Los teutones se quedaron con dos puntos en el grupo D de la Eurocopa de futbol

Alemania evidenció falta de experiencia al empatar sin goles con Letonia

Estamos decepcionados: Rudi Voeller; la igualada fue histórica, expresó Aleksandrs Sarkovs

AGENCIAS

Oporto, 19 de junio. Alemania no pudo con Letonia y empataron con el marcador en blanco, en el estadio Bessa Siglo XXI, por el grupo D de la Eurocopa de futbol, en cuya fase final el país báltico participa por primera vez.

El cuadro alemán, que quedó en situación difícil, con dos puntos y uno menos que República Checa, lo intentó de todas las maneras posibles, pero dejó al descubierto falta de experiencia. Sus numerosos jugadores jóvenes tienen mucha calidad y velocidad, pero carentes del instinto asesino de un Gerd Mueller.

El mejor ejemplo de ello es Kevin Kuranyi. El ariete del Stuttgart pudo haber sentenciado el encuentro en la primera parte, pero tanto su lanzamiento desde fuera del área como su remate de cabeza peinando el balón se marcharon junto al poste.

El técnico alemán Rudi Voeller alineó una escuadra más ofensiva, como había prometido, con el brasileño naturalizado Kevin Kuranyi y Fredi Bobic, mientras el timonel letón, Aleksandrs Sarkovs, plantó en el campo al mismo cuadro que había perdido 2-1 ante República Checa en la jornada inicial.

No habían pasado 40 segundos cuando el árbitro inglés Michael Riley mostró la primera tarjeta amarilla al defensa Aleksandre Islakovs, por una furte entrada sobre el mediocampista Torsten Frings, del Borusia Dortmund.

El primer disparo en puerta con peligro lo concretó Kuranyi, al minuto 14, lo que dio la pauta de los germanos para superar la dura defensa báltica.

Letonia, que practica un futbol bastante primario y correoso, pero ordenado, ponía en dificultades a una de las escuadras con más enjundia del mundo.

Promediando el primer tiempo, Alemania empezó a lucir precavido; atacaba más, pero sin aciertos, y para colmo los letones se acercaban a la valla de Oliver Kahn, aunque sin inquietar.

Para la segunda mitad, Maris Verpakovskis, del Dínamo de Kiev y estrella del ataque báltico, dio un susto al minuto 44, que resultó leve para Kahn, mientras que los alemanes sumaron más intentos, todos fallidos, y el más brillante, una media chilena de Frank Bauman hacia el 52.

El juego se tornó friccionado y con mucha tensión en la cancha, pero no obstante los últimos intentos hasta con la cabeza de Miroslav Klose, el ogro alemán se fue a las duchas con un magro resultado y un futuro incierto.

"Nuestro equipo lo intentó todo; creyó hasta el final en sus posibilidades. Por supuesto que estamos decepcionados, pero nada está perdido. Todavía tenemos la posibilidad de seguir adelante con una victoria (ante los checos. Eso sí, está claro que desde el principio va a ser muy duro", señaló Voeller.

En cambio, Sarkovs, consideró que el empate "fue histórico para nosotros. Estoy feliz y orgulloso, porque el equipo mejora en cada partido", expresó.