ENTREVISTA /WOLE SOYINKA, PREMIO NOBEL DE LITERATURA 1986
La diversidad cultural vencerá a la globalización
EL NARRADOR INAUGURO ANOCHE LA CASA REFUGIO DE PUEBLA
De cara a la guerra de Estados Unidos contra Irak, el autor nigeriano expresa: ''lo único que podemos hacer los escritores es articular un punto de vista alternativo al imperante e influir en otras personas para que esa forma distinta de ver ofrezca una mejor perspectiva''
CESAR GÜEMES ENVIADO
Puebla, Pue., 1Ɔ de abril. Absolutamente puntual, como corresponde a un premio Nobel. De color blanco la ropa, la abundante barba, el ensortijado cabello. El acento claro y enfático de Morgan Freeman. El rostro de un cazador educado lo mismo en Nigeria que en Londres. Frente a Wole Soyinka, Nobel de Literatura en 1986, se irá enfriando solitario un caballito de tequila que el dramaturgo, poeta y novelista nigeriano beberá sólo después que concluya de hablar.
Está aquí para participar en la inauguración de la Casa Refugio de Puebla, que a partir de este lunes por la noche quedó abierta, bajo la dirección del escritor poblano Enrique de Jesús Pimentel. No hay forma de esquivar el bulto del tema central que ocupa a Soyinka y a los que como él dedican su tiempo a escribir el mundo. El autor de obras como The bacchae of Euripides y de Opera Wonyosi, abre fuego de inmediato y toma posición:
''Para mí, el actual es uno de los grandes desastres de nuestra época. Estados Unidos ha desafiado la autoridad de la Organización de las Naciones Unidas, lo cual es una de las más peligrosas manifestaciones de poder unilateral. Esto implica que la comunidad global empezará a perder confianza en la verdadera capacidad de la ONU. La mayor amenaza que hoy confrontamos es este mesianismo que padece lo mismo Osama Bin Laden o George W. Bush, y debo decir que en ese sentido Saddam Hussein no es mi personaje favorito.
''El caso es que todos tenemos que aceptar las mínimas normas de entendimiento entre las naciones. La conducta de Estados Unidos es un típico ejemplo de doble rasero: una ley para Irak y Medio Oriente, y otra ley para Estados Unidos y sus aliados o satélites. En mi opinión todo el mundo debe levantar la voz para restaurar el poder que algún día tuvo la ONU. Más que la fuerza, matizo, la autoridad política y moral del organismo."
Incapacidad de los políticos
-ƑCuál diría que es el alcance real de un escritor frente a un conflicto como el presente, tomando en cuenta que en usted además ha recaído el premio Nobel?
-Varía el papel, depende de la situación, del conflicto y de la responsabilidad de los países que están inmersos en el problema. Los políticos profesionales no son capaces de cambiar el curso de los acontecimientos. Uno de los casos más significativos es el de Jacques Chirac: no consiguió, con toda su influencia y el respaldo de su país, evitar que Estados Unidos diera principio a la guerra contra Irak. Sin embargo, respondo de manera directa a su pregunta con esta afirmación: lo único que podemos hacer los escritores es articular un punto de vista alternativo al imperante e influir en otras personas para que esa forma distinta de ver ofrezca una mejor perspectiva.
Soyinka considera que esta manera de observar el trabajo del intelectual está relacionada con la diversidad cultural entre las naciones. Explica: ''La cultura es diversa por naturaleza, ningún tipo de globalización ha de destruir el pluralismo y la variedad cultural. Si un nigeriano, un mexicano y un español vamos a tomar una taza de café a un sitio propiedad de una franquicia, lo importante es que seguimos perteneciendo a nuestra nacionalidad originaria".
Bush, el Ubu rey estadunidense
-Usted y otros escritores han realizado viajes para encarar a la realidad concreta. ƑQué balance hace de esa actividad?
-Hace un tiempo algunos compañeros de profesión y yo estuvimos en Palestina para apoyar la causa de una cierto escritor y para ver de primera mano lo que estaba pasando, lo cual de hecho ya sabíamos. Eso nos permitió ser capaces de decir al mundo nuestra opinión sobre lo que pasaba en Medio Oriente. Lo que vimos fue una gran aflicción en Palestina, declaramos abiertamente lo observado que desde luego estaba sustentado estrictamente en los hechos. Desde entonces hemos seguido la situación y parece ser que hoy todo está peor. Cuando fuimos, nos tocó presenciar una gran reunión de poetas y músicos, pero poco después de ese momento los is-raelíes acabaron con el sitio. Así que es muy sencillo imaginar lo que le ocurre a las personas que trabajan en cualquier otro asunto: seguro no están mejor.
La aparente desventaja cultural de países con índices de pobreza tan altos como los de Africa, en realidad puede salvarse, explica el Nobel nigeriano:
''He visitado muchos países europeos, lo mismo que distintos puntos de Estados Unidos, y es sorprendente darse cuenta de la cantidad de analfabetismo que existe en esos lugares. A cambio, Africa tiene la ventaja de que la tradición oral es muy poderosa. Las transmisiones por la radio colaboran en gran medida a fortalecer esa tradición. Poetas y escritores se conocen por medio de la radio. Muchas de las obras de creadores contemporáneos se difunden en este medio. Sólo por dar un ejemplo de qué tan poderoso puede ser la radio para Africa en nuestros días, recuerdo que cuando fuimos amenazados por una de las dictaduras más bestiales que padecimos en Nigeria, el arma más fuerte para hacerle frente al régimen era la radio.
''Respecto de la gran cantidad de lenguajes que se practican en un país como Nigeria, puedo decir que se hablan 300 de ellos. La lengua común para esos tres centenares de formas de nombrar las cosas es la lengua colonial, como ocurre con los países de Hispanoamérica: su lengua colonial es el castellano y de modo particular pueden comunicarse según su lenguaje histórico.
''En Africa lo que ocurre con este fenómeno es que usamos la lengua colonial para cruzar de un idioma tradicional a otro. Hace pocos días traduje una novela escrita originalmente en idioma yoruba, la vertí al inglés para que fuera mucho más accesible."
A propósito de las formas para salvar la distancia entre un idioma y otro, Soyinka ejemplifica: ''He realizado una adaptación de Ubu rey, de Alfred Jarry. Modifiqué al personaje principal de modo que se pareciera a un dictador del pasado en Nigeria. Si presentase Ubu Rey en Estados Unidos, el personaje sería Bush".
Rushdie no debe bajar la guardia
-Desde que obtuvo el Nobel de literatura su vida ha cambiado radicalmente. ƑQué espacio dedica para escribir?
-Escribo a diario. De hecho esta mañana escribí un par de horas antes de que Christian Salmon llegara a interrumpirme. Lo digo en broma, claro, porque lo real es que mi jefe es mi laptop. Sin ella estoy completamente perdido. Durante los años de exilio, los viajes, las conferencias y las presentaciones, es cierto que me he visto en la necesidad de cambiar mi ritmo de trabajo, pero no ha variado la intensidad. De modo que si yo pudiera crearía un premio especial para el que inventó las laptop.
-No se referirá a Bill Gates, desde luego.
-Claro que no -responde enfático, a punto de la carcajada-, me refiero a la persona que dio paso a la tecnología original. Después de todo, Gates sólo creó Microsoft.
El racismo, una de las líneas de trabajo en la obra de Soyinka, continúa como uno de los problemas más severos ante los cuales es preciso generar una respuesta. Expresa el escritor: ''En términos de gobierno, hay una gran alerta en cuanto a la necesidad de acabar con el racismo. Por ejemplo, en Inglaterra se ha creado una comisión para revisar las quejas que lleguen al respecto. El caso es que pese a este tipo de esfuerzos, que desde luego son loables, los cambios ocurren de manera muy lenta. Ahora por fortuna ya hay más naciones comprometidas para unirse en contra del racismo. Aunque suene un tanto fuera de época, pero el cambio para que el racismo deje de existir ha de darse en el corazón de los seres humanos. Y al decirlo estoy consciente de que es el sitio más complicado en donde podemos actuar".
Ya que está en México para inaugurar la noche de este martes la Casa Refugio de Puebla, es indispensable que haga un apunte sobre uno de los escritores más injustamente perseguidos en la actualidad, Salman Rushdie. El creador nigeriano responde con su perfecto inglés:
-Aunque la amenaza ha disminuido, espero que Salman no baje la guardia. Nadie debe hacerlo en su caso.