Pendiente, la respuesta de los trabajadores sobre compactación salarial

Propone el gobierno al SUTGDF no cobrar cuotas a agremiados

Con ello los sindicalizados recibirían su salario íntegro, señala Andrés Manuel López Obrador

Existen grandes organizaciones que manipulan y controlan condicionando prestaciones, afirma

ELIA BALTAZAR

Si los dirigentes del Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF) aseguran que no conviene aceptar la propuesta del gobierno capitalino de compactar prestaciones al salario, porque entonces se tendrían que aumentar las cuotas, pues que ya no las cobren o por lo menos las bajen, para que así reciban su sueldo íntegro, manifestó ayer Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa matutina.

El jefe de Gobierno local propuso a los líderes del SUTGDF dejar de cobrar cuotas para que sus agremiados no pierdan sus ingresos, luego que argumentaron que con el aumento ofrecido por las autoridades mediante la compactación de prestaciones, éstas deberán incrementarse.

Aún pendiente la respuesta definitiva del (SUTGDF) a la propuesta de compactación de 18 de las 31 prestaciones que recibe ese gremio, para integrar al salario el presupuesto destinado a éstas, López Obrador defendió otra vez su propuesta.

Frente a la versión de que se incrementarían los impuestos que pagan los trabajadores si aceptan la compactación, López Obrador aseguró que aún así la oferta beneficiaría a los trabajadores, sobre todo a quienes menos ganan, pues obtendrían un incremento hasta de 57 por ciento en su salario. Y en todo caso, aseguró, ya por las prestaciones se pagan impuestos.

Insistió en que el tema de las prestaciones de los sindicatos no sólo concierne al SUTGDF, sino al resto de los gremios del país, pues lo que se discute es el poder y el control de algunas de estas organizaciones.

Dijo: "Hay grandes sindicatos que se dedican a controlar y manipular a los trabajadores condicionando las prestaciones, así el mecanismo de premio-castigo que se utilizaba en el antiguo régimen no termina de irse".

Así, aseguró, la compactación propuesta por las autoridades capitalinas no sólo significa para el trabajador un aumento considerable en sus ingresos, sino la posibilidad de rescatar su libertad laboral, pues "nadie debe condicionar la entrega de las prestaciones para asumir un tutelaje corporativo".

Ejemplo de lo anterior es lo que sucedía con la compra de ropa y zapatos para los trabajadores del gobierno capitalino, muchos de los cuales no recibían esta prestación, pues había tráfico de estos productos, aseguró. Y en este caso estuvieron involucrados los diputados del PAN, que acudieron al gobierno para defender a las empresas que vendían estos productos al gobierno, aun cuando no cumplían con la calidad ni el precio.

"El problema lo resolvimos entregando mejor los vales al trabajador para que acudiera a cualquier centro comercial y comprara la ropa y los zapatos que quisiera, aun cuando esta decisión nos generó un gran escándalo", recordó.

Otro caso, explicó, es sobre el presupuesto que debe entregarse al sindicato para comprar los regalos del Día de las Madres. "El año pasado ellos compraron los regalos para la mitad de las trabajadoras y el gobierno la otra mitad, para no entregarles los recursos. Resultó, pues, que las vajillas compradas por las autoridades resultaron más baratas que las de ellos.

"Lo mejor sería que nadie comprara nada y que fueran las propias trabajadoras las que decidieran qué adquirir, para que no le mochen a sus prestaciones."