El siniestro ocurrió en el Centro Histórico
Incendio deja sin casa a 22 familias
ANGEL BOLAÑOS
Un edificio de los 45 identificados como de alto riesgo
en el Centro Histórico se incendió anoche y dejó en
la calle a 22 familias, que fueron llevadas a un albergue instalado en
el deportivo Cuauhtémoc.
El inmueble, ubicado en la esquina de República
de Argentina y República de Venezuela, comenzó a incendiarse
en el tercer piso alrededor de las 20:30 horas, y bomberos de las delegaciones
Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza lograron sofocar el fuego después
de las 22:30 horas.
Una
parte del inmueble, la que da frente a la calle República de Venezuela,
se vino abajo sobre un vehículo que se encontraba estacionado, y
después prácticamente todo el techo del tercer piso se desplomó.
Los bomberos combatieron el fuego incluso desde el techo
del edificio de la Secretaría de Educación Pública,
disparando chorros de agua a presión mediante cuatro mangueras.
En la planta baja, por ambos frentes hay locales comerciales de cosméticos
y mochilas, por lo que se presume que algunas viviendas eran usadas como
bodegas de mercancías.
Faustino Sánchez y su esposa Amada Sánchez,
dos otomíes del estado de México que resultaron damnificados,
manifestaron que vivían desde hace 18 años en la vivienda
número 14 del tercer piso. Ambos se encontraban fuera al momento
de desatarse el siniestro.
Faustino, de 72 años, es diablero en las
calles aledañas a República de Guatemala y Jesús María,
mientras que Amada, de 71 años, que viste todavía ropas de
su región, vendía fruta a dos calles del lugar. "Estaba por
allá y me dijeron: 'seño, se está quemando
donde vive', y como estoy enferma de mis pies me fui caminando, pero me
tardé", señaló la mujer, quien comenzó a llorar
por la pérdida de sus cosas.
En el momento que se inició el fuego se encontraban
40 personas dentro del edificio marcado con el número 32 de la calle
República de Argentina, colonia Centro; solamente fueron atendidas
tres por crisis nerviosas.
Se trata de una construcción de aproximadamente
20 metros por cada frente, con cinco ventanales en los dos pisos superiores,
sobre ambas calles, y con un patio amplio en el centro. El pasillo de acceso
estaba ocupado también con mostradores de dulces, refrescos y frituras.