Celebra fracaso de la cumbre; EU, la UE y Japón eludieron compromiso en tema agrícola

Critica el CAP la postura del gobierno mexicano en la reunión de la OMC

Posible, que se logre un acuerdo mundial para el campo fundado en el multilateralismo, dice

MATILDE PEREZ Y ANGELICA ENCISO

El Congreso Agrario Permanente (CAP) celebró el fracaso de la reunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC), ya que Estados Unidos, Japón y la Unión Europea no presentaron un compromiso para eliminar los altos subsidios agrícolas y sí pretendieron presionar a las naciones en desarrollo para que redujeran las medidas generales de apoyo a sus agricultores y eliminen los aranceles.

Consideró que la postura del gobierno en la reunión que se llevó a cabo en Cancún no fue lo suficientemente "agresiva" para reforzar los mecanismos compensatorios, salvaguardas y antidumping para la agricultura. "Los agricultores tienen presente que el gobierno federal ha firmado acuerdos que abrieron el mercado nacional de manera exagerada, a pesar de que Estados Unidos y la Unión Europea han elevado los subsidios agrícolas."

Max Correa, coordinador en turno del CAP, dijo que los integrantes de ese organismo no se consideraron genuina ni plenamente consultados durante ese acto, ya que "los negociadores mexicanos no reflejaron nuestras propuestas".

La fuerza que mostró el grupo de los 22 en la reunión ministerial obliga al presidente Fox a diseñar junto con las organizaciones campesinas del país un programa de soberanía alimentaria y cumplir con los compromisos del Acuerdo Nacional para el Campo.

Agregó que el rechazo a la propuesta de los países desarrollados muestra que hay amplias posibilidades de que se logre un acuerdo mundial para el campo fundamentado en el multilateralismo y la cooperación entre países desarrollados y países en desarrollo, que garantice la soberanía alimentaria de los pueblos y una vida digna para los campesinos, proteja el medio ambiente y la biodiversidad.

Ayer en conferencia de prensa, el dirigente campesino sostuvo que es necesario elaborar un programa que contenga la estrategia de organización de productores y de las cadenas productivas vinculados a los alimentos estratégicos, con el fin de apuntalar la producción y el abasto. Pidió al gobierno que junto con las agrupaciones campesinas diseñe un programa de soberanía alimentaria, ya que las agriculturas del G 22 enfrentan una mayor vulnerabilidad ante la negativa de la Unión Europea y de Estados Unidos de reducir los altos subsidios agrícolas.

Propuso que la soberanía alimentaria sea una estrategia para combatir el hambre en el mundo y que debe formar parte de un acuerdo multilateral de las naciones para que también sea base de la protección del medio ambiente y de la biodiversidad.

Tras la reunión de Cancún, tanto Estados Unidos como la Unión Europea mantendrán las condiciones injustas para el libre comercio agrícola, situación que seguirá por al menos dos años más, lo cual será en detrimento de la agricultura mexicana, concluyó.