En el país aún se ve como algo normal, según experta

Sufre violencia doméstica una de 4 mujeres en el mundo

La mayoría de casos, por desconocimiento de derechos, dice

En México, la violencia hacia las mujeres sigue siendo un fenómeno que se asume "como algo normal", lo que permite que la agresión física o sicológica esté justificada culturalmente y forme parte de las relaciones familiares entre hombres y mujeres, afirma Isabel Bueno Lázaro, especialista en temas de género e investigadora del Departamento de Sicología de la Universidad Iberoamericana (Uia).

Tras realizar un análisis sobre mujeres que habitan en zonas urbano-marginadas y que mantienen relaciones de pareja estables, afirma que en los casos estudiados, "la mujer asume un papel tradicional, donde el hombre tiene un comportamiento machista, acostumbra hacer lo que dice y no considera la opinión de su compañera, quien debe someterse a lo que éste impone".

En ese contexto, asegura, "la violencia es percibida como algo normal, cotidiano, que ocurre cuando el esposo está cansado o harto y agrede a su pareja, mientras ella también se desahoga por medio de la violencia verbal. De esta forma, la descalificación es vista como parte de la vida cotidiana".

Al respecto, estudios realizados por el Fondo de Naciones Unidas para el Desarrollo de la Mujer indican que, a escala mundial, una de cada cuatro mujeres sufre violencia doméstica, ha sido víctima de intento de violación o es acosada sexualmente en el trabajo o en espacios públicos, mientras que una de cada cuatro niñas es objeto de algún tipo de intromisión en su intimidad.

Estimaciones realizadas por el Banco Mundial establecen que en las economías de mercado, la violencia de género es responsable de uno de cada cinco días de vida saludable perdidos por las mujeres en edad productiva, además de ser una de las principales causas de muerte e incapacidad, "tan grave como todos los tipos de cáncer, accidentes de tránsito y afectaciones por malaria".

En México, un análisis realizado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática sobre el perfil de hombres y mujeres, indica que "la violencia entre géneros tiene como fondo las relaciones asimétricas que se construyen sobre la base del ejercicio del poder masculino y se reproducen con el uso de la fuerza"

Los factores que mantienen y reproducen la violencia doméstica, agrega el estudio, incluyen el desconocimiento que tienen las mujeres de los derechos y obligaciones de los mecanismos legales que las protegen de la violencia, así como la aceptación social de las formas en que los varones asumen la autoridad y el ejercicio de poder para tener subordinado al sexo femenino.

En ese sentido, la investigadora de la Uia reconoció que a pesar de las campañas impulsadas para que las mujeres no acepten la violencia como algo normal, aún es necesario aplicar programas que ayuden a prevenir este fenómeno y permitan un cambio en las relaciones entre las parejas, "para resolver los problemas dialogando y no con golpes, pues las mujeres tienen derecho a relacionarse con los hombres de igual a igual".

No obstante, indica que las mujeres aún están expuestas a diversas formas de maltrato físico o emocional, aunado a una carga social que no les permite ningún atenuante frente a los papeles tradicionales que deben asumir, como la maternidad o las relaciones de pareja.

LAURA POY SOLANO