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México D.F. Jueves 29 de enero de 2004
MEXICO SA
Carlos Fernández-Vega
Avance, pero a paso muy lento, tras el raquitismo del trienio
La verdadera identidad del IPAB
REGULARMENTE MAS CENTRADO que la administración del "cambio" en lo que a proyecciones y análisis económicos se refiere, el Banco de México parece coincidir con la visión del inquilino de Los Pinos (2004 "será el año de la recuperación y el crecimiento"), pero no tanto.
PARA EL PRESENTE AÑO, estima la institución a cargo de Guillermo Ortiz, se anticipa "que se consolide la recuperación de la economía mexicana, mostrando un crecimiento sustancialmente mayor al de 2003, aunque aún por debajo del potencial", es decir, avanzaría pero a paso lento, o incluso muy lento.
DE ENTRADA, CUALQUIER avance que llegara a reportarse económicamente en el cuarto año del "cambio" sería "sustancialmente mayor" al registrado en 2003, 2002 y, en especial, 2001, porque en esa materia el balance del trienio es raquítico: 0.6 por ciento como promedio anual. Entonces, si dicho incremento fuera de 2.4 y no de 1.2 por ciento como ya se afirma, en el año previo, el hecho ya sería trascendente, según esa versión.
ESE BALANCE ANUAL de 0.6 por ciento sería el correcto si en el año recién concluido la economía mexicana hubiera registrado un "avance" como el citado (1.2 por ciento), como lo adelantó el informe sobre la Inflación octubre-diciembre 2003. Programa monetario para 2004, que el Banco de México divulgó ayer, una minúscula proporción incluso por debajo de la "previsión reconsiderada" (1.5 por ciento) que el propio instituto bancario hiciera al cierre del tercer trimestre de aquel periodo.
SI, COMO DICE EL inquilino de Los Pinos, 2004 será "el año de la recuperación y el crecimiento económico", el comportamiento de los indicadores respectivos tendría que mostrarse muchísimo menos tacaño con respecto a lo hasta ahora registrado.
TAL Y COMO LE SUCEDIO en el primer bienio de ejercicio, la administración del "cambio" erró, y por mucho, en su estimación sobre el crecimiento económico en 2003. Originalmente proyectó -y se aferró a ese cálculo- un avance de 3 por ciento para el periodo; en los hechos sólo se alcanzó 1.2 por ciento. Si esta cifra se compara con la obtenida en 2001 (-0.3 por ciento), entonces la tesis de Guillermo Ortiz sí es válida al comparar los resultados de uno y otro año.
MIENTRAS LA ECONOMIA mexicana muestra un avance "sustancialmente mayor" al de años previos, el Banco de México dio su versión de los hechos, es decir, coincidente con la de Los Pinos, pero no tanto: "Es previsible que la reactivación económica en México durante 2004 sea cíclica. Por ello, no deben desestimarse las inercias y rezagos de carácter secular que la economía mexicana no ha podido superar. En particular, las exportaciones mexicanas han venido perdiendo competitividad en los mercados globales, como lo muestra su menor participación en las importaciones estadunidenses. Asimismo, a pesar de la recuperación esperada, la tasa de crecimiento del PIB proyectada para el presente año es inferior a la potencial. En este sentido, resulta preocupante la debilidad que ha mostrado la formación bruta de capital fijo en los últimos tres años".
DE ACUERDO CON EL banco central, la actividad económica en México presentó un repunte cíclico en el cuarto trimestre de 2003, lo que se reflejó tanto en los indicadores de la demanda agregada como de la producción. En lo que toca a la demanda interna, el gasto en consumo privado mantuvo una importante expansión favorecido por una mayor disponibilidad de crédito, por bajas tasas de interés, por la "persistencia de incrementos reales en las remuneraciones en diversos sectores" y por el importante volumen de remesas familiares recibidas del exterior.
ESE FUE EL ASPECTO generoso, porque, en contraste, la reactivación económica no representó un incentivo suficiente para alentar una recuperación de la inversión. En efecto, la formación de capital parece estar desalentada, entre otros factores, "por la falta de avances en la instrumentación de medidas de cambio estructural que detonen una mayor rentabilidad de los proyectos de inversión", de acuerdo con la visión del Banco de México.
CONTRA LA EUFORIA DE Los Pinos por la "mejoría" de los indicadores de empleo en el país, el Banco de México intentó matizar la situación: el mercado laboral "se caracterizó por la mejoría de algunos indicadores, particularmente el correspondiente al empleo formal (con datos desestacionalizados), mientras otros todavía mostraron cierto deterioro. Debe mencionarse que los incrementos salariales continúan sin reflejar plenamente la posición de la economía mexicana en el ciclo económico actual y, por consiguiente, la lasitud prevaleciente en el mercado laboral''.
POR LO QUE TOCA AL renglón inflacionario, el organismo señala que hacia finales de 2003 se presentó un ligero repunte, influido por el aumento de la inflación general en la primera quincena de noviembre, atribuible, en gran medida, a la terminación de las tarifas de verano para el consumo de electricidad. A su vez, las expectativas de inflación para los siguientes 12 meses mostraron, en lo general, un descenso, y a largo plazo las perspectivas anticipan un descenso estable en dicho indicador, si bien todavía superior a la meta.
DE OCTUBRE A DICIEMBRE pasados se registraron diversos acontecimientos que dieron lugar a un incremento en la volatilidad de los mercados financieros (léase especulación), reflejada en variaciones en el tipo de cambio y en las tasas de interés a corto plazo. La incertidumbre en los mercados financieros obedeció en un principio a factores externos, entre los que se encontraba la depreciación del dólar estadunidense.
PARA 2004, EL BANCO de México prevé un crecimiento del PIB real que se situaría entre 3 y 3.5 por ciento; se generarán alrededor de 300 mil plazas en el sector formal; el déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos equivaldrá a 2.2 por ciento del PIB; la inflación descenderá en línea con una eventual convergencia hacia la meta establecida de 3 por ciento, con un intervalo de variabilidad de más/menos uno por ciento.
Las rebanadas del pastel:
MAS DESCARADO QUE NUNCA, ya no le importa que públicamente lo identifiquen como el Instituto para la Protección de los Amigos Banqueros, es decir, el IPAB. [email protected]
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