Deberán derogar hasta $600 millones por impuesto sustitutivo de crédito al salario

ANUIES: repercutirá nuevo gravamen en finanzas de universidades públicas

KARINA AVILES

El impuesto sustitutivo de crédito al salario repercutirá de forma negativa en las universidades públicas del país, reveló el secretario general ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Jorge Luis Ibarra Mendívil. El nuevo gravamen representará para el sistema una erogación de entre 500 y 600 millones de pesos, cifra equivalente a la cuarta parte del presupuesto de la Universidad Autónoma Metropolitana.

En entrevista, indicó también que desde hace una década no se abren plazas administrativas en las universidades y que el subsidio a las instituciones públicas de educación superior tiene un crecimiento "lento e inclusive irregular". En relación con el financiamiento, apremió a una política sostenida que no permita "retrocesos".

Además, expresó que las instituciones educativas de este nivel desconocen cómo serán distribuidos los mil millones de pesos aprobados para este año por la Cámara de Diputados y, en consecuencia, están a la espera de que se les informe para saber a qué programas se destinarán.

Tampoco saben si cada año contarán con los fondos que se destinan al mejoramiento de la calidad, porque entran como aportaciones extraordinarias.

Los planes de expansión, crecimiento, mejoramiento y aseguramiento de la calidad ''no se ven completamente satisfechos'' con los montos actuales de financiamiento. Y si se quieren cumplir las metas de tener un crecimiento en la matrícula de más de 800 mil estudiantes y para final de sexenio un gasto federal en educación superior de 1 por ciento del producto interno bruto, el aumento presupuestal ''deberá ser muy fuerte en los próximos tres años''.

Sin embargo, el entorno económico y la situación de las finanzas públicas "no permiten prever que pueda alcanzarse esta meta". Precisó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) incluye en el gasto a la educación superior el correspondiente a la investigación científica.

Pero la ANUIES considera que la forma en que debe calcularse el incremento del presupuesto entre universidades públicas ''es sin considerar el gasto en investigación científica, dado que en los propios documentos oficiales y los lineamientos en el programa de educación se pide que esté separado el gasto educativo del gasto en investigación''. Pese a esta explicación, opinó que "no es que sean falsos los datos" proporcionados por la SEP.

Incertidumbre por fondos extraodinarios

Ibarra Mendívil destacó varios de los problemas que enfrenta la educación superior. Por un lado, los planteles existentes no son suficientes para absorber la demanda creciente de alumnos, lo cual significa que se tendrán que crear nuevas instituciones, otras podrán crecer en una proporción menor y unas más llegarán a un límite de crecimiento.

Por otra parte, dijo que hay recursos adicionales mediante fondos extraordinarios "que están supeditados a programas de mejoramiento y aseguramiento de calidad". Pero en las instituciones de educación superior existe la preocupación "de que hay ciertos rubros en el gasto educativo universitario que no están cubiertos".

Por ejemplo, se ha requerido formar gente capacitada en sistemas de educación a distancia, así como fortalecer centros de cómputo, establecer redes y extender las oportunidades de acceso a la información. "Eso ha requerido personal capacitado que no está reconocido por la SEP ni por Hacienda".

Pero una de las grandes preocupaciones en el sistema universitario es el de la carga impositiva que significa el impuesto sustitutivo de crédito al salario, que el año pasado fue de 3 por ciento y para el actual de 4 por ciento. El nuevo gravamen significará un "impacto enorme en las finanzas universitarias", que puede significar entre 500 y 600 millones de pesos en el sistema público del país.

Ese monto es equivalente a la cuarta parte del presupuesto de la Universidad Autónoma Metropolitana o de una universidad mediana. ''šEsas sí son preocupaciones!", manifestó.