En Alemania, la más grande feria informática del orbe
El consumo de cibercultura es un fenómeno cada vez más común
ALIA LIRA HARTMANN CORRESPONSAL
Hannover. La feria de informática más grande del mundo, la Cebit, con más de 6 mil 500 expositores, presenta cada año los avances más relevantes de la cibercultura. Los más complejos equipos de hace sólo un par de años comienzan a ser parte de la prehistoria informática y ahora se reporta que al ciudadano común le ''duele cada vez menos el codo'' cuando se trata de destinar parte de su salario para adquirir lo más reciente en computadoras personales, celulares, cámaras digitales, agendas electrónicas, etcétera.
Por otro lado, modernos y coloridos diseños sustituyen a los oscuros colores en las computadoras personales. Los celulares son convertidos en aparatos multimedia o en accesorios personales. Cámaras digitales ya se encuentran integradas a los modelos más avanzados y a un precio relativamente accesible, unos 200 dólares. Las principales compañías compiten por lanzar al mercado modelos cada vez más atractivos.
Ante el saturamiento de los portales eróticos en Internet, los proveedores se quejan del ''dramático descenso" en las ganancias. Convertidos en víctimas, dicen estar dispuestos a salir del espacio privado en casita o en muchos casos semi-privado en la oficina para conquistar la calle bajo el concepto de ''sexo móvil".
La ''sagrada fuerza del entretenimiento" hoy parece ser la que genera las mayores ganancias. Los juegos electrónicos invaden gran parte de los hogares y no necesariamente están ligados a un público infantil. Se discute que en estos tiempos de inseguridad, de guerra, de crisis económicas, el consumidor huye a su mundo privado, de tal manera que un alemán, por ejemplo, llega a gastar más en la compra de estos juegos que en ir al cine.
La cibercultura no deja de sorprender con aparatos que antes parecían propios de la ciencia ficción.