GUERRA CONTRA IRAK
Jefes tribales intentaron negociar la rendición
a cambio de impedir la entrada a kurdos y chiítas
Ingresan fuerzas invasoras a Tikrit, último
bastión de Hussein
La Biblioteca Nacional de Bagdad, saqueada e incendiada
Disparos cerca del hotel Palestina
AFP, REUTERS Y DPA
Tikrit, lunes 14 de abril. Las fuerzas estadunidenses
lanzaron una ofensiva masiva sobre Tikrit con cientos de tanques y ataques
aéreos, y lograron ingresar en las últimas horas de la noche
del domingo a la ciudad natal de Saddam Hussein y último centro
urbano que resistía a la ocupación.
Durante el domingo, los líderes de unas 20 tribus
de Tikrit intentaron detener los bombardeos para poder negociar una rendición
pacífica de los milicianos, según la prensa extranjera.
Los jefes habían ofrecido un cese del fuego bajo
condición de que los estadunidenses evitaran saqueos como los que
asolaron las otras ciudades del país, y que tampoco permitieran
la entrada de tropas kurdas o chiítas, según la cadena árabe
Al Jazeera.
Sin embargo, un vocero del Comando Central estadunidense
en Qatar dijo que "estamos involucrando todas las fuerzas que necesitemos"
en la lucha para controlar Tikrit, de donde son originarios la mayor parte
de los militares de elite que custodiaban a Hussein.
Los intensos bombardeos aéreos se reanudaron la
noche del domingo sobre los alrededores de Tikrit, al norte de Bagdad.
Los ataques iban dirigidos contra el sur y el oeste de la ciudad, que se
encontraba a oscuras, donde al parecer estaban desplegadas las últimas
fuerzas de la defensa iraquí.
Al Jazzera dijo que al comienzo de la madrugada del lunes,
hora local, sólo se escuchaban disparos aislados en la ciudad.
Un periodista canadiense que acompaña a los marines,
Matthew Fishcer, declaró a CNN que 250 vehículos blindados
ingresaron a la ciudad. Al menos 15 soldados de infantería iraquíes
murieron en combates, sostuvo a su vez otro periodista incrustado,
del diario canadiense National Post. Según este reportero,
en la ciudad podría haber unos 2 mil 500 combatientes dispuestos
a la lucha.
"Apoyo de la población"
El
general Vincent Brooks, del comando central, indicó que las tropas
lograron avances y recibieron el "apoyo" de la población, mientras
el capitán Frank Thorpo afirmó que en el camino a Tikrit
sólo se encuentran equipos y armamentos abandonados.
Los marines abrieron fuego en busca de francotiradores
que dispararon a las fuerzas en torno del hotel Palestina. Los efectivos
estadunidenses encendieron bengalas para iluminar el entorno del hotel.
Durante la escaramuza se vio a los infantes de Marina llevarse a un hombre,
pero el combate continuó por largo rato.
La jornada de domingo fue relativamente tranquila en la
capital, ya que los saqueos disminuyeron, aunque según periodistas
de Dpa fue debido a que queda poco por robar.
Sin embargo, la Biblioteca Nacional de Bagdad, donde se
hallaban documentos originales de gran valor como los archivos nacionales,
fue incendiada luego de ser saqueada. Esto sucede dos días después
de que también fuera saqueado el Museo Arqueológico de Bagdad,
sin que tampoco en esa ocasión intervinieran los estadunidenses.
El mayor estadunidense David Cooper, encargado de prensa
de los marines en Bagdad, aseguró no obstante que sus soldados
"detendrán los saqueos y a las personas que sorprendan en dichas
acciones", al anunciar que mañana comenzarán a patrullar
la ciudad en forma conjunta con policías iraquíes readmitidos
tras comprobar que pertenecían al sector tráfico o investigación
delictiva.
En la ciudad de Basora, al sur, la segunda de importancia,
las tropas británicas de ocupación ya comenzaron las primeras
patrullas conjuntas con iraquíes, después de días
de caos y saqueos.
Desde la entrada de las fuerzas estadunidenses a Bagdad,
el control policial desapareció e incluso los hospitales, que en
su mayoría permanecían hoy cerrados, fueron saqueados. Este
domingo, el ejército estadunidense detuvo a cuatro presuntos ladrones
que acababan de saquear un banco. Los soldados detuvieron a 25 hombres
en un puente sobre el río Tigris, los colocaron cuerpo a tierra
y se llevaron a cuatro, constató un fotógrafo de Afp.
En tanto, por primera vez desde la caída de la
ciudad, el miércoles pasado, exasperados por los saqueos y la inseguridad,
decenas de iraquíes se reunieron en la plaza donde se encuentra
el hotel Palestina para gritar consignas antiestadunidenses. "Vinimos de
todas las regiones de Irak para decir a los estadunidenses que fueron ellos
los que instalaron en el poder a Hussein y ahora nos va a imponer otro
gobernante que no queremos", explicó uno de los manifestantes.
En el norte del país los estadunidenses también
anunciaron el regreso de los policías a las calles de la ciudad
de Mosul, así como la creación de fuerzas de seguridad "interétnicas",
un día después de saqueos y enfrentamientos entre árabes
y kurdos. Numerosos árabes, sin embargo, se quejan de la no intervención
de las fuerzas estadunidenses ante presuntos abusos de los kurdos, minoría
oprimida bajo el régimen de Hussein que combate junto con los estadunidenses.
En la ciudad sagrada de Najaf, la fricción entre
las facciones chiítas musulmanas se encendió y hombres armados
rodeaban la casa del principal clérigo de ese grupo, que conforma
60 por ciento de la población de Irak. En Najaf, dos clérigos
chiítas fueron asesinados recientemente a hachazos en una mezquita.
Mientras, las tropas estadunidenses siguen buscando las
armas químicas y biológicas de destrucción masiva
que según Washington y Londres estaban en poder de Hussein, argumento
que utilzaron para justificar el ataque militar.
Los estadunidenses no han podido mostrar en 23 días
de incursión en el país rastros de ese presunto arsenal.
Este domingo los marines habían hablado
del hallazgo de 278 ojivas de artillería cargadas con un agente
químico, para luego aclarar que se trataba de cinco barriles con
una sustancia química que provoca "ampollas de agua en la piel".
Por lo pronto, Jaffar al Jaffar, científico nuclear
iraquí, decidió entregarse a las fuerzas estadunidenses,
según dijo en Washington un funcionario que habló bajo condición
de anonimato. Su entrega se suma a la del teniente general Amir Saadi,
jefe consejero de Hussein, ocurrida el sábado.
En tanto, el hermanastro de Hussein y ex ministro del
Interior, Watban Ibrahim Hassan, fue capturado cuando intentaba escapar
hacia Siria, sostuvo un responsable estadunidense, quien pidió no
ser identificado. La cadena de televisión kurda KTV había
anunciado esta noticia horas antes.
El general Franks mencionó a su vez que algunos
dirigentes iraquíes habían sido arrestados cuando intentaban
salir del país, pero no dio más detalles. Otro hermanastro
del líder iraquí, Barzan Al-Tikriti, murió el viernes
en un bombardeo contra su granja al oeste de Bagdad.
Hussein, "muerto o corre mucho"
El paradero de Hussein, sin embargo, sigue siendo un misterio.
"O está muerto o corre mucho", declaró Franks, tras haber
indicado que Washington poseía muestras de ADN del derrocado presidente.
Por otro lado, siete soldados estadunidenses, entre ellos
una mujer, fueron rescatados en Samara, al norte de Bagdad, en buen estado
de salud, y enviados a un hospital de la capital. Cinco habían sido
reportados desaparecidos el 23 de marzo, cuando su convoy se desvió
por equivocación y fue emboscado. Los siete fueron entregados por
guardias iraquíes después que sus jefes desertaron, de acuerdo
con el Washington Post; no obstante, Franks aseguró que pudieron
ser hallados gracias a un informante iraquí.