Al destierro, 300 zoques de Chalchijapa

''Se van o acabamos con todos'', la amenaza de ganaderos en Chimalapas

ROSA ROJAS VICTOR RUIZ ARRASOLA CORRESPONSAL

Los 300 indígenas zoques habitantes del poblado de Chalchijapa, congregación de Santa María Chimalapas, Oaxaca, abandonaron ayer por la mañana la localidad ante las amenazas de ganaderos (mestizos) de la colonia Cuauhtémoc. Estos les dieron el 19 de abril 10 días para dejar la zona ''o iban a acabar con todos, hombres, mujeres y niños'', informó el presidente del consejo de vigilancia del comisariado de bienes comunales de Santa María, Silaín Hernández González.

En entrevista vía telefónica afirmó que los ganaderos comenzaron a arribar en los últimos días cerca del poblado; ''tiraban balazos con R-15, R-12 chaqueteras y cuernos de chivo. Ya sacaron a los compañeros, apenas empezaron a llegar a Santa María a las 7 de la mañana".

Explicó que 120 comuneros de Santa María, junto con los de Chalchijapa -unos 40-, integraron una brigada que fue a brechear el día 19 para terminar de marcar los nueve kilómetros que les faltaban para delimitar con la colonia Cuauhtémoc. "Yo, como consejo, me quedé con la brigada esperando a la otra de relevo, pero no llegaban porque los habían secuestrado los colonos armados con cuernos de chivo y R-15 y armas más potentes; a los compañeros de Chalchijapa que los tenían en la cárcel les dieron dos opciones: si se pasaban a ser colonos les daban las armas para que atacaran a Santa María, y si no aceptaban les daban 10 días para desalojar; si no lo hacían iban a acabar con todos. A partir de hoy está vacío Chalchijapa y aquí la mecha ya está prendida'', enfatizó.

Se le dijo que en un comunicado el gobierno de Oaxaca afirma que ''no ha habido voluntad de los comuneros zoques" para resolver el problema de límites con la colonia Cuauhtémoc. A ello contestó que ''los comuneros chimas han ido a muchas reuniones a Juchitán, a la capital de Oaxaca y a la de México buscando una solución pacífica, pero el gobierno de José Murat no ha asistido a las reuniones con la comisión intersecretarial (para atención a los Chimalapas)''.

Respecto a la propuesta del mandatario estatal de que en la región se cree una ''área protegida y reserva de la biosfera'', el indígena apuntó que la comunidad de Santa María ya había propuesto mucho antes que se expropien las 13 mil hectáreas en conflicto con la colonia Cuauhtémoc para crear un área ecológica, ''pero rompimos con la comisión intersecretarial porque habíamos propuesto que se hicieran los trabajos técnicos con los empleados de las dependencias, los representantes de los comuneros y de los colonos, pero ellos sólo querían hacer trabajos de gabinete".

Cuestionado sobre una reunión urgente convocada por Murat, afirmó que si el gobernador quiere reunirse con ellos ''tendrá que venir a Santa María, porque la asamblea comunal decidió que como ni el gobierno federal ni el gobierno estatal tienen voluntad para resolver el conflicto, ya no vamos a ir ni a Oaxaca ni a Juchitán".

La asamblea decidió también enviar un comunicado en el que se plantea que durante más de 35 años han luchado en la defensa de sus tierras y recursos naturales ''como dueños ancestrales desde 1687. Nuestros antepasados tuvieron que comprar sus tierras a la Corona española por 25 mil pesos oro común, mismo que lo ampara por el título primordial".

Recuerda que en 1850 el gobierno independiente de Joaquín Herrera certificó y ratificó la autenticidad de esos títulos después de una larga lucha, y posteriormente el gobierno federal, mediante el Departamento de Asuntos Agrarios y Colonización, entregó tierras de la comunidad "sin el consentimiento de la misma, y con esto se redujo, como es el caso de la colonia agrícola y ganadera Cuauhtémoc, que mañosamente fue creado (sic) y amparado por un decreto presidencial de 1957, con una superficie de 40 mil hectáreas dentro de los bienes comunales de Santa María Chimalapa..."

Más adelante indica que los conflictos agrarios sin resolverse son la causa de la destrucción e invasión de su selva; "se han creado mitos principalmente por intereses ilegítimos y ajenos que buscan tajadas ilícitas de la riqueza y recursos naturales de esta región, en particular el gobierno priísta del pasado y actualmente funcionarios panistas".

En tanto, la Dirección de Seguridad Pública del estado instaló una comandancia con 30 policías y dos patrullas en la comunidad de Calchicapan, punto medular del conflicto que enfrentan los comuneros de Santa María Chimalapa y habitantes de la colonia agrícola y ganadera Cuauhtémoc por la posesión de 13 mil hectáreas.

Cerca de ahí los comuneros chimalapas acordaron mantenerse en asamblea permanente para determinar si asisten o no a la reunión programada para este viernes en la ciudad de Oaxaca con la Comisión Intersecretarial y habitantes de la colonia Cuauhtémoc.

La reunión de los comuneros empezó al mediodía de este jueves y será por la noche o durante las primeras horas de este viernes cuando decidan si acuden a la casa oficial del gobierno estatal para instalar las mesas de diálogo y superar ese problema agrario, que se localiza en la región del istmo de Tehuantepec.

Las negociaciones estaban programada para este miércoles; sin embargo, los comuneros determinaron no acudir y propusieron que las mesas de trabajo comenzarán este viernes. Por su parte representantes de la Colonia Cuauhtémoc ya se encuentran en la ciudad en espera de empezar el diálogo.