Revisión del artículo 27, uno de los escollos

El acuerdo para el agro, en riesgo de venirse abajo

Agrupaciones de 24 estados no firmarán el documento

ANGELICA ENCISO L.

Organizaciones campesinas regionales integrantes del movimiento El campo no aguanta más anunciaron que no firmarán el denominado acuerdo nacional para el agro, el cual podría venirse abajo por la falta de consensos en la demanda de los productores de revisión del artículo 27 constitucional.

En las negociaciones que sostuvieron miércoles y jueves, dirigentes campesinos de El campo no aguanta más, El Barzón, la Confederación Nacional Campesina (CNC) y el Congreso Agrario Permanente (CAP) con funcionarios de las secretarías de la Reforma Agraria y de Gobernación, hubo retrocesos en la redacción del apartado agrario del borrador del acuerdo que se prevé suscribir el lunes 28 de abril con el presidente Vicente Fox.

Aunque el gobierno federal había aceptado revisar el artículo 27 constitucional, en las últimas reuniones se "echaron para atrás" y sólo admiten que se haga un análisis del marco legal, explicó José Narro, de la Coordinadora Plan de Ayala. Además, dijo, los funcionarios excluyeron el tema del rezago agrario "como si no existieran problemas por esta causa y como si no fuera algo prioritario".

Hace unas semanas organizaciones que representan a los productores privados, como el Consejo Nacional Agropecuario, la Confederación Nacional Ganadera y la Confederación Nacional de Propietarios Rurales, expresaron su rechazo a una eventual modificación del artículo constitucional si era en el sentido de asegurar la propiedad social, lo cual constituye la demanda central de las agrupaciones.

Sumado a este desacuerdo en la redacción del documento, organizaciones regionales expresaron inconformidad con el resultado obtenido en las negociaciones con el gobierno, ya que el texto no retoma las exigencias reales de los campesinos, y demandan no firmarlo.

"No se va a tirar a la basura el trabajo de años de las organizaciones regionales con la firma de un documento que es la suma de buenas intenciones o la redición de lo que para el presidente Vicente Fox es un programa de gobierno. Ya les dijimos a los compañeros del movimiento que esta es una lucha que va a continuar y el esfuerzo no es sólo para tomarse una foto en Los Pinos", señaló Alfonso Valenzuela, integrante de la coordinación ejecutiva de la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas y Autónomas (UNORCA) y de El Campo no aguanta más.

Explicó que en contra del acuerdo están la mayor parte de las agrupaciones regionales de Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Michoacán y otros 20 estados, las cuales han planteado que se debe valorar el borrador y que el proceso de consulta en las regiones no ha concluido, "no hay por qué aceptar plazos fatales ni tener miedo a no firmar". Al comité ejecutivo de UNORCA, precisó, ya se le dijo que no debe suscribir el documento, "porque somos representantes de organizaciones que deben responder a su gente y no vamos a suscribirlo, pues no estamos de acuerdo".

Sostuvo que existe inconformidad en las regiones porque las cúpulas "encerraron la negociación, no bajaron la discusión a los campesinos y dan por hecho que se va a firmar. El movimiento El campo no aguanta más no tiene jefes y no ha decidido", señaló.

Puntualizó que "en el movimiento hay una amplia coordinación, sólo que se abusó de la buena fe de muchos dirigentes regionales e inclusive hay que cambiar de voceros", quienes actualmente son Víctor Suárez, de la Asociación Nacional de Empresas Comerciales (ANEC) y Alberto Gómez, coordinador ejecutivo de UNORCA.

Valenzuela, coordinador de UNORCA en 1992, agregó que "la mayoría de las organizaciones regionales buscamos que se aprueben nuestras propuestas y que todos los actores asuman compromisos".

El fondo que autorizaron, de 2 mil 800 millones de pesos, "es una cantidad que da risa, son diez días de los recursos del Fobaproa" y lo que se requieren son compromisos con la sociedad rural mexicana; falta por incorporarse los temas de la ley indígena así como un compromiso real del Ejecutivo sobre los tratados comerciales y el presupuesto, indicó.

Otra propuesta, del Frente Democrático Campesino de Chihuahua -también parte del movimiento-, plantea que el acto más importante de las organizaciones debe darse antes del acto oficial del lunes, con la presentación del documento de propuesta de acuerdo de las agrupaciones, el cual deberá convertirse en el plan campesino del siglo XXI, y que no hay que dar importancia a la firma o no del texto con el gobierno "ni conferirle carácter definitorio".

La Asociación Nacional de Empresas Comercializadoras firmará el texto, ya que hay confianza en que se resuelvan los temas pendientes, sostuvo su director, Víctor Suárez, quien dijo que aunque agrupaciones como el Frente Nacional en Defensa del Campo Mexicano están en contra de la firma, es "irrelevante" y ya se había marginado del proceso.