Regalaron más de 4 mil litros en Hidalgo y Querétaro

Protestan productores de leche contra la Profeco

Amagan con emigrar a Estados Unidos; allá sí hay apoyo

CARLOS CAMACHO Y MARIANA CHAVEZ CORRESPONSALES

Productores de leche de los estados de Querétaro e Hidalgo clausuraron simbólicamente las oficinas de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) de las capitales de ambas entidades para protestar por que la dependencia permite la venta de fórmulas lácteas como leche natural en comercios establecidos. Regalaron más de 4 mil litros del producto a las personas que pasaban por el lugar.

Alrededor de 60 ganaderos, sobre todo de la cuenca lechera de Tizayuca, repartieron más de 2 mil litros del alimento al público, como parte de su estrategia de lucha para obligar al gobierno a frenar la competencia desleal que afecta a unos 20 mil productores en el país, a través de la venta de lactosueros.

El delegado de la Profeco, Jorge del Castillo Tovar, ofreció, a cambio de que abrieran las puertas de la dependencia, que inspectores realicen una investigación en comercios y se les obligue a poner letreros que distingan entre uno y otro productos, para evitar que se engañe a los consumidores con la venta de fórmulas lácteas en vez de leche de vaca.

El dirigente de El Barzón en Hidalgo, Antonio Salim Saldívar, informó que el jueves de la semana próxima representantes de los 2 mil 300 afiliados a la Asociación Nacional en Defensa de las Vacas Lecheras y el Consumidor -movimiento surgido de la lucha contra la competencia desleal de empresas que producen leche a partir de lactosueros- acudirán a la embajada de Estados Unidos en la ciudad de México para tramitar sus visas, a fin de poder "irnos a Estados Unidos a producir leche", porque allá se subsidia en 65 por ciento la producción del lácteo, mientras aquí se desalienta esta actividad.

Advirtió que si para septiembre no se han logrado las visas, entonces el 1^O de octubre arrancará el "éxodo de productores de leche a Estados Unidos", en el que participarán los 2 mil 300 afiliados al movimiento, aunque podrían sumarse aquellos que se han visto afectados en el país con esta competencia desleal.

En el segundo congreso nacional de productores de leche acordaron clausurar las delegaciones de la Profeco en 11 entidades, y en el tercer congreso, realizado el jueves pasado en San Luis Potosí, se planteó ir a la embajada de Estados Unidos en México para gestionar visas para los 2 mil 300 productores que pretendemos "irnos a producir leche donde sí hay subsidios para la producción lechera, como en Estados Unidos, donde los apoyos alcanzan el 65 por ciento".

En la ciudad de Querétaro, unos 20 ganaderos lecheros integrantes de la Asociación Nacional en Defensa de las Vacas Lecheras y el Consumidor se manifestaron, clausuraron las oficinas de la Profeco y denunciaron que la competencia desleal ha provocado que, en el último año, 40 por ciento de los 300 productores de la entidad hayan quebrado.

Los inconformes arribaron al lugar acompañados de cinco vacas y durante más de dos horas regalaron entre las personas 2 mil litros de leche.

Víctor Manuel Martínez González, integrante de esta asociación, indicó que la práctica desleal afecta a los pequeños productores, pues esas fórmulas están "desplazando nuestro producto, básicamente no alimentan a los mexicanos y están engañando al consumidor y nuestro producto no puede salir a la venta".

"Estamos desesperados", pues 80 por ciento de un millón de personas que se dedican a la ganadería en el país se encuentran en situación de desventaja frente a las empresas de "gran capital", refirió.

Explicó que esas empresas crían vacas lecheras que generan una producción de 40 a 50 mil litros al día, mientras que los pequeños productores tienen entre 20 a 150 vacas que generan 18 litros cada una.

Además, comentó que la competencia desleal es tal que el costo de producción de leche es de 4.40 pesos por litro, mientras que las empresas que la comercializan la compran a tres pesos, situación que afecta a los pequeños productores.

Los ganaderos de los municipios de Pedro Escobedo y El Marqués indicaron que desde hace un año se han visto en la necesidad de sacrificar dos vacas por semana ante la falta de insumos para su alimentación, además que los rastros les compran esos animales a 8 mil pesos cada uno, por lo que prefieren sacrificarlos en lugar de producir leche.