México D.F. Domingo 20 de junio de 2004
Hasta marzo el Ministerio de Defensa hizo "donaciones" por 24 mil 350 dólares
Acusan a Londres de "comprar" el silencio de deudos de civiles iraquíes muertos
ANDREW JOHNSON, FRANCIS ELLIOTT Y SEVERIN CARRELL THE INDEPENDENT
Londres, 19 de junio. El Ministerio de Defensa británico ha sido acusado de "comprar" a deudos de civiles iraquíes en cuyas muertes han tenido relación soldados británicos, al hacerlos firmar documentos de liberación de responsabilidad a cambio de pagos compensatorios y "donaciones de caridad".
El ministerio reveló la semana pasada a The Independent on Sunday que hasta ahora se han pagado 14 mil dólares como compensación oficial por incidentes, entre ellos muer-tes en custodia militar, así como por disparos durante manifestaciones. Pero esa dependencia reconoce también haber hecho "donaciones de caridad" por 24 mil 350 dólares a familias hasta el 13 de marzo de este año, la cifra más reciente disponible.
Las "donaciones" se describen como pa-gos ad hoc destinados a cubrir gastos funerarios y ayuda para el duelo, pero (al igual que con la compensación oficial) el recipiendario debe firmar una declaración en la cual acepta que el dinero representa "un acuerdo total y definitivo". Ambos tipos de pago vienen acompañados con una disculpa, pero sin admisión de culpa o responsabilidad.
Un investigador de Amnistía Internacional, que en marzo anterior entrevistó a familias en Basora, expresó: "Podría haber más hechos fatales de los que aparecen en los registros públicos, porque las familias aceptaron esos pagos".
El vocero de la organización Defensa Li-beral Demócrata, Paul Keetch, llamó "compra" a tal sistema y lo consideró "contrario a la justicia natural". Precisó que los deudos "tienen que llenar una forma en la que se comprometen a no emprender acción legal alguna contra el gobierno británico. Necesitamos un sistema apropiado, que pueda identificar lo que se ha hecho mal".
Amnistía Internacional expresó quejas si-milares, y demanda que el Ministerio de De-fensa proporcione mayor información sobre lo que cubren estos pagos. Existen acusaciones de que se abusa de esta práctica para silenciar a las familias de las víctimas, particularmente las que se juzgan lo bastante po-derosas para cobrar venganza.
Si bien ningún soldado británico ha sido acusado hasta la fecha por muertes de civiles, el ministerio confirmó que existen ocho investigaciones pendientes contra miembros del ejército, cinco de las cuales involucran muertes. Una es la de Baha Mousa, recepcionista de un hotel de Basora a quien, se asegura, que soldados del regimiento Lancashire de la Reina asesinaron a patadas en septiembre pasado, revelada en enero por The Independent on Sunday.
El procurador general, lord Goldsmith, también anunció la semana anterior que cuatro miembros del regimiento real de fusileros serían llevados a consejo de guerra. El caso se centra en fotografías que, según se afirma, son de internos a quienes se obligó a realizar actos sexuales entre sí, y de un prisionero desnudo, atado y amordazado, colgado de una red en un camión de volteo.
Un funcionario de Amnistía Internacional señaló que la "tasa corriente" por una muerte es de unos mil 400 dólares. Pero después de la muerte de Baha Mousa, cuyo padre es oficial de la policía iraquí, se ofreció mucho más a la familia.
"En el caso de Baha Mousa (un) oficial militar británico ofreció disculpas, le dio 3 mil dólares a su padre, el coronel Mousa, y le dijo que habría pagos subsecuentes", señaló el funcionario. "Luego le ofreció a Mousa otros 5 mil dólares, diciendo que sería el pago final. Pero el coronel Mousa se negó a recibirlos. Los militares esperaban que la familia no llevaría las cosas más lejos. A las otras personas les dieron sólo 2 mil o mil 500 dólares. Al coronel Mousa le ofrecieron 8 mil porque su caso recibió mucha publicidad y porque es un alto oficial de la policía."
Phil Shiner, abogado de Birmingham que lleva varios casos contra el Ministerio de Defensa en representación de civiles ira-quíes, señaló: "Existe un elemento (de comprar a la gente) si se observan los esfuerzos hechos con Mousa. Cuando le ofrecieron mucho más, en definitiva buscaban que re-nunciara a sus derechos. Al parecer sabían que Mousa los tenía agarrados por los derechos, y trataban de callarle la boca".
Si era un intento de silenciarlo, éste falló: se espera que el coronel Mousa viaje a Gran Bretaña a principios del mes próximo para estar presente durante una acción legal en la Suprema Corte en Londres contra el Ministerio de Defensa.
El tema de los pagos compensatorios se abordará en julio en una reunión de los principales abogados británicos de derechos hu-manos. En un acontecimiento que preocupará a los ministros, figuras como Gareth Peirce, Louise Christian -quien llevó los casos británicos del Campo Rayos-X- e Imran Khan, quien manejó el de Stephen Lawrence, se preparan a montar "desafíos legales de dirección muy precisa" hacia el sistema británico de compensación y justicia en Irak.
Amnistía Internacional también arguye que el procedimiento de reclamaciones oficiales es difícil y complicado. En un informe emitido el mes anterior, sostenía: "A muchas familias cuyos parientes han sido muertos por fuerzas británicas no se les informa de los procedimientos para solicitar indemnización. En varios casos las fuerzas británicas proporcionaron información errónea, sugiriendo a los deudos que sólo pueden pedir indemnización a un futuro gobierno iraquí, o bien determinan por sí mismos que la indemnización no es aplicable".
Un vocero del Ministerio de Defensa señaló que el ministro de las fuerzas armadas, Adam Ingram, daría amplia respuesta a las acusaciones de Amnistía Internacional "en el futuro cercano". © The Independent Traducción: Jorge Anaya
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