México D.F. Lunes 25 de agosto de 2003
La sobrepoblación baja la calidad educativa, dice la investigadora Josefina Zoraida Vázquez
Nunca evaluar sus reformas, "gran pecado de la SEP"
La falta de programas que permitan una sólida formación de los profesores y el peso de una explosión demográfica que permitió que en 60 años se quintuplicara la población impactan negativamente en la educación, la cual enfrenta una resistencia a aplicar reformas estructurales, afirmó la experta en historia de la educación Josefina Zoraida Vázquez, profesora emérita de El Colegio de México.
"El gran pecado de la Secretaría de Educación Pública es que nunca ha evaluado las reformas que ha hecho; continuamos sólo con un plan sexenal; no ha cambiado nada. El secretario Reyes Tamez no explica bien [los programas], pero desde luego no es sólo computadoras, porque en muchos lugares hay, pero no las saben usar; es pensar todavía en el milagrito, donde está la máquina y ya", expresó.
Destacó que la baja calidad educativa se debe en gran medida a la explosión demográfica. "Si recuperamos la visión histórica, en 1910 éramos 13 millones de mexicanos con 85 por ciento de analfabetismo, en 1940 éramos 20 millones, pero en 2003 somos 104 millones, cinco veces la población de hace 60 años: Ƒqué gobierno aguanta eso? México es un país irresponsable porque ninguna nación puede asumir un crecimiento tan grande".
Recordó que en el sexenio de Luis Echeverría algunos académicos fueron invitados a participar en la transformación del sistema educativo. "El problema comenzó cuando vino el plan de 11 años y comenzamos a sentir la explosión demográfica: como no había suficientes profesores graduados se habilitó a los que hubieran terminado algún año de secundaria, se había hecho antes, pero eran maestros mejor preparados".
No obstante, señaló que "fue un gran logro del gobierno haber alcanzado esta cobertura educativa en un país que, tenemos que asumir, es pobre, pero fue rebasado por el crecimiento y la demagogia". Insistió: "después se ha cometido otro error: impedir verdaderas reformas. Estuve cerca de los intentos en la época de Echeverría, pero no se pudo hacer nada; el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación no colaboró".
Indicó que la educación también se ha roto en la familia, "los niños ya no tienen control, faltan los valores que siempre han tenido vigencia, como disciplina y honradez. Es terrible la falta de honestidad y honradez; ahí está el caso de Guido Belsasso, a quien le descubren que está haciendo negocios y sólo renuncia".
Los grandes retos en la materia se relacionan con la modificación de los programas educativos y la formación de los profesores, indicó. LPS
|