México D.F. Lunes 25 de agosto de 2003
APRENDER A MORIR
Hernán González G.
DMD
INSCRITA EN EL Ministerio del Interior del gobierno español el 13 de diciembre de 1984, la asociación Derecho a Morir Dignamente (DMD) es miembro de la World Federation of Right to Die Societies (Federación Mundial de Asociaciones pro Derecho a Morir), dedicada a promover la cooperación entre organizaciones que trabajan por el reconocimiento del derecho del individuo a la autodeterminación de su propia muerte.
FUNDADA EN 1980 en Oxford, Inglaterra, la federación cuenta en la actualidad con 37 organizaciones provenientes de 22 países, mayoritariamente de los más desarrollados, aunque también hay representantes de India, Zimbabue y Colombia, por cierto el único país latinoamericano miembro.
"LA FEDERACION defiende que los individuos deben tener derecho a tomar sus propias decisiones sobre la forma y el momento adecuado de su propia muerte. Cada una de las asociaciones trabaja a su modo para garantizar este derecho.
"NUESTRA CREENCIA en la libre elección se extiende a todas las asociaciones miembro. Como federación de organizaciones pro derecho a una muerte digna, apoyamos a cada una de las asociaciones federadas en su trabajo para alcanzar sus propios objetivos. No les pedimos que se adhieran a una creencia específica ni a un objetivo distinto al de apoyar el derecho de cada persona a una muerte digna."
EN CASI 20 años de trabajo, la asociación Derecho a Morir Dignamente -sin fines de lucro y cuyos servicios y actividades son desarrollados mediante la colaboración voluntaria y no remunerada de sus miembros- fomenta la creación de grupos locales en toda España. Entre otras actividades importantes que DMD lleva a cabo está apoyar investigaciones relacionadas con la muerte y la libertad del individuo para elegir racionalmente su destino personal, así como promover un clima de opinión pública favorable y tolerante con los objetivos de la asociación, actuando legalmente y con el máximo respeto hacia opiniones discrepantes. Ofrece también un modelo de testamento vital y un registro voluntario de éste, que a partir de 2001 y gracias a DMD, tiene estatus legal en Cataluña, Extremadura y Galicia.
DEFIENDE ASIMISMO el derecho del enfermo a estar informado sobre el diagnóstico y tratamiento de su enfermedad en términos que pueda comprender, a tomar las decisiones últimas sobre su tratamiento, incluida la de rechazarlo, y a recibir los medios necesarios para evitarle sufrimientos.
DMD NO DEFIENDE, en cambio, la eliminación de ancianos, de inválidos, de bebés impedidos o mentalmente retrasados. Sólo busca que sean respetadas las decisiones del adulto capacitado en lo que concierne a su enfermedad terminal y a su muerte, habida cuenta de que "el socio de DMD quiere ser dueño de su propio destino".
EN PROXIMAS entregas abundaremos sobre la trayectoria, actividades y logros de la asociación española DMD a través de las interesantes opiniones de algunos de sus miembros. [email protected]
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