México D.F. Martes 18 de noviembre de 2003
Tesis de El Fisgón, Helguera y
Hernández en el libro El sexenio se me hace chiquito
Fue Salinas y no Vicente Fox quien sacó al PRI
de Los Pinos
Pasan revista al gobierno de quien ''condensó
en tres años los errores cometidos por otros en seis años
y ahora abre la puerta al tricolor'' La libertad de expresión
''se conquista''
ARTURO GARCIA HERNANDEZ
Que no le digan, que no le cuenten: Vicente Fox no sacó
al PRI de Los Pinos; ya estaba fuera cuando el de las botas obtuvo la Presidencia.
Quien en realidad sacó al tricolor de Los Pinos fue Carlos
Salinas de Gortari, para meter al PAN. Lo que está haciendo Fox
es abrirle la puerta otra vez al PRI. Esta es la tesis central que recorre
el libro El sexenio se me hace chiquito, en el cual los caricaturistas
Rafael Barajas (El Fisgón), Antonio Helguera y José
Hernández pasan revista al gobierno de Fox ''que logró condensar
en tres años los errores que otros cometieron en seis".
El sexenio se me hace chiquito es el tercer título
de una saga que empezó con El sexenio me da risa (sobre el
gobierno de Salinas) y siguió con El sexenio me da pena (sobre
el sexenio de Ernesto Zedillo).
Crisis de angustia
-Si
se puede poner en estos términos, ¿quién es peor:
Salinas, Zedillo o Fox?
El Fisgón no tiene dudas:
-Los tres son peores en la medida que sostienen un proyecto
económico global de arrasamiento de la humanidad, sólo comparable
en sus efectos al fascismo. Salinas es perverso; Zedillo, cínico,
y Fox, siniestro en su frivolidad.
El caricaturista de La Jornada describe la trilogía
sobre los sexenios como libros ''de historia moderna". Cuando salió
el primero, ''nos dijeron que la crítica era excesiva, desmesurada,
pero con el tiempo nos han dicho que nos quedamos cortos. En el segundo
decíamos que Zedillo tenía dos candidatos a la Presidencia
de la República: uno era Labastida y el otro era Fox. El nuevo libro
lo teníamos que haber hecho al final de este sexenio, pero tuvimos
que sacarlo antes, porque Fox se nos adelantó hace unos meses cuando
dijo que su sexenio ya había terminado. Tiene el agravante de haber
salido más grueso que los dos anteriores, porque Fox logró
condensar en tres años los errores que los otros cometieron en seis".
Entre las conclusiones que los caricaturistas han obtenido
al realizar este trabajo es que ''el gobierno de Fox es la continuidad
de los gobiernos neoliberales" y que -remarca Helguera- ''no hay el prometido
cambio. Ahora tenemos una crisis de angustia vital. Nos sabemos qué
va a pasar de aquí a 2006, porque Fox ya decretó el fin de
su sexenio, pero las matemáticas son las matemáticas. Y si
los tres primeros años fueron así, quién sabe qué
pasará durante el resto del sexenio. Tal vez suene pretencioso decir
eso, pero en el fondo es lo que quisiéramos: que quienes se fueron
con la finta del voto útil por el cambio, reflexionaran bien
antes de marcar una boleta''.
Priístas notables, los operadores
Para El Fisgón, Vicente Fox ''ha sido un
presidente torpe y sin oficio político". Y ahora resulta que ''el
hombre que prometió sacar al PRI de Los Pinos ya lo está
regresando. Todo indica que priístas notables son los grandes operadores
de Los Pinos. Concretamente Elba Esther Gordillo, Carlos Salinas de Gortari,
Roberto Madrazo Pintado". Todo eso queda reflejado en El sexenio se
me hace chiquito: ''La idea era hacer un libro útil (risas)".
Helguera refiere que hay quienes les dicen que pueden
criticar a Fox gracias a la libertad de expresión que el propio
mandatario permite: ''Eso es totalmente falso. La libertad de expresión
es relativa, se goza en algunos medios, sobre todo impresos, pero es una
libertad que conquistamos nosotros, los periodistas, peleamos por ella;
no es dádiva de ningún presidente, mucho menos de Fox".
Rafael Barajas abunda al respecto: ''Los gobiernos mexicanos
hicieron una estrategia de control de medios que funcionó muy bien
durante 60 años, que formó un tejido de intereses muy fuerte
dentro del que se mantenía la prensa. Con la caída del PRI,
obviamente ese tejido de intereses se resquebrajó, pero está
siendo sustituido por una nueva forma de hacer periodismo que ya no es
espejo de aquel aparato corrupto, autoritario y vertical; sin embargo,
ahora estamos ante un periodismo básicamente vinculado con las normas
y formas de funcionar de la iniciativa privada y del mercado. Lo cual no
implica que no sea corrupto; también tiene un sesgo muy claro".
(El sexenio se me hace chiquito se presenta hoy
a las 19:30 horas en el Centro Cultural San Angel. Participan: Rius,
Naranjo, Patricio y los autores. Habrá un palomazo informativo
de Armando Vega Gil y Fernando Rivera Calderón.)
Caricatura de El Fisgón tomada del libro El sexenio se me hace chiquito, tercer título de una saga
|