México D.F. Jueves 15 de abril de 2004
La emisora sonorense da voz tanto a jóvenes
de barrios populares como a ambientalistas
Radiobemba, espacio para propuestas marginadas y la
lucha altermundista
Lucha por el permiso oficial, ya que "la legitimidad
social la tenemos", señala su director
ALONSO URRUTIA ENVIADO
Hermosillo, Son. "Democratizando la palabra
para democratizar la sociedad... Porque queremos enteros y no medios de
comunicación. La democracia de las calles en frecuencia moludada...
Porque ellos tienen el poder, nosotros tenemos el derecho... Son los
eslogans de la única radio comunitaria en el norte el país,
Radiobemba.
Es una emisora urbana con mensajes contra la globalización,
altermundistas y programación alternativa en esta ciudad
en que la izquierda prácticamente no existe y donde el panismo hegemónico
desde hace una década es reflejo de su conservadurismo.
Radiobemba, como la gran mayoría de las radios
comunitarias lleva rato en su lucha por alcanzar el permiso gubernamental
para transmitir pues, dice su director, Carlos Aparicio, la legitimidad
social la tenemos, pero buena parte de la certidumbre de los proyectos
depende de la licencia oficial.
Evalúa
las dificultades y la competencia: "es muy complicado porque estamos en
un entorno donde hay 24 emisoras comerciales que tienen conductores que
gritan y programan lo que las disqueras les mandan, hablan bonito, tienen
buena voz y dan regalos. Pero nosotros tenemos éxito porque incluimos
todo eso que han marginado por siempre; buscamos que el escucha tenga su
propia decisión", es como una "tercera vía" en la radio sonorense.
Rock, hevy metal, death metal, progresivo, algo de jazz,
rock en español, de talentos locales y nada de la onda grupera acreditan
su concepción musical. Sangre Violeta, un programa reivindicador
de la visión de género; Mesa ciudadana, espacio para
las diversas organizaciones ciudadanas, desde ambientalistas hasta lésbico-gays,
o Aprópiate del barrio, una emisión realizada con
los jóvenes de barrios populares, forman parte de los programas
que le dan identidad a la emisora.
Vivir con 20 pesos
Tome una moneda, mírela bien, cara o cruz -cuestiona
una voz femenina-; si salió cara, ningún problema amigo
mío. Coma, beba, viaje, compre... vuelva a comer... Cayó
cruz -complementa una voz masculina-, en ese caso le voy a dar una
propuesta indecente, resulta que a más de la mitad de los 6 mil
millones de personas en el mundo les ha salido cruz.
Le ofrezco dos dólares para que viva hoy. Comienza
la jornada, un buen desayuno, café, leche, pan... Llega la comida,
'cómo dice', ya se le fueron los dos dólares en el desayuno,
¿y la comida? ¿Se va ir a dormir con la barriga vacía
en la noche? ¿Y el autobús? ¿Y las aspirinas para
el dolor de cabeza? ¿Y la renta? ¿Y el transporte? Y al otro
día, de nuevo sólo dos dólares ¿Cómo
vivirá la mitad de la humanidad?...
Hasta ahí la cápsula informativa para la
reflexión de la desigualdad mundial.
Enero 2004. Radiobemba, miembro activo de la Asociación
Mundial de Radios Comunitarias, se enlaza con un programa producido en
España, Holanda y Ecuador. El tema: los alcances del Foro Social
de Bombay, en India, posible gracias a los convenios con las radios comunitarias
españolas, con Radio Neederland (Holanda) y la Asociación
Latinoamericana de Radios Comunitarias.
Desde Brasil, Frei Betto sostiene que cuatro americanos
tienen una fortuna superior al producto interno bruto (PIB) de 42 naciones,
o sea 600 millones de personas; en Bombay, Ignacio Ramonet habla sobre
las discusiones de la nueva agenda altermundista, y en Chile, Sara
Larraín, coordinadora de Cono Sur Sustentable, subraya la importancia
de pasar a los hechos y ver cómo los planteamientos de subsistencia
y soberanía alimentaria de los Sin Tierra o Vía Campesina
en Brasil pueden retomarse en otros lares, o que las propuestas sobre sustentabilidad
urbana de organizaciones colombianas se apliquen en otras metrópolis...
Sin recursos, pero aprovechando la red comunitaria mundial
en América Latina o Europa, han logrado transmitir la sublevación
social en Bolivia o las protestas contra la reunión de la Organización
Mundial de Comercio en Cancún, resume Aparicio.
-¿Por qué Radiobemba?
-Son varios simbolismos. En alguna ocasión platicando
con un argentino que tenía un grupo musical, cuando hacía
mi programa en una radio estatal -de donde salió por problemas de
censura-, me explicó que en Argentina se decía radiobemba
a la comunicación de boca en boca. Es algo que le daba significado
a lo que pretendíamos. También queríamos darle impacto
publicitario, y en aquella época Manu Chao estaba fuerte como músico
y tenía su grupo llamado Radio Bemba Sound System.
Radiobemba es de las pocas, muy pocas estaciones de este
tipo que hay en las ciudades aquí en México, pero no en otros
países. En Argentina -que para quienes integran Radiobemba es un
referente fundamental- es precisamente en las ciudades donde han florecido
las radios comunitarias.
"No tiene que ser sólo en las zonas rurales. En
las ciudades hay una diversidad de propuestas que son marginadas, y aunque
aquí hay 24 estaciones comerciales, sólo hay dos ofertas
reales. Hay muchos sectores marginados, muchas protestas y voces ambientalistas,
de género, sobre derechos humanos o culturales que no son recogidos
ni en mínimas cantidades", afirma Aparicio, sociólogo de
profesión, que encabeza al grupo que gestiona la emisora compuesto
por 30 colaboradores.
Aprópiate del barrio de Los Olivos
Tres voces juveniles hacen la presentación. El
tema es la secundaria técnica 7, en el barrio de Los Olivos, uno
de los más populares de Hermosillo. De ahí mismo son todos:
presentadores, entrevistadores y entrevistados:
-¿Qué cambiarías en tu escuela?
-Los maestros.
-¿Por qué?
-Porque son muy cabrones.
-¿Te han hecho algo?
-Me mientan la madre -dice uno-; me dieron una
cachetada -asegura otro-; me ponen a lavar baños para subir
calificación -afirma uno más.
La conclusión de los presentadores: "dicen que
los maestros deben ser como segundos padres, pero en la 7 no es así.
Los alumnos le tienen miedo a los maestros, parece que no conocen el diálogo.
Hace falta un área de sicología para que platique con los
alumnos, pero sobre todo con los maestros. En la 7 es la única escuela
donde para subir la calificación no hay que hacer exámenes
o entregar trabajos, sino lavar baños..."
Vladimir Ruiz, ex consejero universitario, nacido -dice
con ironía- en un aniversario de la revolución rusa, es el
realizador del programa e imparte los talleres de periodismo en los barrios
"a los cholos, a la banda, para que realicen los programas sobre los problemas
de sus comunidades, las cosas que les son adversas. Así como la
secundaria, hay otros sobre las pandillas o sobre el transporte urbano,
que es un desastre".
Y el tema no sólo se analiza, se satiriza en cápsulas:
"Hoy en Hermosillo por fin puedes disfrutar uno de los deportes extremos
más peligrosos y emocionantes. Ya está aquí: transporte
urbano, una de las aventuras más delirantes, riesgosas y baratas
del mundo. Por sólo 3.50 pesos podrás exponer tu vida en
cualquier parte de la ciudad. Enfrenones, arrancones, exceso de velocidad,
una verdadera fuente de adrenalina..."
Musicalmente, Radiobemba explora toda las variantes del
rock, y ello incluye las numerosas bandas hispanas y latinoamericanas,
pero también las sonorenses, en un programa de talentos locales.
Sin embargo, quizá sea el espacio para el metal o el death metal,
el más intenso. Su conductor se autonombra Anomia y se define
esencialmente como un metalero, pues la identidad con el auditorio es esencial.
"A los batos metaleros no los engañas, pues mas allá de lo
que se dice que son satánicos, lo principal es que los batos son
auténticos, porque el metal no sólo es música... es
una forma de vivir", indica.
Finanzas y tecnología
"Sostener el proyecto es lo más complejo. La búsqueda
de patrocinios y la afiliación de socios de la radio para financiar
algo a lo que por ley tendríamos derecho es lo más difícil",
afirma Lulie, una egresada de geología, ahora encargada de administrar
el proyecto.
Los patrocinios son complicados, pues deben estar acordes
al perfil de la radio. En un principio fue una tienda pequeña de
autoservicio, luego una pizzería que pagaba con alimentos su patrocinio,
por lo que el personal de la radio comía ahí. Y aunque el
costo de la radio no es mucho -16 mil pesos mensuales, pues no hay sueldos-,
hay ocasiones en que se debe optar por pagar la luz y dejar para mejor
ocasión el teléfono, aunque esté cortado.
Lo técnico tampoco ha sido fácil: la improvisación
sumada al aprovechamiento al máximo del ingenio de Santiago, un
joven argentino llegado a México en bicicleta desde su tierra. Su
ingenio permite transformar un aparato de rayos X de desecho en fuente
de piezas fundamentales para mantener la transmisión de Radiobemba.
|