en el Palacio de Bellas Artes, original del coreógrafo canadiense James Koudelka.

Al ser de gran dinamismo e intensidad, esta obra hace contraste con Carmen y da una imagen de versatilidad a la Compañía Nacional de Danza, tanto en lo interpretativo, como en los aspectos musical y coreográfico, consideró Fernández, quien dijo confiar en el nivel mostrado por la danza mexicana en el exterior.

Por su parte, Irma Morales afirmó que los ensayos para escenificar Deseo, bajo la dirección de la maestra Clara Carranco, han sido intensos, debido a la coordinación y resistencia que requieren sus movimientos, aunque aseguró que en esta obra de tintes neoclásicos el acoplamiento con Raúl Fernández ha sido total.

Carmen, en tanto, es una pieza "que seguramente les gustará mucho en Miami, de carácter latino, ameno, con historia", consideró la primera bailarina.

En su opinión, los festivales internacionales son un buen termómetro para que cada bailarín sepa en qué punto de su carrera está, y saber dónde está parado con respecto a otros países y compañías.

Durante todas sus versiones, dijo Morales, el Festival Internacional de Miami ha visto pasar los montajes más conocidos de las compañías clásicas, como Giselle, El lago de los cisnes, El cascanueces o La bella durmiente, pero también puede apreciarse una evolución hacia temas y técnicas muy modernas, que le dan al bailarín más libertad.

"No sólo es el cambio en lo estético; hay compañías que se van incluso al teatro y a otros elementos innovadores", explicó.

La tarde de este domingo volverán a presentarse en el Teatro Jackie Gleason.