VIENTOS DE GUERRA
Saddam, menos peligroso que en 1991, señala
Bush padre
Esta sería una guerra sin precedente en la historia
de la civilización: Carter
REUTERS Y AFP
Nueva York, 9 de marzo. El ex presidente de Estados
Unidos y premio Nobel de la Paz Jimmy Carter condenó este domingo
los preparativos para un ataque unilateral de Estados Unidos contra Irak,
al afirmar que sería una guerra injusta "casi sin precedente en
la historia de las naciones civilizadas".
En un artículo publicado en el periódico
The New York Times Carter señaló que cambios profundos
en la política exterior de Estados Unidos han dado un giro "a los
compromisos bipartidistas consistentes que por más de dos siglos
hicieron grande al país".
Durante años, la política estadunidense
estuvo "dictada por principios religiosos básicos, respecto del
derecho internacional y alianzas que resultaron en decisiones sabias y
moderación mutua", escribió el ex mandatario. "Nuestra aparente
determinación de emprender una guerra contra Irak, sin apoyo internacional,
es una violación de esas premisas", añadió.
"Con
nuestra propia seguridad nacional amenazada y pese a la abrumadora oposición
de la mayoría de los pueblos y gobiernos del mundo, Estados Unidos
parece determinado a emprender una acción militar y diplomática
casi sin precedentes en la historia de las naciones civilizadas", señaló
en su crítica.
"La guerra sólo puede ser librada como último
recurso, tras agotarse todas las opciones no violentas", señaló
Carter. "En el caso de Irak, es obvio que existen claras alternativas a
la guerra".
Carter, quien ganó el Nobel de la Paz el año
pasado, subrayó que Irak no amenaza directamente la seguridad de
Estados Unidos y calificó de poco convincentes los esfuerzos de
George W. Bush de relacionar a Irak con los ataques del 11 de septiembre
de 2001.
En este sentido el senador demócrata Carl Levin
indicó que atacar a Irak sin el respaldo de la Organización
de Naciones Unidas (ONU) va a alimentar el terrorismo contra Estados Unidos.
"No necesitamos el permiso de nadie para atacar a Irak", afirmó
Levin, quien integra la comisión de Servicios Armados en el Senado,
a la cadena CNN.
Sin embargo, aclaró que Washington no puede "proceder
sin la autoridad de la ONU cuando ha invocado las resoluciones del organismo
como la base para un ataque".
Según Levin, Irak no supone una amenaza inminente
contra Estados Unidos, "pero los riesgos de atacar a Irak sin respaldo
de la ONU son enormes. Estaremos aislados en el mundo. Una probable respuesta
terrorista sería alimentada si procedemos de manera unilateral",
recalcó.
Por su parte, el ex presidente estadunidense George Bush
admitió que está preocupado porque "su hijo (se encuentra)
en una marcha difícil y solitaria", en relación con la crisis
iraquí. "La decisión final de emprender una guerra no puede
ser tomada por una comisión o por un general. Debe ser tomada por
una sola persona, el presidente", afirmó el ex jefe de Estado (1989-1993)
en la edición del semanario Time que aparecerá hoy
lunes.
"Es mi trabajo estar preocupado", agregó Bush,
de 79 años, a propósito de su hijo. "Es la decisión
más difícil que un presidente tiene que tomar: enviar a los
hijos e hijas de estadunidenses al campo de batalla", subrayó. Bush
padre estimó que Saddam Hussein es mucho menos poderoso que antes
de 1991. "En esa época, (el presidente iraquí) pensaría
que los estadunidenses no podían combatir. Ahora sabe que sí".
Mientras, el periódico The New York Times tomó
posición en un editorial publicado este domingo contra una intervención
militar estadunidense en Irak y estimó que el objetivo de ese eventual
conflicto es "vago y fundado en premisas discutibles.
"Pensamos que hay una mejor opción, que supone
reforzar las inspecciones en el largo plazo", decía un editorial
titulado Decir no a la guerra en el diario neoyorquino. "Si se pregunta:
es necesaria o no una invasión (de Irak) sin un amplio apoyo internacional,
nuestra respuesta es no", agregó el editorial.
El diario señala que Bush modificó "varias
veces" sus argumentos para justificar una invasión a Irak, invocando
una vez la necesidad de desarmar a Bagdad, otra la de derrocar al régimen
dictatorial y luego la de prevenir el terrorismo o instaurar la democracia
en Medio Oriente. "Cuando el objetivo es vago y está fundado en
premisas discutibles, es momento de detenerse y buscar otros medios menos
extremos de alcanzar las metas", concluye el diario.
Por su parte, sin rectificar completamente su apoyo a
la administración Bush, The Washington Post estimó,
también en un editorial, que el presidente estadunidense aún
debería apostar por la opción diplomática para lograr
el mayor apoyo a su posición.