Realizó estudios retratísticos, entre otros, de Juan Rulfo y José Luis Cuevas
Murió la fotógrafa Daisy Ascher, quien hizo de la figura humana su ''entrañable obsesión''
MERRY MAC MASTERS
Conocida por sus estudios retratísticos de José Luis Cuevas y Juan Rulfo, la fotógrafa Daisy Ascher Oved falleció el pasado lunes a los 58 años, a causa de cáncer.
De ella escribió alguna vez Rulfo: ''Lo más notable en la obra fotográfica de Daisy Ascher, es su entrañable obsesión por la figura humana, lo que le ha permitido obtener una secuencia de imágenes que expresan por sí mismas, las diferentes actitudes y características del hombre.
''Entusiasta de su oficio. Educada en la práctica constante, esta eficacia responde a todas las alternativas del gesto, la actitud, y hasta la conciencia del ser y estar del hombre sobre la tierra. Para Daisy, dentro de los rostros que ella capta con su cámara, se encuentran los valores definitivos de la existencia", aseguró el autor de El llano en llamas.
Fernando Benítez escribió de sus ''incógnitas": ''Daisy enmascara y desenmascara. Daisy armada de su ojo mágico, penetra, baña de luz, cubre de sombras, resalta y desvanece, y nos deja una galería de fantasmas alucinantes".
Influencia de Carsh, Hankins y Avedon
Nacida en la ciudad de México el 25 de abril de 1944, Ascher estudió arte en las universidades Motolinia y Anáhuac. Cursó estudios especializados en el Club Fotográfico de México. De acuerdo con Rulfo, Daisy aceptaba haber recibido influencias de Carsh, Hankins y Avedon, entre los más importantes, todos ellos dedicados al retrato. Sin embargo, reconocía a otros muchos, ''sobre todo a quienes, con su cámara, han conseguido fijar el proceso histórico de la humanidad, tales como Atget, Stiglitz, Strand, Alvarez Bravo y Cartier-Bresson", llegó a decir Rulfo.
Destacan sus libros Revelando a José Luis Cuevas, proyecto que le llevó siete años, y Cien retratos, con textos de Rulfo, Benítez y Carlos Monsiváis.