Fustiga al secretario general de la OEA por
criticar el arresto de dirigente del paro
Exige Chávez a España, Colombia y EU
respetar la soberanía de Venezuela
Advierte a concesionarios de televisoras que cerrará
medios que incumplan la Constitución
AFP, REUTERS Y DPA
Caracas, 23 de febrero. El presidente Hugo Chávez
pidió este domingo a los gobiernos de Estados Unidos, España
y Colombia que no intervengan en los asuntos internos de Venezuela y respeten
su soberanía; además fustigó al secretario general
de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria,
por sus comentarios sobre el arresto de uno de los dirigentes del paro
de 63 días.
Por otro lado, un policía muerto y siete agentes
de la Policía Metropolitana (PM) de Caracas heridos dejó
esta madrugada una balacera en la que participaron supuestos simpatizantes
del gobierno, en las inmediaciones de la sede central de Petróleos
de Venezuela (PDVSA), según informó el alcalde mayor de la
capital, el opositor Alfredo Peña.
Sin embargo, Danni Azuaje, director policial del Ministerio
del Interior, desmintió la versión y acusó al alcalde
mayor de hacer "especulaciones sobre el caso".
En
el cierre de su programa Aló, Presidente, Chávez fustigó
las críticas hechas en el exterior -Estados Unidos y España-
por la detención del líder empresarial Carlos Fernández,
uno de los principales líderes del paro opositor levantado a principios
de este mes, y quien desde este domingo cumple arresto domiciliario.
"Que en la oposición venezolana comiencen a decir
cosas... pero qué vengan funcionarios de otros gobiernos a hablar
contra nuestro país", cuestionó.
Se refirió específicamente al presidente
del gobierno español, José María Aznar, y a los mandatarios
de Estados Unidos, George W. Bush, y de Colombia, Alvaro Uribe, a quienes
pidió un "poquito más de cuidado" con las declaraciones de
algunos de sus funcionarios, y reiteró la soberanía venezolana
sobre las decisiones en su territorio.
"Yo no voy a permitir a un funcionario de mi gobierno
que convoque una rueda de prensa para empezar a decir cualquier pistolada
de cosas que ocurran en Estados Unidos, o que ocurran allá en Madrid,
en España, o en Colombia", dijo.
""No se metan en nuestras cosas, que nosotros no nos metemos
en las suyas. ¿Hay que recordar que aquí estuvo el embajador
español aplaudiendo el golpe de abril?", agregó Chávez,
en referencia a la efímera asonada que en abril de 2002 lo alejó
por 47 horas del poder.
También acusó a ministros y miembros del
gobierno del ex presidente colombiano Andrés Pastrana de "festejar"
el golpe de Estado. "Por algo es que tienen ahí asilado a Pedro
Carmona", dijo, en alusión al apoyo otorgado por Pastrana al ex
gobernante de facto y ex presidente de la cúpula empresarial
Fedecámaras, que ahora preside el detenido Fernández.
Chávez también se dirigió al secretario
general de la OEA, el colombiano César Gaviria, quien pidió
respetar los derechos civiles de Carlos Fernández e imparcialidad
en su proceso.
"Doctor Gaviria, este es un país soberano; usted
fue presidente de un país, póngase en su sitio, aquí
no hay privilegios en este país, de ningún tipo", señaló.
El líder empresarial, acusado de rebelión
civil e instigación a delinquir, cumple arresto domiciliario ordenado
por la jueza Gisela Hernández, quien negó la libertad condicional,
considerando que existe el "peligro de que huya del país".
La jueza descartó otras tres acusaciones lanzadas
por la fiscalía contra el jefe empresarial: traición a la
patria, agavillamiento y devastación.
Chávez expresó disconformidad con el arresto
domiciliario impuesto a Fernández, pues "si fuera por mí,
déjenme decirles que no estaría en su casa, estaría
tras la rejas", aunque señaló que esa decisión será
acatada.
Por otro lado, advirtió a los propietarios de las
televisoras privadas opositoras: "O reconocen la Constitución y
las leyes respectivas, o sencillamente no pueden seguir siendo concesionarios.
A mí no me importa que me llamen dictador, a mí no me importa
nada, así que váyanse a cualquier corte (de justicia)".
Chávez endureció el tono tras sobrevivir
al paro -en el que tomó parte activa la prensa y la televisión
del país-, que buscó sacarlo del poder y colapsó a
la vital industria petrolera.
Sobre la situación en PDVSA, el presidente de la
gigante estatal, Alí Rodríguez, expresó que la producción
de crudo superó los 2 millones 26 mil barriles diarios, e informó
que unos 12 mil de casi 38 mil empleados de la petrolera serán despedidos
por haber paralizado el trabajo en la empresa.