VW tendrá la producción más baja de su historia

Esperan inversión de 5 mil millones de dólares para la industria automotriz

FABIOLA MARTINEZ

El gobierno federal prevé para el próximo año una inversión de 5 mil millones de dólares para la industria automotriz mediante los nuevos proyectos programados por las trasnacionales Ford, Chrysler y Volkswagen (VW).

Sin embargo, admitió el líder del sindicato de VW, José Luis Rodríguez Salazar, mientras ello ocurre "este será un año crítico para nosotros", porque en la planta de Puebla se espera una producción de 231 mil unidades, la más baja en la historia de la firma en nuestro país, esto es, 56 mil vehículos menos que al cierre de 2003.

Al término de una reunión que tuvieron los integrantes de la dirigencia de la Unión Nacional de Trabajadores y el presidente Vicente Fox, Rodríguez refirió que VW tiene una inversión programada de 2 mil millones de dólares para el lapso 2003-2007, mientras que Chrysler ha anunciado mil 800 millones y el resto corresponde a Ford.

En el caso de la trasnacional alemana, la "situación crítica" podría empezar a revertirse a partir de noviembre, cuando se inicie la producción de un nuevo modelo, a fin de concluir 2005 con la fabricación de 400 mil unidades y un número mayor para el siguiente bienio.

Por ello, dijo, 2004 está previsto como un año difícil por el cambio de modelo y además porque el mercado estadunidense no ha reaccionado, pero en los meses subsecuentes habrá dos puntos favorables: se ha pactado la producción de cien mil unidades para el mercado europeo a partir del proyecto "amarrado" de Bora (Jetta A5) y 50 mil unidades del Golf A5, ensamblado hasta ahora en Brasil, para los consumidores en Estados Unidos.

Mientras tanto, los 9 mil 750 empleados de la planta de Puebla deberán soportar este año el esquema de reducción de jornada laboral y de salario -identificado como "4 x 3" en el que laboran cuatro días y descansan tres- aceptado por el sindicato como la única alternativa para salvar el empleo de 2 mil obreros.

De hecho, una de las peticiones que expusieron al presidente Fox es mantener el apoyo del gobierno federal mediante el esquema de becas para compensar la caída salarial, solicitud que aún se encuentra en negociación con la Secretaría del Trabajo.