México D.F. Lunes 25 de agosto de 2003
Comprendería Norte, Meso y Centroamérica
Promueve México crear atlas regional de riesgos
Avanza el proyecto para formar red sísmica nacional
Contaría con 500 estaciones a lo largo de todo el país
Previsto como un proyecto para finales de sexenio, el gobierno federal establece contactos con Estados Unidos para elaborar un atlas regional de riesgos que abarque desde el territorio de Canadá hasta los de los países involucrados en el Plan Puebla-Panamá. Para ello la tecnología será una gran aliada, pues "la computación permite simular en gabinete un fenómeno sin esperar que ocurra", explicó Roberto Quass Weppen, director general del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred).
Además dijo que ya se elabora una red sísmica mexicana que contará con más de 500 estaciones de observación y permitirá clasificar y entender mejor la génesis de los movimientos telúricos, esfuerzo que se suma al de contar con el Atlas Nacional de Riesgos.
Según el funcionario, el país mantiene una concepción fundamentalmente reactiva y diseñada para actuar una vez que ocurren los desastres, lo que redunda en "enormes gastos sociales y económicos".
Asimismo consideró que es necesario "adelantarnos a los hechos" y lanzar al país en pos de una cultura de la conciencia del riesgo, por lo que el gobierno federal inició la labor "titánica" de crear un auténtico atlas nacional de riesgos auténtico y constituir el fondo nacional preventivo, iniciativa que se presentará en el próximo periodo ordinario de sesiones de la Cámara de Diputados.
Agregó que todas estas acciones podrían alcanzar una mayor envergadura si se avanza en la creación del atlas regional que comprendería Mesoamérica, México, Estados Unidos y Canadá, con lo cual "se lograría un espectacular avance científico y tecnológico en el mundo entero", manifestó Quaas en entrevista con Notimex.
Asimismo, dijo, se espera que antes del 12 de septiembre en el Congreso de la Unión se determinen las reglas de operación del denominado fondo nacional preventivo, paralelo al Fondo Nacional de Desastres.
El funcionario refirió que el Cenapred surgió en 1988, luego de un viaje del entonces presidente Miguel de la Madrid a Japón, en donde suscribió un convenio para crear un centro de atención para desastres sísmicos.
Al paso de los años, con una transferencia de más de 12 millones de dólares desde Japón, abundó, se construye la sede, que se inauguró en mayo de 1990, pero ya con la concepción de analizar no únicamente los sismos, sino en general los fenómenos naturales, pero también los de tipo antrópico, es decir, los generados por el ser humano.
Planteó que el territorio nacional se encuentra sujeto a una gran variedad de fenómenos que pueden causar diversos desastres naturales: es parte del llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, lo cual lo expone a una fuerte actividad volcánica. Asimismo, existe alto riesgo sísmico en dos terceras partes del país debido a la conjunción de las placas tectónicas de Cocos y Norteamérica.
La ubicación del país en una región intertropical determina, apuntó, que sea sujeto de los embates de huracanes que se generan tanto en el Pacífico como en el Atlántico; inclusive las lluvias intensas, sin ser ciclones, pueden originar inundaciones y deslaves importantes, incluso, de manera frecuente.
Señaló que el territorio nacional es susceptible de padecer escasez prolongada de lluvias y, por tanto, ser impactado por sequías que afectan la agricultura, la ganadería y la economía en general; de manera asociada figuran los incendios forestales, que ocasionan pérdidas en zonas boscosas, daños diversos y hasta pérdida de vidas humanas. AMO
|