La empresa no ha entregado mil 200 viviendas

Constructora de casas engaña a miles de maestros en Puebla

LA JORNADA DE ORIENTE

Puebla, Pue., 21 de enero. Un grupo de profesores denunció que la empresa Arquitectura en Obras Prácticas, propiedad del constructor Emilio Gómez Espinosa, no ha entregado más de mil 200 viviendas que debió construir en los municipios de Puebla, Atlixco, Cuautlancingo, Tehuacán y San Andrés Cholula.

Por su parte, integrantes de comités de colonos de las unidades Guadalupe y Unificación y Economía Magisterial aseveraron que aunque a ellos sí les cumplieron, las viviendas se las entregaron años después de la fecha prometida y con múltiples irregularidades, como filtraciones, goteras, fracturas en techos y paredes, sin energía eléctrica, agua, drenaje, bardas de protección, pavimento ni alumbrado.

Acusaron de negligencia, ineptitud o corrupción a la delegación del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) y a los últimos cuatro comités seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) -encabezadas por Mario Adolfo Ramírez Partida, Cutberto Cantorán Espinosa, Gonzalo Amador Juárez Uribe y Jesús Huerta Carrera-, ya que ninguno se ha interesado por dar solución al problema.

Cantorán Espinosa respondió que el proyecto de la unidad Guadalupe no fue apoyado durante su gestión, debido a que las casas se construyeron cerca de un ducto de Petróleos Mexicanos, pero tampoco hizo nada por solucionar el problema de los maestros.

Juárez Uribe sostuvo que los complejos habitacionales también fueron avalados por las comisiones ejecutivas del ISSSTE y el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, mientras que la delegación del primer organismo, mediante una comisión técnica, fue responsable de emitir los cheques al constructor, conocidos como ministraciones, previa comprobación del avance de la obra.

Sostuvo que el actual secretario general, Jesús Huerta, y Rodríguez Francisco Canul, secretario de vivienda, debieron oponerse a la entrega de dinero hasta que la empresa cumpliera con los requisitos mínimos de avance.

Ante estas anomalías, los profesores de Chapulco, en la capital del estado, presentaron una queja ante la Secretaría de la Función Pública, de la cual no tienen informes sobre su avance. Señalaron que también denunciaron su caso ante la secretaria general del Partido Revolucionario Institucional, Elba Esther Gordillo, y el dirigente nacional del SNTE, Rafael Ochoa Guzmán, quienes habrían reprendido duramente a Jesús Huerta, actual secretario seccional, pero las cosas siguen sin solución.

Afectados de Atlixco denunciaron que sobre el pasado comité seccional pesan fuertes sospechas de tener "tratos" con la constructora o haber sido sobornados con material de construcción y residencias, a cambio de impedir que los maestros denunciaran penalmente al empresario.

Los precios de las viviendas oscilan entre 183 mil pesos y 250 mil pesos, aunque en el caso de la unidad Guadalupe, debido a que fueron otorgadas mediante un esquema de financiamiento de 40 por ciento Fovissste, 40 por ciento una institución bancaria y 20 por ciento los maestros, sus casas casi duplicaron su precio.

Dijeron que algunos ya pagaron su deuda ante la dependencia, pero todavía no liquidan el préstamo bancario que deberán cubrir en los próximo 15 años. "Vamos a dar mucho dinero por una casa que antes de que terminemos de pagar se va a caer", aseveró uno de los perjudicados.

Los quejosos advirtieron que la falta de apoyo también se extiende a la delegación del ISSSTE, en la que han sido regañados, maltratados o simplemente les han dado largas al asunto, además de que les han negado la entrega de sus estados de cuenta.

Este miércoles, el secretario seccional Huerta Carrera sostuvo que una importante cantidad de viviendas está lista para habitarse, aunque en un recorrido efectuado por las unidades habitacionales de cuatro municipios se pudo comprobar que no hay servicios públicos, muchas casas tiene desperfectos, humedad, faltan contactos y apagadores, además de que las últimas etapas de construcción están abandonadas. En el segundo complejo no existe siquiera acceso principal, drenaje ni agua.

La empresa, dijeron los quejosos, sólo concluyó las unidades Nuevo Milenio Teziutlán y Huauchinango.