Octavio Rodríguez Araujo
ƑFascismo en México?
Hay personas con relativa fama pública que deberían de ser más cuidadosas en el uso de conceptos. Hace ya tiempo el escritor Mario Vargas Llosa, por ejemplo, dijo que en México había una dictadura perfecta. Si México hubiera sido una dictadura, perfecta o imperfecta, Ƒcómo debimos calificar al gobierno de Pinochet en Chile? ƑMéxico tenía un régimen parecido al chileno? No sólo es irresponsable hacer tales comparaciones, sino que con esos deslices se hace burla de algo muy serio, que cobra vidas y que prohíbe los derechos individuales y las asociaciones independientes, etcétera. Una dictadura es algo muy grave y sus sobrevivientes o los parientes y amigos de las víctimas no aceptarán que se tome a la ligera. Lo mismo diría para quienes consideraron que la represión a una de las marchas del sábado pasado, realizada en la ciudad de México en contra de la guerra, se llama fascismo.
El fascismo se inició en Italia a partir de la crisis y las secuelas de pobreza y desempleo que dejó la Primera Guerra mundial. En esos momentos había una sensación de catástrofe, de nihilismo y de derrota apocalíptica. La burguesía europea, contra lo que pensaba al inicio de la guerra, después de ésta concluyó que corría serio peligro, que estaba en vías de liquidación, pues además de verse rodeada de pobreza observaba desde su ventana la efervescencia obrera y de trabajadores rurales. Si en Italia, en 1918, hubo casi 300 huelgas en la industria, al año siguiente el número subió a más de mil 600 con un millón de huelguistas. En 1920 aumentó a casi 2 mil con un millón y cuarto de huelguistas. La economía estaba paralizada, y el gobierno y la burguesía no encontraban solución. Esta fue proporcionada por las squadri d'azione de Mussolini, formadas por masas armadas de la pequeña burguesía, que en la versión de Mihaly Vajda "hicieron responsables de su miseria a esos trabajadores que habían obtenido algunos beneficios económicos como resultado de su lucha." Los fascistas se lanzaron contra las organizaciones de trabajadores del norte italiano, y los terratenientes y la burguesía, insuficientemente consolidados como clase en el país, renunciaron al poder político y apoyaron la opción de un capitalismo nacional y de un gobierno fuerte que terminaría, después de la marcha de los camisas negras a Roma, en manos de Mussolini, llamado a gobernar por Víctor Manuel III.
De inmediato se decretó la desaparición de los partidos, salvo el Nacional Fascista (fundado en 1921), luego se terminó con la libertad de prensa, prohibición que duró 20 años; finalmente, en 1925, fue anunciada la dictadura, con la cual se suspendieron los derechos sindicales, comenzando con la huelga, y se usó como arma política la violencia con el apoyo de la policía, los carabinieri y el ejército. El ministro de Justicia, Alfredo Rocco, presentó a finales de 1926 un proyecto de ley que establecía la pena de muerte para una serie de delitos políticos y para el efecto creó el órgano judicial especial para instruirlos.
ƑLe parece al lector que lo narrado guarda alguna semejanza con la situación de México, no sólo ahora sino en las últimas décadas?
El fascismo, por otro lado, se distinguía por su profundo nacionalismo, un nacionalismo expansionista-imperialista. Estaba basado, además, en el Estado llamado corporativo.
Mussolini -como también Hitler después- concebía el Estado como un organismo y su organización ideal como corporativista. Con base en la filosofía de Giovanni Gentile, el individuo debía subordinarse a la nación, que estaba representada por el Estado, y en éste, por lo mismo, no tenía cabida el liberalismo basado en el individualismo. La sociedad, como el Estado, era un organismo y el destino del organismo era el que importaba, no el individuo. Igualmente se rechazaba el igualitarismo socialista y su punto de partida apoyado en la realidad de la división en clases sociales y en la necesidad del conflicto de clases, que en la perspectiva del fascismo desunía a la sociedad, es decir, al organismo unitario que debía estar bajo el Estado. No es exagerado decir que el régimen fascista intentó eliminar de la historia la lucha de clases mediante el nacionalismo y el Estado corporativo.
El Estado sería envolvente, y esto significaba que fuera de él ningún valor, ninguna expresión cultural, ninguna disidencia podrían existir. Se trataba, en una palabra, de un Estado totalitario, concepto acuñado precisamente en la Italia fascista como opuesto al Estado liberal y asumido por Mussolini, a pesar de que originalmente había sido un calificativo crítico al fascismo. Y totalitarismo quiso decir pensamiento único: en los medios de comunicación, en la educación, en la producción filosófica y teórica, en cualquier lugar en donde la propaganda del régimen pudiera ser rebatida o contrarrestada, pues la propaganda (así como la retórica emocional y cargada de simbolismos) fue uno de los pilares del fascismo, tanto en Italia como en Alemania.
ƑIgual que en México?