Se realizan en varias localidades de España
actos de condena al grupo armado
Guardia municipal de localidad vasca muere en atentado
atribuido a ETA
En marchas silenciosas denuncian la barbarie
y la persecución fascista de la organización
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 8 de febrero. El sargento Joseba Pagazaurtundua,
jefe de la guardia municipal de la localidad vasca de Andoain, murió
hoy víctima de un atentado atribuido a un supuesto comando del grupo
armado vasco ETA.
Después de recibir tres disparos a bocajarro, Pagazaurtundua
fue trasladado a un hospital de San Sebastián, donde murió
tres horas después.
En el País Vasco, Madrid y otras localidades se
realizaron diversos actos de repulsa a esta nueva acción atribuida
a ETA, la primera en lo que va del año con saldo mortal.
Pagazaurtundua,
de 45 años y con dos hijos, era, además de guardia municipal,
miembro del colectivo ¡Basta ya! (formado por víctimas de
las acciones violentas de la organización separatista y familiares
de aquéllas) y hermano de la ex parlamentaria socialista Maite Pagazaurtundua.
El sargento policial fue tiroteado esta mañana
mientras desayunaba en el mismo bar de todos los días, el Daytona,
donde un hombre que actuó con la cara descubierta, y que lo esperaba
desde unos minutos antes de las 10 de la mañana, le disparó
en tres ocasiones.
El policía municipal vasco no contaba con escoltas
a pesar de haber sido víctima en el pasado de al menos un atentado
fallido y varias amenazas de muerte por parte de los seguidores de la organización
armada, que desde el asesinato de un guardia civil el 17 de diciembre pasado
no había perpetrado ningún atentado mortal.
El agente municipal se encontraba actualmente de baja
del cuerpo y había estado fuera del País Vasco, debido precisamente
a las amenazas de ETA, si bien regresó hace cuatro años.
Este nuevo atentado mortal desató un cúmulo
de manifestaciones de repulsa y condenas, que suscribieron todos los partidos
políticos de la región, con la excepción de la suspendida
coalición Batasuna, considerada brazo político de ETA.
Además hubo diversas concentraciones silenciosas
para denunciar la "barbarie" y "persecución fascista" por parte
de ETA, como sucedió en Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Pamplona,
Madrid y Barcelona.
El punto de máxima tensión se registró
en el pleno municipal de condena en el propio pueblo donde se cometió
el atentado, Andoain, gobernado por la formación heredera de Batasuna,
Sozialista Abertzaleak, cuyos ediles fueron recibidos con gritos
de "asesinos" y "fascistas".
Antes del inicio de la sesión de condena, el salón
municipal se encontraba atestado de miembros de ¡Basta ya!, entre
ellos el filósofo Fernando Savater, así como por representantes
del Partido Popular (derecha), del Partido Socialista de Euskadi y el vocero
del gobierno vasco, el nacionalista moderado Josu Jon Imaz.
En el momento más crispado de la sesión
se registraron algunos forcejeos y amenazas. El concejal abertzale
Jesús María Olazábal Iñurrita se desmarcó
de su grupo, que se abstuvo en la votación de condena, al manifestar
"a título personal y sin paliativos" su repudio al atentado.