El ex asesor de Salinas trabaja para consorcio francés

Córdoba, detrás de concesión del alumbrado en Puebla

Pese a irregularidades, el Congreso local aprobó el contrato

LA JORNADA DE ORIENTE

Puebla, Pue., 21 de enero. José María Córdoba Montoya, ex asesor del presidente Carlos Salinas de Gortari, logró que en este municipio se reforzara la participación de empresas extranjeras en la cogeneración de energía eléctrica, mediante un irregular título de concesión para el manejo de alumbrado público y semáforos que el ayuntamiento, presidido por el panista Luis Paredes Moctezuma, entregó a Mexicana de Mantenimiento en Alumbrado (MMA), filial del consorcio francés Citelum.

El nexo visible entre Córdoba Montoya y MMA es Alejandra Parrodi, representante legal de la firma internacional de abogados Basham, Ringe y Correa SC, quien también es accionista de la sucursal francesa. Córdoba Montoya, asegura José Rodolfo Herrera Charolet, diputado local de Convergencia, es asesor del despacho de litigantes.

Además, Córdoba, quien presta sus servicios de cabildero a varias compañías internacionales especializadas en la generación de energía eléctrica, se entrevistó con el alcalde angelopolitano el 24 de julio de 2003. El edil, quien en su juventud fue militante del Frente Universitario Anticomunista, en principio se negó a revelar el motivo de la reunión, pero cuando trascendió en los medios locales que el diálogo versó sobre la concesión del alumbrado, reconoció que el ex asesor salinista le ofreció "un negocio muy atractivo de generación de electricidad".

Paredes Moctezuma firmó un título de concesión con MMA por 15 años, que entró en vigor el primero de abril de 2003. La Ley Orgánica Municipal ordena que cualquier permiso que trasciende el periodo de gobierno municipal -un trienio- debe ser autorizado por el Congreso; sin embargo, el alcalde ignoró dicho requisito.

Por más de un mes el munícipe se negó a acatar la ley, pese a los llamados que se le hicieron desde el Poder Legislativo, y cuando por fin sometió el contrato a consideración del pleno de diputados, a mediados de mayo, éstos encargaron a las principales instituciones de educación superior en la entidad -las universidades Autónoma de Puebla, de las Américas y el Instituto Tecnológico- que realizaran un dictamen sobre el documento.

Los tres centros de estudio coincidieron en que dicho documento era ilegal porque estaba funcionando sin la anuencia del Congreso, y señalaron que la concesión presentaba ventajas económicas para MMA, empresa que, añadieron, no tiene experiencia en el ramo que pretende servir, pues fue constituida ex profeso para trabajar en Puebla.

Uno de los cuestionamientos más severos a la concesión fue que MMA se constituyó con un capital social de sólo 50 mil pesos y ostentaría un contrato mediante el cual el ayuntamiento le pagará aproximadamente mil 600 millones durante los tres lustros pactados.

Además, no contaba con oficinas, equipo ni personal para realizar los trabajos que se le encomendaron. Todos esos elementos le fueron proporcionados por la comuna. De hecho, en estos meses la filial de Citelum se ha dedicado a hacer el trabajo que rutinariamente hacía el Departamento de Alumbrado Público del ayuntamiento.

Las irregularidades de la concesión y la conducta de Paredes Moctezuma provocaron malestar en algunos miembros de las bancadas priísta y panista, así como en las fracciones de PRD, PT y Convergencia.

Los diferendos causados por el contrato provocaron que el asunto fuera tratado por el pleno de los diputados hasta la última sesión ordinaria del año pasado, realizada el 11 de diciembre. Se trató de un acto extenuante, con 32 puntos en el orden del día, en el que se analizaron cinco reformas e iniciativas de ley, sin que se dispensara la lectura de los legajos. La sesión duró 16 horas y el tema de la concesión del alumbrado se votó hasta el final, cerca de las 4 de la madrugada del 12 de diciembre. Se impuso la mayoría priísta -con excepción de los diputados Carlos Meza Viveros, Mario Montero Serrano y Javier López Zavala- y hubo un voto dividido del PAN, pero la concesión se aprobó.

De esa forma, se validó el contrato por el cual durante los próximos 15 años MMA tendrá que sustituir 47 mil luminarias de 150 watts por otras de 100 watts, colocar aproximadamente 40 mil lámparas en las colonias donde no hay alumbrado público, instalar iluminación artística en un centenar de edificios históricos y traer dos veces al año un espectáculo de "aguas saltarinas".

Francisco Javier Torres Sánchez, jefe de asesores del ayuntamiento y principal operador de la concesión, informó que de abril a la fecha, MMA ha colocado alumbrado público en seis colonias donde se carecía del servicio; cambió 500 luminarias fundidas; iluminó la catedral; el palacio municipal y dos fuentes de la ciudad, y presentó dos veces "shows acuáticos", por lo que el ayuntamiento pagó 40 millones de pesos, mientras que la empresa "invirtió" aproximadamente 30 millones.

El funcionario detalló que los 40 millones que recibió MMA no incluyen el pago de energía eléctrica, que el año pasado implicó un gasto de 90 millones, mismos que el ayuntamiento depositó a la Comisión Federal de Electricidad.

En opinión del regidor independiente Eduardo Alcántara Montiel, las actividades de MMA se restringieron el año pasado a operar el servicio de alumbrado, pues nunca se percibió una inversión fuerte por parte de la empresa, la cual se "conformó" con trabajar con los vehículos y herramientas que le dejó el ayuntamiento.

Agregó que si bien hay iluminación nueva en la catedral y el palacio municipal, el trabajo en el resto del ayuntamiento aún no se nota; incluso, dijo que él, como ciudadano común y corriente, pidió la reparación de lámparas cercanas a su casa, pero su petición fue atendida un mes después, a pesar de que MMA y el ayuntamiento aseguran que tardan 72 horas en atender las demandas.