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México D.F. Miércoles 28 de enero de 2004
TEATRO
Mariana Norandi
La sirvienta de Karl Marx
NO ES FACIL alterar la imagen pública de los grandes personajes que ha dado la historia y que, a través de los años, han sido endiosados por sus seguidores. Tarea complicada es ensombrecer a todas aquellas personalidades mitificadas por sus significativos legados, filosóficos, artísticos o revolucionarios, destapando secretos de su vida privada. Jesucristo, Ernesto Che Guevara, Gandhi, la madre Teresa de Calcuta o Karl Marx son algunos de esas figuras difíciles de empañar desenmascarando cuitas domésticas. Aún así, hay quienes se adentran en tal aventura.
HIRIENDO LAS SENSIBILIDADES de los marxistas más ortodoxos, el dramaturgo Isaac Slomianski escribió y dirige el monólogo La sirvienta de Kart Marx, en la que en voz de ésta se cuenta que el ideólogo y promotor de una sociedad sin clases, tenía una sirvienta de la que abusó y embarazó una noche de excesos etílicos, desconoció a su hijo y lo regaló a una familia obrera.
INTERPRETADA POR LA actriz Sofía Salomón, la puesta carga de contradicciones la legitimidad de la filosofía marxista, y pone en tela de juicio la autenticidad de los grandes mitos creados por el hombre. La actriz comenta al respecto: "No creo que esta obra eche por tierra la filosofía marxista, para mí sería muy difícil algo así. El problema es que la gente tiende a pensar que esos grandes teóricos y esos grandes hombres son santos. Y no es sólo con Marx. La gente tiene la necesidad de crear mitos para adorarlos". En eso estamos de acuerdo, a estas alturas, la obra de Marx no es fácil de embarrar.
Textos y testimonios de personas cercanas
SEGUN SU AUTOR, este montaje está basado en textos y testimonios históricos de personas cercanas a la vida privada de Marx, como el diario de su esposa Jenny. Pero ni en la obra ni en el programa de mano, ni entrevista, especifica con claridad los documentos utilizadas para la construcción biográfica que realiza. Y añade que este monólogo nace tras la revisión que hizo de su obra: "Estaba leyendo sobre Marx y vi que tenía una sirvienta, eso me pareció algo raro en él. Luego, al profundizar sobre el tema, descubrí más cosas de la relación con su sirvienta y me sacudió. Marx es una figura moral, y si uno quiere revisar su vida privada a partir de la moral que él construyó, o que sus seguidores han estado construyendo a lo largo de 150 años, ahí es donde aparecen los boquetes y hay gente que se siente ofendida. Un día, después de una función un chavo universitario me dijo: 'Me has matado a mi Dios'. Se trata de revisar toda esa mitomanía que tenemos".
LA OBRA ESTA basada en la década de los años 60 del siglo XIX, cuando Marx y su familia vive en Londres, mueren tres de sus hijos en cinco años, vive una crisis económica aguda y escribe su más grande obra, El Capital. En cuanto a la vida de la sirvienta, la escena narra el momento en que el matrimonio Marx le quita su hijo y lo entrega a una familia obrera, por lo que ella entra en una fuerte crisis emocional.
Ambientación
INTERESANTE EN LA obra es el trabajo de ambientación de Carolina Jiménez. Con pocos elementos escenográficos y buenas transiciones de luz, crea una acertada ambientación donde describe una cocina humilde de una casa de la capital inglesa. Una mesa, dos bancas de madera rústica, algunos elementos de cocina y un entorno gris londinense, forman una atmósfera intimista y melancólica que aporta un interesante contexto al monólogo.
LA ACTUACION DE Sofía Salomón demuestra que tras su personaje se esconde una gran actriz, que vive su papel con intensidad pero, por momentos, su sufrimiento escénico se vuelve lineal y poco veraz. Le falta a veces substraerse de la escena real y adentrarse con más profundidad en la escena dramática.
EN ESTAS NUEVAS épocas, en las que proliferan espacios informativos sobre la vida privada de personajes públicos, donde parece ser que importan más las asuntos domésticos que lo legados artísticos, filosóficos, sociales o literarios, surge esta obra, no carente de valentía y calidad, pero que no tiene la suficiente fuerza para ensombrecer la vida de uno de los más grandes pensadores universales que, equivocado o no, cambió la historia del mundo, ideó una sociedad más justa y alimentó el mundo de algo tan necesario como las utopías.
LA SIRVIENTA DE KARL MARX: teatro El Granero Xavier Rojas. Centro Cultural del Bosque (detrás del Auditorio Nacional). Funciones: lunes, 20 horas. Entrada 150 pesos.
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