"Nefasta", una intervención militar sin
el aval de la ONU: Silvio Berlusconi
Compara Blair el "peligro" iraquí con la amenaza
que representó Hitler en los 30
Setenta por ciento de los franceses desea que su país
recurra al veto para detener la guerra
DPA, AFP Y REUTERS
Nueva York, 28 de febrero. El primer ministro de
Gran Bretaña, Tony Blair, comparó este viernes el presunto
"peligro" que supone Irak con la amenaza que el régimen nazi de
Alemania representó para Europa, y advirtió a la comunidad
internacional que debe enfrentarse a la advertencia que implican las armas
de destrucción masiva iraquíes y el terrorismo internacional
si no quiere ver-se inmersa en una "pesadilla real".
Ante miembros de su Partido Laborista, Blair señaló
hoy, en la ciudad galesa de Swansea, que nadie debe esperar que él
sea un "segundo Chamberlain".
Al primer ministro conservador de entreguerras Neville
Chamberlain se le ha reprochado su política de "pacificación"
hacia Adolfo Hitler, por el acuerdo de Munich que firmó en 1938
con el líder nazi.
"De eso aprendimos que no debemos de-jarnos asustar ante
una amenaza", afirmó Blair, quien agregó que teme una "pesadilla
terrorista" en caso de que no actúe contra el presidente iraquí
Saddam Hussein.
Sin embargo, su miedo no se basa en la posibilidad de
que Hussein "ataque una ciudad británica", sino más bien
en que "los terroristas puedan provocar una catástrofe internacional,
en caso de que caigan en sus manos armas de destrucción masiva".
Blair acusó además a Al Qaeda, del líder
fundamentalista islámico Osama Bin Laden, de intentar fabricar una
bomba nu-clear "sucia". Aunque el núcleo de esa red en Afganistán
haya sido destruido, sus "células siguen intactas en todas las grandes
naciones, en toda Europa", señaló.
Blair hizo esas declaraciones a su regreso de Madrid,
donde se reunió con el presidente del gobierno español, José
María Aznar, para analizar la crisis iraquí.
En este sentido, en la capital española Blair,
al referirse a la oferta iraquí de destruir sus misiles Al Samoud,
afirmó que "éste no es momento de jugar", mientras que Aznar
la calificó de juego cruel.
"Este no es el momento de jugar. El (Hussein) sabe perfectamente
lo que debe ha-cer", dijo Blair en rueda de prensa tras un encuentro en
La Moncloa con Aznar.
El presidente del gobierno español añadió
que el presidente iraquí está jugando "un partido cruel con
los deseos de paz de tantos millones de personas".
Andanada contra Rumsfeld
Por
su parte, la ministra de Exteriores española, Ana Palacio, acusó
hoy a algunos al-tos funcionarios estadunidenses de profundizar las divisiones
europeas en la cuestión iraquí, en declaraciones a la BBC.
Algunos halcones en el seno de la administración
del presidente George W. Bush han dicho cosas que "no nos han ayudado en
Europa y han provocado un poco de resentimiento", afirmó Palacio.
El secretario de Defensa estadunidense, Donald Rumsfeld,
ha ridiculizado el campo antiestadunidense encabezado por Francia y Alemania,
y ha comparado a este último país con Libia y Cuba.
Aznar también criticó los comentarios de
Rumsfeld, y en una entrevista, el jueves anterior, con el diario The
Wall Street Journal, indicó que los ministros de Defensa deberían
"hablar menos".
En respuesta, Rumsfeld señaló que "no es
una mala idea", durante una conferencia de prensa en Washington. "¿Va
a seguir el consejo?", le repreguntó el reportero. "Ah, Dios mío,
el presidente no me dijo nada", señaló antes de cambiar de
tema.
Mientras, el ministro de Asuntos Exteriores de Francia,
Dominique de Villepin, afirmó que la promesa de Bagdad de iniciar
la destrucción de sus misiles Al Samoud es un importante
paso en el desarme de Irak y demuestra que las inspecciones están
produciendo resultados.
Asimismo, De Villepin calificó de prematura una
segunda resolución sobre Irak y señaló que la mayoría
del Consejo de Seguridad se opone a la iniciativa de Estados Unidos, Gran
Bretaña y España.
Esto ocurrió en momentos en que un sondeo de la
investigadora CSA señaló que 70 por ciento de los franceses
desea que su país recurra a su derecho a veto contra la resolución
estadunidense que autorice a la guerra contra Irak.
Asimismo, durante la víspera el gobierno ruso habló
también de vetar el documento en el Consejo de Seguridad.
En el mismo sentido, el ministro de Exteriores de Alemania,
Joschka Fischer, aseguró que el desarme del régimen iraquí
va progresando y que éste no es el momento de detener el proceso.
"Lo que queremos es el desarme de Irak y hoy hemos dado
un paso importante; no comprendo por qué debemos detenerlo ahora
y emplear el último recurso, justo cuando se producen resultados
concretos", agregó Fischer.
De su lado, el enfriamiento en las relaciones entre Washington
y Berlín fue confirmado hoy por el embajador estadunidense en Alemania,
Daniel Coats, quien aseguró que el presidente Bush y el canciller
federal alemán, Gerhard Schroeder, no se hablan "porque no tienen
nada que decirse".
Agregó que cuando Bush visitó Alemania,
en mayo del año pasado, quedó convencido de que Berlín
compartía su postura en torno a Irak, por lo que después
lo sorprendió la actitud del gobierno alemán.
Por su parte, sería "nefasta" una intervención
militar contra Irak sin el aval de la Organización de Naciones Unidas
(ONU), afirmó este viernes en Roma el primer ministro italiano,
Silvio Berlusconi.
Italia apoya a Estados Unidos en su política contra
Irak y aunque no se ha pronunciado explícitamente sobre la nueva
resolución, siempre ha manifestado que se necesita una de la ONU
en caso de que Hussein se niegue a destruir sus armas prohibidas.