.. |
México D.F. Sábado 7 de agosto de 2004
La procuraduría del ramo pretende imponer
el Programa de Certificación de Derechos
Acusan a burócratas agrarios de avivar la violencia
en Veracruz
Ejidatarios consideran que la provocación se
puede acentuar por los tiempos electorales del estado
ROSA ROJAS
La semilla de la violencia social y el descontento que
funcionarios de la Procuraduría Agraria (PA) siembran con la imposición
del Programa de Certificación de Derechos (Procede) en cinco comunidades
y ejidos indígenas de los municipios veracruzanos de Texcatepec,
Tlachichilco, Zontecomatlán y Zacualpan pueden producir "acciones
como las de las zonas de grave conflicto en otros lugares del país",
advirtió el Comité de Derechos Humanos de la Sierra Norte
de Veracruz (CDHSNV) en un documento urgente enviado al presidente Vicente
Fox, en el que solicita la destitución del visitador agrario y el
jefe de la residencia de la Procuraduría Agraria en Huayacocotla.
La misma demanda hacen las autoridades agrarias de la
comunidad de Amaxac, en un escrito dirigido al titular del Organo Interno
de Control de la PA, Leonardo Riveros Fragoso, en el que denuncian que
el visitador Eduardo Baldemar Vázquez Bessichy y el jefe de la residencia,
Raymundo Ortiz García, pretenden imponer el Procede de forma "arbitraria"
y provocan la violencia y la división en las comunidades, a unos
días de las elecciones del 5 de septiembre en Veracruz, ignorando
una historia "de mucha violencia desde los años 1983 y 1984, cuando
los acaparadores de tierras mataron a mucha gente, se apoderaron de los
terrenos de los otomíes y de los mestizos pobres y sembraron el
terror en la comunidad".
En el documento, el comisariado de bienes comunales y
el presidente del Consejo de Vigilancia de Amaxac, Agustín Ramón
y Rey San Antonio Gómez, respectivamente, detallan diversas maniobras
realizadas por Vázquez Bessichy en contra de los intereses de los
comuneros, entre ellas que el 30 de julio pasado llegó a la subcomunidad
de Amaxac "sin avisar y acompañado de una funcionaria del Registro
Agrario Nacional", convocaron a la comunidad de Papatlar, pero no a las
subcomunidades donde viven los indígenas otomíes que son
El Pericón y Benito Juárez. Tampoco tomó en cuenta
a las autoridades de bienes comunales y les impuso trámites para
designar sucesor a los comuneros.
Agregan
que el funcionario de la PA amenazó con regresar en unos días
más "a meter el Procede", que no importa que "las autoridades no
estén presentes". Que él va a traer al Instituto Nacional
de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) "a
medir las parcelas de los que quieran, aunque sean pocos", como lo está
haciendo en los bienes comunales de Tzicatlán, y que si son mayoría
va a quitarnos el comisariado a nosotros. Que solamente con el Procede
nuestras tierras están seguras.
"Además queremos denunciar que este señor
(Vázquez Bessichy) llegó a nuestra comunidad a un mes de
las elecciones en Veracruz para gobernador, para diputados y para presidentes
municipales. Curiosamente llegó a platicar con la gente que está
afiliada al Partido Revolucionario Institucional. Es totalmente imprudente
y peligroso llegar en esta forma a las comunidades pequeñas, a provocar
la división en días en que la gente anda inquieta por las
campañas electorales", advierten las autoridades agrarias indígenas.
(Cabe mencionar que las organizaciones otomíes Comité de
Defensa Campesina y Unión Campesina Zapatista han ganado cuatro
periodos consecutivos la presidencia municipal de Texcatepec, en colaboración
política con el Partido de la Revolución Democrática).
Recuerdan las autoridades indígenas cómo
los otomíes de Amaxac se organizaron en los 80 para controlar la
violencia "en diálogo con el gobierno. El terrateniente y matón
principal fue enviado a la cárcel juzgado por más de 30 asesinatos".
Después lograron, en 1994, la restitución de sus tierras
comunales y la ejecución de la resolución que estaba pendiente
desde 1934.
"El gobierno dio dinero a los principales acaparadores
y violentos para que dejaran las tierras y así pudimos hacer un
reparto de ellas, con grandes trabajos y peligros. Todavía varios
terrenos fueron reinvadidos por los retoños de los caciques, como
son los predios de Milpa Larga, La Pahua, El Gigante, El Limón Chiquito
y otros. Todavía algunos mestizos, con la costumbre de comprar y
vender, se aprovecharon de la pobreza de otros para hacer compras ilegales.
Cada vez que hemos intentado que los designados por la comunidad ocupen
esos lugares, ellos han sacado las pistolas", explican las autoridades
agrarias.
Agregan: "La residencia de la PA no conoce ni quiere saber
de esta historia de despojo y por eso se meten a hacer cosas sin tener
en cuenta todo lo que ha sucedido, en forma interesada e irresponsable.
Desde 1998 pedimos a la residencia de la PA que nos representara para solucionar
esas invasiones, pero hasta la fecha ni siquiera se han parado a mirar".
Enfatizan que en las comunidades de El Naranjal, Apetlaco,
La Soledad, Cuayo La Esperanza, El Mirador, La Mina, Cerro de Tzocohuite,
de los municipios de Tlachichilco, Zontecomatlán y Zacualpan, así
como en los bienes comunales de Texcatepec la PA "tiene sin solución
cada asunto que comenzaron desde hace siete años".
Señalan que los funcionarios de la Procuraduría
Agraria siempre dicen que con el Procede se van a solucionar todos los
problemas "y nosotros sabemos que no. Queremos que se solucione lo que
nosotros pedimos y que no hagan lo que no les hemos pedido. Somos unos
bienes comunales de mayoría indígena otomí y pedimos
respeto. No queremos que el señor Vázquez Bessichy meta con
sus mañas el Procede, y empiece a medir y a legalizar las tierras
invadidas y que nos deje así, legitimando la violencia y la ilegalidad
y dejando a la comunidad dividida". Responsabilizan a la PA de que vuelva
a brotar la violencia y el despojo.
Por su parte, el CDHSNV en su acción urgente, enviada
también a la Red de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todos,
detalla que desde octubre de 2000 propuso una agenda de casos agrarios
a la residencia de la PA en Huayacocotla, con el propósito de solucionar
diversos conflictos agrarios en la zona -conflictos intercomunales, de
posesión, de compraventas ilegales, acaparamiento, invasión,
regularización, etcétera- obteniendo una respuesta "evasiva,
omisa, parcial, en partes sin motivación y fundamentación
legal debida", lo que hace pensar que pretende resolverlos "con la varita
mágica del Procede.
"El visitador agrario Eduardo B. Vázquez Bessichy
ha extralimitado sus atribuciones, y sin respeto a la asamblea de Amaxac
ha pretendido la implementación forzada del Procede, ha convocado
a reuniones selectivas motu propio y sin solicitud o autorización
de la asamblea o de los representantes de los bienes comunales de Amaxac",
pese a que desde 2000 se le notificó a la PA la determinación
de la asamblea de no incorporarse a dicho programa, denuncia.
Advierte: "la penosa historia de muerte, violencia, acaparamiento
y despojo que cubren esta tierra de sangre, puede volver a repetirse, alentada
por el visitador y la residencia de la PA de Huayacocotla".
Detalla los problemas existentes en la comunidad de Texcatepec,
Chila Enríquez y en los ejidos El Naranjal, La Jabonera y Anexos,
y Mina-Mirador, en los que la intervención de la PA "fue negligente,
omisa y parcial", por lo cual se pide la destitución de dichos funcionarios.
|