Serias dificultades para atender a la industria, reconoce Muñoz Leos ante legisladores

Pemex no podrá satisfacer la demanda de gas natural este año

La paraestatal ''se ve en la necesidad de reducir'' 10% la disponibilidad del energético para la CFE, anuncia Los CSM violan la Constitución, las leyes y los reglamentos, replica Bartlett

ROBERTO GONZALEZ AMADOR, ROBERTO GARDUÑO Y CIRO PEREZ SILVA

Petróleos Mexicanos (Pemex) admitió este martes que no podrá satisfacer durante este año la demanda de gas natural que requiere la industria nacional, incluidos la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y el propio sector petrolero.

''Particularmente en los primeros nueve meses de 2003 enfrentaremos serias dificultades para atender los niveles de consumo de gas natural que se vienen registrando'', afirmó ante diputados y senadores Raúl Muñoz Leos, director general de Pemex.

El funcionario, quien empleó el argumento de que la paraestatal ya no puede atender la demanda de gas para sostener la tesis de que es necesario permitir la inversión privada en este campo, afirmó que ''a pesar del gran esfuerzo que ha realizado la empresa en los últimos meses, los desequilibrios entre la producción y el consumo de gas ya han llegado a niveles críticos. Lo que era pronóstico ahora es realidad. El futuro se nos adelantó''.

Contumacia del director de Pemex, acusa Bartlett

En respuesta a la insistencia del funcionario para que el Congreso apruebe el esquema de contratos de servicios múltiples (CSM), que permitirían la inversión privada en la explotación de cuencas productoras de gas, el senador priísta Manuel Bartlett Díaz aseguró que ese mecanismo planteado por el Ejecutivo ''viola la Constitución, las leyes y los reglamentos.

''La posición del director de Pemex es de contumacia, sigue insistiendo en que puede llevar a cabo sus contratos y está violando la Constitución. Es muy grave que el gobierno de la República y Pemex, la institución que tiene a su cargo la producción del patrimonio nacional energético, esté buscando a través de toda clase de eufemismos y enredos violar la Constitución para entregar el gas a empresas extranjeras'', consideró Bartlett.

Muñoz Leos expuso, al comparecer ante integrantes de la Comisión Permanente del Congreso, que para este año la producción nacional de gas seco para el mercado interno se estima en casi 4 mil millones de pies cúbicos en promedio diario, en tanto la demanda interna se sitúa en 5 mil 200 millones de pies cúbicos diarios, considerando a los sectores eléctrico, industrial y petrolero, cifra esta última que representa un incremento de 21 por ciento en comparación con 2002.

Detalló que para 2003 sólo el consumo de gas de la CFE se estima en casi mil 900 millones de pies cúbicos diarios, 47 por ciento más que el ejercicio previo. Estimó que el sector industrial y las empresas distribuidoras elevarán su demanda del energético en 9 por ciento, para alcanzar poco más de mil 240 millones de pies cúbicos. Mientras, Pemex también tiene previsto elevar su consumo a casi 2 mil 100 millones de pies cúbicos, 12 por ciento más que en 2002.

Faltante de 100 millones de pies cúbicos al día

''De esta manera, y utilizando al máximo nuestra capacidad de importación, podríamos disponer de una oferta de gas por casi 5 mil 100 millones de pies cúbicos diarios, 4 mil de producción nacional y mil 100 de importaciones'', señaló.

En este punto, el funcionario expuso que Pemex va a registrar en el año por lo menos un faltante de alrededor de 100 millones de pies cúbicos diarios, particularmente en los primeros ocho meses, aun con la entrada en operación en abril próximo de un nuevo ducto que interconectará, por la ciudad de Reynosa, ambos lados de la frontera de México y Estados Unidos.

Más aún, abundó, la capacidad de Pemex para transportar gas del norte al sur del país también se habrá de ver rebasada por cerca de 200 millones de pies cúbicos diarios, sobre todo en los primeros nueve meses del año.

''Así, en coordinación con las autoridades energéticas y sus clientes, Pemex se ve en la necesidad de reducir, en 2003, la disponibilidad de gas para la CFE a mil 700 millones de pies cúbicos diarios. Este volumen representa una disminución de 200 millones respecto a la última demanda estimada por el sector eléctrico en diciembre pasado, que fue de mil 900 millones barriles diarios'', indicó Muñoz Leos.

El director general de Pemex informó que, aun con el hecho de que las importaciones de gas se han mantenido al máximo desde enero pasado, el sistema de distribución se encuentra operando en niveles críticos debido a que su capacidad está rebasada por la demanda.

''Aunque los proyectos de gasoductos que actualmente está desarrollando el sector privado para incrementar las capacidades de importación y distribución avanzan de acuerdo con sus programas, en los primeros nueve meses de este año tendremos que considerar distintas alternativas de suministro de combustibles, tanto para la CFE y otros clientes, como para el propio Pemex'', dijo Muñoz Leos.

Entre las alternativas que ha desarrollado la empresa, citó sustituir el gas natural por diesel (que es más contaminante) en algunas centrales de generación eléctrica de la CFE; cambiar por nitrógeno parte del consumo de gas para bombeo neumático que se utiliza en la extracción de crudo marino; consumir más combustóleo en las refinerías para bajar el uso del gas; y disminuir los consumos de gas en las plantas petroquímicas de Pemex, sin reducir todavía más ''sus ya afectados niveles de producción''.

Después de plantear la incapacidad de Pemex para atender la demanda de gas, Muñoz Leos señaló que si se quiere cubrir los requerimientos de consumo interno e incrementar la oferta del combustible se ''debe aumentar la producción''.

Señaló: ''la necesidad de aumentar nuestras importaciones nos ha colocado en una situación de dependencia con respecto del mercado de Estados Unidos, caracterizado a su vez por una enorme demanda, una producción decreciente y cuantiosas importaciones''.

Ante esta situación, ejemplificó, el gobierno federal ha advertido que en todo el mundo se ha presentado una clara tendencia de apertura a la participación de los particulares en la producción de petróleo y gas. ''Esta apertura responde, entre otros factores, al apremio de aumentar la capacidad de explotación de los hidrocarburos''.