Lamenta Comité Asesor Sindical que no aplique normas para multinacionales
Fracasó en México el modelo neoliberal: TUAC
CAROLINA GOMEZ MENA
El Comité Asesor Sindical (TUAC, por sus siglas en inglés) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) debe emprender acciones para ejercer más influencia entre los 33 países que han suscrito las directrices para empresas multinacionales y crear instancias globales para regular su desempeño, aseveró Roy Jones, consejero mayor del TUAC.
Explicó que el propósito es lograr una difusión efectiva del propio comité, que promueve "la buena conducta empresarial en materia de empleo, relaciones laborales, competencia, protección al consumidor, medio ambiente, fiscalización y lucha contra la corrupción".
Durante el seminario internacional Directrices de la OCDE para empresas multinacionales, Roy Jones lamentó que aunque México es una de las naciones que las signaron, poco ha hecho para que las multinacionales asentadas en su territorio acaten las recomendaciones, y resaltó que también se requiere más apoyo de los sindicatos.
Consideró que en el país no hay indicios claros de que se inste a las multinacionales a ser responsables con los trabajadores y las comunidades en las que se establecen. Aseveró que no se trata sólo de traer capital extranjero a un país, sino de ser corresponsable con el desarrollo de éste, y una forma de serlo es generando mejores niveles de empleo.
Dijo que debe ponerse especial atención en el impacto económico y social de la globalización no regulada, y criticó la situación que experimenta el país: "México ha sido uno de los experimentos del neoliberalismo. Pero basta estar en este país cinco minutos para darse cuenta de que no es un modelo, es un fracaso".
Debido a que ningún representante gubernamental asistió al seminario, manifestó: "es irónico que el gobierno de México, nuestro punto nacional de contacto, esté ausente hoy, pero de todos modos este seminario puede llevar un mensaje fuerte: si no desea el gobierno de México tomar en serio las directrices, nosotros, como movimiento internacional, sí lo estamos tomando en serio y vamos a discutir cómo podemos ejercer presión en las multinacionales. Si logramos esto, nuestro trabajo habrá valido la pena".
María Xelhuantzi, representante de la Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios (Fesebes), expuso que se deben tomar medidas para que la aplicación de las directrices "no dependa de voluntades políticas efímeras o de coyunturas excepcionales", y llamó a crear las "estructuras y mecanismos" que garanticen y obliguen a la aplicación real de los lineamientos que fueron diseñados en 1976 y reformados en 2000, ante el avance de la globalización, tendencia que se ha "convertido en un proceso plagado de ilegalidad".