VIENTOS DE GUERRA
Cree 53% de estadunidenses que se debería
dar más tiempo para el desarme de Irak
En preparación, el discurso de Bush para anunciar
el inicio de la guerra
Llegó la hora de demostrar si los compromisos
con la libertad son ciertos o sólo palabras, fustiga
"Se explorarán todas las posibilidades" en la
cumbre de hoy en las islas Azores: Condoleezza Rice
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington y Nueva York, 15 de marzo. En medio
de protestas masivas en Es-tados Unidos y en el resto del mun-do contra
su política bélica, los asesores de la Casa Blanca ya están
redactando el discurso para que el presidente George W. Bush anuncie el
comienzo de la guerra contra Irak.
Estas parecen ser las últimas horas de la diplomacia
antes de la agresión. Bush señaló hoy que "hay pocas
razones para esperar que Saddam Hussein se desarme", y con ello indica
que el régimen de Bagdad no podrá evitar un ataque estadunidense.
Una vez más el mandatario retó hoy en su
mensaje semanal por radio a que "los gobiernos de-muestren ahora si sus
declarados compromisos con la libertad y la seguridad son sólo palabras
o convicciones sobre las cuales están preparados para actuar".
Pero las indicaciones extraoficiales, tanto en Nueva York
como en la capital, apuntan a que Estados Unidos ya tiene su respuesta
y está por retirar del Consejo de Seguridad de la Organización
de Naciones Unidas (ONU) la resolución autorizando la guerra.
La cumbre de emergencia que realizarán este domingo
los go-bernantes de Estados Unidos, Gran Bretaña (Tony Blair) y
Es-paña (José María Aznar) en las islas Azores, fue
caracterizada por la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Condoleezza
Rice, como "un último empuje para ver si podemos convencer a la
gente de asumir sus responsabilidades", y como un último intento
para la vía diplomática.
Sin embargo, Rice también indico que en la cumbre
se "explorarán todas las posibilidades", lo que se interpretó
como que se hablará de lanzar la guerra sin contar con el aval de
la ONU.
Cuenta regresiva
Algunos
observadores creen que los tres países podrían ofrecer una
ultima propuesta para una resolución ante el Consejo de Seguridad
de la ONU bajo la amenaza de que si ésta no es aceptada, será
el gatillo de la agresión, para así intentar trasladar la
responsabilidad del fracaso de la vía diplomática a los países
que se han opuesto a la guerra y a las llamadas naciones miembros "indecisas".
Tal vez para defenderse ante tal táctica los gobiernos
de Francia, Alemania y Rusia emitieron hoy un comunicado conjunto en el
que reafirman su posición de que no existe justificación
alguna para una guerra contra Irak, y demandaron una sesión a nivel
ministerial en el Consejo de Seguridad para este próximo martes.
Los tres proponen que los cancilleres de los 15 países
miembros del Consejo de Seguridad discutan un "plazo realista" para el
de-sarme de Saddam Hussein después de escuchar el informe más
reciente de los jefes de inspectores de armas de la ONU en Irak.
"Reafirmamos que nada justifica en las circunstancias
actuales detener al proceso de inspección y recurrir al uso de la
fuerza", declararon en su comunicado.
En Nueva York, fuentes diplomáticas en la ONU han
sugerido que las posibilidades para alcanzar un nuevo acuerdo sobre una
resolución son mínimas, aunque no han descartado una sorpresa
de último momento.
"Esto no está acabado hasta que se acabe", comentó
el secretario general, Kofi Annan.
Pero este sábado no habían reuniones en
las salas y pasillos del edificio de Naciones Unidas, ni dentro de la sede
de su Consejo de Seguridad.
El jefe de los inspectores de armamentos, Hans Blix, llegó
a sus oficinas y comentó que "espero que podremos continuar trabajando"
en Irak. Pero otros aquí creen que éstas sean las últimas
horas de la "diplomacia".
Fuentes del gobierno de Estados Unidos indicaron a la
agencia Ap que si no hay un compromiso y la resolución es retirada
de la ONU, Washington hará un giro hacia la guerra casi de inmediato.
Asesores de la Casa Blanca que están ya redactando
un discurso anunciando la guerra dicen que éste podría ser
pronunciado por Bush tan pronto como el próximo lunes, y que serviría
para establecer un ultimátum final para Saddam Hussein antes de
un ataque militar demoledor.
Bush cuenta con apoyo público en el corto plazo
para lanzar una guerra sin el endoso de la ONU, según las últimas
encuestas.
Pero un sondeo difundido hoy por el semanario Newsweek
en-contró que una mayoría, 53 por ciento, cree que Estados
Unidos debería ofrecer más tiempo para lograr el desarme
de Irak antes de emplear la fuerza.
Sin embargo, un porcentaje casi igual dice que apoyarían
la acción militar de Estados Unidos y uno o dos de sus aliados,
aun sin el apo-yo de la ONU.
Otra encuesta difundida hoy, realizada para la Fundación
de los Veteranos de la Guerra de Vietnam, señala que 47 por ciento
de los estadunidenses apoya la acción militar para remover al presidente
iraquí, Saddam Hussein, aun sin el apoyo de la ONU.
Además, 37 por ciento opina que la guerra debe
ser llevada a cabo sólo con el apoyo pleno de la ONU, mientras que
13 por ciento se opone a toda opción bélica.
Pero los encuestadores señalaron que esto podría
cambiar rápidamente y el apoyo se podría desplomar si la
guerra se alarga de-masiado y sus costos se elevan, o fracasa en sus fines.
Pero tal vez lo más sorprendente de esta última
encuesta es que por un margen de dos a uno los estadunidenses rechazan
la "doctrina" de Bush en favor de los ataques preventivos.
Según el muestreo, los estadunidenses están
por mantener el principio de no atacar a otras naciones a menos de que
el país sea agredido, y así todo el esfuerzo masivo de la
Casa Blanca para promover la "acción preventiva" no parece haber
convencido a muchos.
La Casa Blanca no sólo carece de consenso en su
favor al interior de la ONU, sino tampoco entre su propio pueblo.