La recaudación adicional sería mínima, dice la Aseval

Millones de afectados si se gravan vales de despensa

ENRIQUE MENDEZ

En el paquete económico para el próximo año, enviado por el Ejecutivo a la Cámara de Diputados, también se pretende gravar las prestaciones de previsión social, que implicaría el cobro de impuestos a primas dominicales, vacacionales, un mayor porcentaje del aguinaldo y los vales de despensa, dijo la Asociación de Empresas Distribuidoras de Vales de Despensa (Aseval).

En un análisis sobre el impacto que tendría aplicar impuestos en los vales de despensa, que se entregó a diputados de diferentes fracciones con la intención de que rechacen la iniciativa del gobierno federal, se advierte que no sólo afectaría a 4 millones de familias que reciben esa prestación, sino que la recaudación adicional por gravar esa prestación sería de sólo 145 millones de pesos.

Actualmente, señaló Aseval, la recaudación por ISR, IVA y del ISR sobre la utilidad de los establecimientos afiliados que aceptan esa forma de pago, es de 9 mil 605.2 millones de pesos, y al gravar los vales sólo alcanzaría 9 mil 750.5 millones de pesos, lo cual implica ''un efecto neto positivo mínimo''.

En cambio, agregó, el efecto para los trabajadores sería mayor, pues se reduciría su poder adquisitivo al gravar directamente sus prestaciones, que serían integradas al salario, sobre el cual ya se cobra 34 por ciento de ISR. ''Deben ponderarse los graves efectos sociales y en la competitividad que en las empresas mexicanas y en la presión salarial tendría gravar esa prestación'', comenta la asociación.

De acuerdo con su evaluación, si se gravan los vales de despensa un alto porcentaje de éstos sería utilizado en la economía informal, lo que afectaría también a las empresas que hoy los reciben como forma de pago, y que les representa aproximadamente 10 por ciento de sus ventas totales.

Por el contrario, indica finalmente, para aprovechar las ventajas que puede tener el sistema de vales sobre la fiscalización y la formalización del pequeño comercio, se requiere mantener el incentivo de su uso, para lo cual deben conservarse las ventajas fiscales para trabajadores y empresas.