Rechaza en foro la iniciativa de reforma laboral
Pese a presiones, se combatirá la corrupción sindical: Mirón
LAURA GOMEZ FLORES
La administración capitalina combatirá la corrupción sindical y el corporativismo, pese a las presiones de algunas organizaciones que se niegan a dejar sus "feudos" y reconocer los derechos de sus representados, afirmó el subsecretario del Trabajo, Benito Mirón Lince, al manifestarse en contra de la iniciativa de reforma de ley laboral, que representaría la pérdida de conquistas alcanzadas por las mayorías.
Las 20 firmas más grandes del país, como Grupo Cifra, con una plantilla laboral de 84 mil 600; Delphi Corporation, de Chihuahua, con 71 mil; Gigante, con 36 mil 890, y Pepsi, con 24 mil 900, han desconocido ya las obligaciones que tienen con sus trabajadores mediante la firma de contratos "simulados", situación que "debemos evitar".
En los últimos 10 años, la tasa de sindicalización en el país se redujo a la mitad y el número de personas en la informalidad o el subempleo, sin ninguna prestación social, con jornadas superiores a las ocho horas y sin derecho a la salud, se incrementó a 23.5 millones, contra 12.5 millones que se encuentran en la economía formal, lo cual "es preocupante porque corremos el riesgo de que se incremente de aprobarse la llamada ley Abascal".
Su concreción representaría además dejar a salvo el corporativismo y entregarle al Estado el asunto de los sindicalizados, "cuando nuestra obligación, como autoridad, es velar porque un mayor número de personas cuenten con un trabajo digno y un salario decoroso", el cual, dadas las condiciones actuales, reconoció, es difícil.
Al inaugurar el Segundo Encuentro Laboral del Distrito Federal señaló que el promedio salarial en la ciudad es de 125 pesos diarios, aunque en los últimos 16 años se amplió la diferencia salarial de 38 a 124 veces, lo cual se refleja en una pérdida del poder adquisitivo de la población de 74.5 por ciento, mientras el costo de la canasta básica asciende a mil 150 pesos semanales, por lo que "son muy pocos quienes pueden adquirirla".
La determinación por ello de las autoridades capitalinas de "velar por los intereses de los trabajadores, combatir la corrupción sindical, el corporativismo y los contratos simulados que llevan a cabo grandes empresas, con excepción de Teléfonos de México, que tiene vida sindical, pese a presiones o chantajes", argumentó el funcionario ante decenas de personas reunidas en el Museo de la Ciudad de México.
"Las cosas, hay que decirlo con honestidad, no son fáciles y no se construyen de la noche a la mañana; sabemos que tenemos problemas de diversa índole con los trabajadores del gobierno capitalino, así como muchos pendientes, pero hay una lucha para ir avanzando en su solución. La voluntad del gobierno es firme respecto de sus trabajadores", afirmó.