La embajada mostró a los medios de información su procedimiento

En dos años, la expedición de visas de EU en México pasó de 2.6 millones a 900 mil

Aquí "se tiene instalado el centro de operaciones más grande y con mayor tecnología": Garza

ROSA ELVIRA VARGAS

A pesar de que México es el país al que Estados Unidos otorga más visas de turista, en los dos últimos años la expedición de ese documento ha disminuido en dos terceras partes, al pasar de 2 millones 600 mil a poco más de 900 mil en el último año fiscal. La explicación a ese fenómeno es variada, pero los oficiales consulares estadunidenses nunca admiten que se deba a restricciones impuestas por su gobierno y simplemente señalan que "la demanda ha bajado".

Con todo, el férreo sistema de control de datos impuesto por Estados Unidos a este trámite le permite concentrar -y sin que el solicitante se entere- las referencias puntuales que acompañan a toda demanda de visa, sea satisfecha o no, en sus archivos de la FBI, el Departamento de Seguridad Interna, así como en uno llamado Base de Datos Consolidada que contiene las solicitudes presentadas ante las oficinas que tiene el gobierno estadunidense en el mundo.

Los bancos de información de esas oficinas son consultados invariablemente por la propia oficina de visas, y es tan prolijo y detallado en la información que contiene, que impresiona. De hecho, de los datos que contengan esas computadoras puede modificarse la decisión previa de otorgar el documento para ingresar a Estados Unidos.

Siempre bajo el amparo de sus leyes nacionales, la embajada de Estados Unidos archiva fotografías, huellas dactilares y demás referencias personalísimas del solicitante. Además, se han reforzado los "candados" que una vez dentro del área de visas se imponen para detectar, por ejemplo, documentos falsos o evitar actos de complicidad con algún oficial consular, que son quienes tienen la última palabra para decidir sobre una visa.

Por primera vez, a decir del propio embajador Tony Garza y su oficina de prensa, la representación de Estados Unidos en México abrió a la prensa el detallado proceso que se sigue para la expedición de las visas de no migrantes. Y lo hicieron no sólo porque están "orgullosos" de su eficiencia, calidad y servicios "al cliente", sino porque, a decir del diplomático, en México se tiene instalado el centro de operaciones de este tipo más grande y con la mayor tecnología del mundo.

Garza y la cónsul general Laura Clerici presentaron su intrincado mundo de controles, verificación de datos y documentos, antesalas, toma de variables biométricas y demás, a los cuales se someten a diario un promedio de 9 mil personas en todo el país. Esto, claro, una vez que por lo menos dos semanas antes han solicitado cita en la embajada o consulado de provincia, y a que por supuesto pagaron 100 dólares únicamente para tener derecho a ser recibidos en la oficina encargada de visas.

En la embajada se aseguró que la gente puede tantas veces como lo desee reintentar la operación de obtener la visa. Pero los interrogatorios y el "no" rotundo de los oficiales, cuando la niegan, quedan en un gesto elocuente e imborrable.